Capítulo 7: Tiempo fuera

(Perspectiva Alex)

Xana sigue atacándome esta vez utiliza sus poderes de levitación para lanzarme rocas, yo logró evitarlas destruyéndolas con mi brazo y vara. Se me ocurre utilizar el poder de absorción y golpearlo en la cara, pero se nota que está bien protegido.

—Eres un rival duro Alex— pero te hace falta mucho por aprender.

Golpea su báculo al suelo y veo que se convierte en un tauro de piedras, golpeo la tierra para crear grietas, pero eso no lo detiene, se acerca velozmente para atacarme así que salto para montarme en su espalda y poderlo dominar como un toro mecánico.

El no logra controlar los golpes que le doy hasta que un momento me lanza al suelo y me golpea para estar en los limites del área. Sigo sin ideas creativas no creo poder imitar sus movimientos y no se cuanto pueda durar, la arena cada vez se pone difícil y estoy en contra de todo.

(Perspectiva Charles)

Las cosas en Nueva Irlanda están cada vez más difíciles, han mandado guardias armados con la más alta tecnología a los limites protegidos por la barrera, no sabemos que nos depara, pero sabemos que vienen por Hanna y PIA, recibimos reportes de varias ciudades que son atacadas por el fango negro: Paris, Sydney, San Salvador, Cali, Ancud, Santa Fé, Hidalgo son apenas las primeras victimas tengo esa sensación de que peores cosas vienen.

Los antiguos miembros del proyecto elite están protegiendo a los civiles nosotros solo esperamos la primera señal de invasión.

—Estas bien— dice Hanna.

—Si— suspiro.

—Todo mejorará— dice.

—¿Cómo lo sabes? — digo.

—Estoy con ustedes y si es necesario peleare por su causa— dice.

En esos momentos escuchamos el ruido de un temblor, tomo mi traje y salgo al pabellón principal en donde se encuentran los demás.

—Baru, ¿Qué ocurre? — digo.

—Parece que algo viene, pero no es Crusher— responde.

Vemos una fuerte ventisca y un grupo pequeño de mercenarios acercándose, el rastreador X viene en su vehículo todo terreno alienígena. Baruka nos pide ir a los limites para poder dialogar en paz.

—Crusher no es bienvenido — dice Baruka.

Los demás preparamos nuestras armas en caso de contraataque.

—Tranquilo portador del espíritu del lobo, venimos para darles una advertencia— dice X.

—La única advertencia emitida será la de Nueva Irlanda— dice Baru.

—Crusher tarde o temprano tendrá que venir por los otros dos espíritus así que es mejor no interferir con sus planes— dice X.

—Dile a tu amo y señor que lo único que tendrá será la ira de un pueblo— dice Baruka.

—Les recuerdo que no tienen mucho tiempo antes de que comience la invasión— dice X.

Baruka y los demás nos retiramos mientras que el ejercito de mercenarios se queda a la espera de que ocurra la invasión por ahora no podemos hacer nada más que planear la estrategia, pero solo tenemos una opción y es proteger a toda costa a saber que puede pasar.

No sabemos cuanto podremos aguantar hasta que envíen el fin del mundo en pequeños paquetes violentos.

(Perspectiva Crusher)

—Señor— dice mi súbdito.

—Dime—

—Ya casi se cumplen las veinticuatro horas que puso al planeta tierra para entregar a los últimos portadores del espíritu— dice mi súbdito.

—¿Cuál es tu nombre? — exijo.

—Rubran—

—Estos miembros de la tripulación Holland piensan que tienen una oportunidad contra mí y sabes que tengo yo— digo.

—No— dice Rubran.

—Principios. Esa es la diferencia entre un dictador y un benefactor social— digo.

—Aunque no lo creas no soy un villano o un simple genocida, yo me preocupo porque la evolución siga su curso natural, los humanos solo se han retrasado cientos sino es que miles de años—

—¿Qué piensa hacer? — dice.

—Qué te parece si conservamos a la raza humana y evolucionamos así les mostraremos como es que se deben hacer las cosas— digo.

(Perspectiva Alex)

Aún estoy de pie, pero Xana parece estar agotado de tanto escape que realizo lo único que se me ocurre es el combate cuerpo a cuerpo el solo lanzarle rocas no me beneficia y yo ya casi puedo ver todo borroso.