Tirada
Mirando a la nada
La suave penumbra la abraza
Está sonriendole al techo
Sus mejillas bañadas
Sus ojos están en tormenta
Su curva se ensancha
Las cascadas por sus ventanas aumentan
Y lo logra
Finalmente se ahoga
Su alma se ha escapado por aquel rio
Ha pasado por aquella cueva dentelleada
Se ha precipitado por sus clavículas
Y ha dormido en su pecho.