"Hoy la libertad, se ha quedado dormida y en silencio
Hoy la libertad, ha cerrado por defunción
Hoy la libertad, se ha muerto de pena y melancolía
Hoy no hay libertad, hoy Dios no está aquí ni vendrá"(1)
Las grandes personas tienen grandes vidas y grandes muertes. Las grandes personas solo han existido pocos entre la multitud, las grandes personas estan en una lista de oro, las grandes personas son recordadas cada año en su muerte o nacimiento. Ella no era una gran persona, ella estaba tirada en un almacen junto a otras personas, ella tenia un hombre encima que la mantenia sujeta mientras empujaba contra ella.
Ella no tendria una gran muerte, ella estaria en una lista de nombres junto con cientos más. Tal vez se sabria de ella pero por unos cuantos días, ella solo seria recordada por su madre, su padre y sus hermanos. Su familia...ella recordó el rostro de su madre, el cual estaria preocupado y alarmado, sus hermanos posiblemente habrian ido a casa para apoyar y cuidarla, su padre...no sabía cómo reaccionaria, su hermana seguramente habria llorado y estaria furiosa. Ella siempre habia dicho que romperia la ciudad, que reduciria todo a cenizas si algo amenazaba con su familia. Pero ahora estarian sintiendose impotentes, ella misma se sentía así.
"Hoy la vida llueve penas
Gotas de desesperación
Mis lágrimas son ríos, venas
Desangrándome el corazón" (2)
Habia ocho hombres en el almacen, Sofia sabía que habria más pero por el momento estos eran los que costudiaban el almacen . Todos se habian turnado para arremeter contra ella y contra otras chicas. Había gritos de desesperación, habia gritos de dolor, habia sollozos, habia quejidos, habia golpes...nada habia cambiado desde el día que llegó. No sabía cuanto tiempo había pasado, fueron pocos los momentos en que pudo ver la luz del día o la noche estrellada, fueron los mismos en los que una nueva chica habia llegado. Cada una igual que ella, arrastrada por tres hombres hasta el centro donde la amarraron y la desnudaron para luego golpearla y violarla hasta el cansancio.
Todas habían pasado por lo mismo, incluso los pocos chicos que se encontraban ahi. Sofia había gritado, había llorado, había mordido y habia sangrado al igual que todos pero ella habia dejado de llorar y gritar cuando se dio cuenta de que eso les divertia, ella no habia dejado de forsegiar cuando sus muñecas sangraron, no habia dejado de morder y patear incluso cuando la habian azotado o quemado. No le importo el dolor, no cuando su pie habia golpeado la boca del hombre que la habia raptado se lleno con sangre, solo su voluntad flaqueo cuando quisieron cortar su piel pero otro de los hombres, Andres, habia intercedido no por ella sino que sus compradores solo aceptaban cierto grado de magulladores en su mercancia.
"Hoy mis lágrimas se quieren suicidar
Acurrucadas, morir en tu piel
Han nacido secas, tienen sed
Mi llanto se quiere morir"(3)
Sofia ya habia sido acosada antes. En el transporte mientras iba al colegia, muchos hombres de varias edades la habian visto queriendo desnudarla sin importar cuanta ropa llevara encima, sin importar que fuera diez, vente o treinta años menor que ellos. Varias veces sus compañeros de clase habian intentado tomar fotos bajo su falda, algunos incluso se tomaban la libertad de darle una palmada en el trasero o a tomarla del brazo, otros solo se limitaban a darle miradas y frases obsenas. De cualquier forma todos eran igual de desagradables.
Aunque lo peor de todo es cuando su hermana le habia dicho que se cuidara en las calles, o su tia cuando en su cumpleaños numero 18 noto la blusa un poco señida a su cuerpo y le dijo que vestirse así provocaria que la secuestraran. Su tía se habia equivocado, no llevaba ropa reveladora, llevaba unos pantalones, una blusa dos veces más que su talla, un sueter de cuello alto, una chamarra encima y la bufanda que su madre le habia comprado dos dias antes, además de que cargaba su mochila llena de los libros de la universidad.
Ella ya habia sido seguida antes, como la mayoria. Ella lo ignoro al igual que siempre, aunque esta vez esa vocecita de alerta se inicio. Varias veces habia la habia sentido, y cuando se lo mencionó a sus amigos o a su pareja le decian que estaba exagerando. Es por esto que ahora no prestó atención, tenía varias presentaciones en la universidad, ella no debia descuidar sus materias ni su trabajo.
Cuando ella sintio el primer golpe el peso de su mochila la llevo al suelo. El segundo golpe le dio a su brazo un ardiente dolor. Varias veces habia pensado en sus posibilidades si algo así sucedia, ella habia escuchado diversas historias como esa pero nunca pensó que pudiera pasarle. El hombre era más alto que ella, era más ancho pero no se dejaria así como así. Sofia se desprendio de su mochila de la cual la intentaba tomar, el movimiento hizo al hombre perder un poco el equilibrio, ella uso el poco tiempo para buscar algun objeto que le ayudara. Siempre supo que sus posibilidades de ganar contra uno eran grandes, ella era inteligente y eso la alentaba ahora, hasta que otros dos tipos llegaron cerrandole el paso.