Hola extraño: me gustas.

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21 de junio 2018

 

 

¿Jerry, no has notado que últimamente este diario se ha convertido en una bitácora de mis avistamientos Omarísticos (le llamaré así de ahora en adelante)?

Me di cuenta esta mañana, cuando lo vi entrar en la cafetería y me di cuenta de que no había escrito nada porque nada había pasado. Con él, nada había pasado con él. En el trabajo, por ejemplo, fue un señor barbudo a comprar un ramo de Petunias e hice un chiste de mal gusto, de esos que habría provocado que Ivy se muriera de la vergüenza, pero el señor se carcajeó, me dijo que era graciosa y luego dejó propina. Eso fue interesante, pero no lo escribí.

A mitad de la semana la vecina del frente llegó llorando porque se había muerto su gato, no sé cómo, pero mamá estuvo consolándola por horas, al final terminaron tomando chocolate y cantando canciones de Amanda Miguel a todo pulmón. Coherencia cero y no lo escribí.

Además Ivy llamó para decir que se tomaría un poco más en sus vacaciones, preguntó si todo estaba bien y le dije que sí. Pregunto si había vendido mucho y le dije que lo normal. No gritó en ningún momento, parecía calmada y de buen humor, dijo que me traería un regalo y eso tampoco lo escribí.

Sin embargo hoy vi a Omar entrar en la cafetería, yo estaba en mi asiento de siempre, y de hecho no tenía muchas esperanzas de verlo a esas horas, pero apareció. No lucía muy feliz y eso ya era una novedad, además de que llegaba como media hora tarde, no sé y de repente pensé que debía contarte. O sea, escribir… tú me entiendes, Jerry.

En los últimos días el asiente hacia mí cuando se marcha, pero hoy no lo hizo. Tal vez solo estaba retrasado o quizá algo lo había molestado y hecho llegar tarde al mismo tiempo. No tengo idea.

Me quedé mirándolo hasta que desapareció de mi vista, Jerry, creo que quedé tan embobada que se me olvidó disimular. Y respirar. Creo que a estar alturas todos los clientes recurrentes de la cafetería saben que me gusta Omar.

Todos menos él.

Quisiera poder seguir tu consejo y acercarme, pero solo de pensarlo comienzo a hiperventilar.

¿Sabrás ejercicios de respiración, Jerry? Tal vez deba preguntarte en nuestra próxima sesión.



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En el texto hay: obsesion, diario, psicologo

Editado: 18.04.2022

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