Victoria:
-Victoria-Marisa hablo entrando en mi habitación, se le veía una gran resaca, le sonreí-Tu padre está al teléfono-Hablo dándome el teléfono, con un ojo pude ver mi teléfono 3 llamadas de él, era medio día.
-Rob buen días-Hablé con una pizca de gracia, reí al escuchar su típico regaño por llamarlo por su nombre-Disculpa, papá-Dije con mala gana
-Nick pasara por ti, dentro de 20 minutos, arréglate Vic-Hablo Rob con su típica voz autoritaria
- ¿Nick? –Pregunte con duda
-Si ¿Algún problema? –Pregunto y suspire
-No-Conteste-Aquí lo espero-Dije simplemente y colgué, le entregué el teléfono a Marisa, quien se encontraba acostada a la orilla de mi cama- ¿Estás bien? –Pregunte viéndola con una sonrisa
-Si claro-Me sonrío- ¿Qué quería? –Pregunto mientras se reincorporaba, su cabello estaba en una coleta alta
-Nick vendrá en 20 minutos-Suspiré y me acosté de nuevo
- ¿Nick? –Pregunto sorprendida y asentí
-No quiero ir-Me queje
-Está bien linda-Tomo una de mis manos-No será tan malo-La observe sin creerlo-Okay quizá sí, pero es tu papá, anda, apúrate-Dijo y se levantó para salir de mi habitación, a regañadientes me puse de pie y me di una ducha rápida, me puse unos jeans de tiro alto, mis tenis blancos y un top gris de manga larga, busque un bolso y metí mis cosas necesarias, cargador, dinero y gas pimienta, escuche como tocaban la puerta de mi casa, Nick estaba abajo.
-Princesa-Mi abuelo estaba por subir las gradas en cuanto me vio-Vinieron por ti-Dijo y asentí bajando
- ¿Dónde está tu hija? –Pregunte, sonrió, me indico la cocina con la cabeza, lo abrace y le di un beso de despedida-Marisa-Grite entrando a la cocina-Me voy, vendré lo antes posible, te amo-Dije y le di un beso, después camine a la salida, encontrándome con Nick, lo salude de beso y me abrió la puerta del coche.
- ¿Cómo te ha ido? –Pregunto Nick viéndome de reojo
-Bien ¿y a ti? –Pregunto
-Bien, me fui a un campamento, te extrañé-Dijo dándome un leve golpe en el brazo, simplemente le sonreí y asentí, regresando mi vista hacia enfrente-Creo que deberías atarte el cabello
- ¿Ella también está aquí? –Pregunte en forma de queja, el asintió-Odio los domingos-Me queje mientras me hacía un chongo, alto, jale mi bolso y me lo puse para bajar.
-A los abuelos les dará gusto verte-Hablo Nick a mi lado y reí, como si se acordaran de existo, tocamos la puerta y mi abuelo nos abrió, me saludo de forma casual y nos invitó a pasar, a lo lejos podía escuchar la bulla de toda mi familia, quienes se sorprendieron al verme, salude con un simple “Buen día” y camine hasta donde se encontraba Rob.
-Vic, estas muy linda-Hablo mientras me abrazaba, le sonreí, él se aclaró la garganta y se volteó a ver a la pequeña niña que se encontraba sobre las piernas de su madre-Mira quien está aquí nena-La niña centro su atención e hizo un puchero y se volteó, ella sabía que somos hermanas, pero no estaba acostumbrada a mí.
-Valentina-Salude en cuanto regreso la vista a mí, palmándole la cabeza-Cristina-Salude con la cabeza a la esposa de Rob, ella simplemente me sonrió, si Valentina era mi hermanita de 2 años, aunque a comparación de mí, ella no se parecía tanto a Rob, más bien era una mezcla de sus dos padres.
-Pero siéntate Vic-Rob me aparto una silla para que pudiera sentarme, le agradecí y me senté quedando en medio de Nick y el, me tome un momento para ver a Rob, se le veían algunas canas, su cabello era café igual que el mío, igual de rizado, tenía puesto sus lentes, una camisa blanca, pantalón de vestir y zapatos negros, realmente Rob era un hombre muy guapo para su edad.
- ¿Quieres jugo? –Hablo Nick a mi lado, asentí, iba a tomar la jarra, pero el comenzó a servirme- ¿Así? –Pregunto, en cuanto dejo un poco más de la mitad mi vaso
-Sí, gracias-Le sonreí, él me devolvió la sonrisa y continúo pasándome la comida, después de un desayuno un poco entretenido escuchando las pláticas de mis tíos, de vez en cuando respondiendo sus preguntas, decidí caminar hacia uno de los columpios.
-Hola-Nick se sentó a mi lado, le sonreí y volví a mirar mis pies que jugaban con el pasto- ¿Podemos hablar? –Eleve una ceja mientras lo veía-No quiero que todo esto siga así de incómodo para ambos-Hablo y volví a bajar la mirada asintiendo
-Está bien, después de casi dos años, creo que es lo correcto, tenemos que olvidar todo-Hablé, Nick y yo éramos buenos amigos desde secundaria, ahí fue cuando nuestros padres se conocieron, al parecer mantuvieron una relación en secreto, cuando entramos a prepa, comenzamos a salir, si, lo sé, se escucha extraño ya que ahora somos hermanastros, hasta que Cristina quedo embarazaba de Valentina y no pudieron seguir ocultándolo, para ese entonces Nick y yo estábamos pensando en tener algo más serio, pero cuando nos enteramos era demasiado tarde, Nick me culpo por lo que estaba pasando, decidió alejarse de mí, para cuando Valentina nació yo ya estaba en mi nueva preparatoria, él había decidido irse a vivir con su padre y no lo había visto, hasta hoy.
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-Solo quiero pedirte disculpas, sé que no fue tu culpa lo que paso entre ellos, es solo que estaba molesto-Observo a nuestros papas-Y pues enserio me gustabas-Hablo y me sorprendí, Nick no es una persona que demuestre fácilmente sus sentimientos.
-Si bueno, tu a mí, pero ahora lo que compartimos es a esa monstruita-Dije riendo y vi como Valentina caminaba hacia nosotros con las manos en la espalda, regrese mi vista a Nick cuando hablo.
-Sí, quien lo iba a decir, terminaríamos siendo hermanastros-Se puso de pie mientras se reía-Pero eso no quiere decir que hayas dejado de gustarme-Hablo casi en un susurro, pero alcance a oírlo.
- ¿Qué? –Pregunte sin creer lo que había escuchado
- ¿Qué? –Repitió sonriendo y camino hacia Valentina para cargarla, la pequeña soltó una risa, observe a Nick, su cabello ahora estaba más corto de como solía llevarlo antes, estaba un poco más bronceado, su cuerpo estaba más trabajado y había cambiado su forma de vestir, sonreí recordando la primera vez que lo vi, las veces que lo moleste por ser un año mayor que yo y seguir en mi grado, aunque sabía que no era culpa suya, me solté el cabello para cubrir un poco el sol de mi cuello, baje mi rostro, pero escuche como Nick dio un grito en forma de quejido, levante la vista y vi a Valentina con mi gas pimienta en la mano, si le había rociado los ojos a Nick, me puse de pie.