Capítulo 17

Valeria regresó en ese justo momento con los papeles en la mano y una sonrisa en su rostro. Aparto la vista de Fermín porque si sigo mirándolo no podré contenerme de seguirle preguntando cosas sobre mi madre sin importar que Valeria ya esté delante de nosotros. Se suben al auto y yo me quedo del otro lado de la ventanilla.
– Nos vemos, cuídense.
– Adiós Celeste. –me dice Valeria en lo que arranca el motor.
Pero antes de ponerse en marcha, Fermín me dice a través de la ventanilla en lo que me toma de la mano que tengo apoyada en la puerta del auto.
– Nosotros nos iremos mañana al mediodía hacia Bersey, si quieres puedes venir con nosotros.
– Le agradezco la oferta pero mejor me quedo aquí. Nos vemos Fermín y gracias por todo.
– Si surge algo no dudes en buscarme. Adiós Celeste.
Me retiro de al lado del auto de modo que me quedo observando cómo desaparece al final de la calle. Se fue la única persona que me conoce o que por lo menos conoce algo de mi familia, pero era lo mejor. Mi mamá ya no está en este mundo y mi papá es como si no estuviera, así que es momento de empezar de nuevo y dejar de perseguir mi pasado.
  Estoy tan metida en mis pensamientos, que no me percato que Mary tiene la furgoneta parqueada frente de mí, hasta que toca la bocina y me grita para que entre al auto.
De regreso en la cabaña, subo a mi habitación y tomo una ducha. Intento apartar todo lo sucedido hoy por un rato, y despejar mi cabeza pero termino sentada en el filo de la cama mirando al vacío. – ¿Habré hecho lo correcto? –me repite una voz en mi cabeza. Antes me sentía abrumada por no recordar nada, y ahora me siento más abrumada aún por haber recordado algo. No sé qué le pasa a mi mente.
De repente Matías abre la puerta de la habitación y se queda mirándome con preocupación. Tengo tanto que contarle pero no logro articular palabras. Nos quedamos sin hablar hasta que él interrumpe el silencio.