Un año atrás...
Samantha
Observe la pantalla sin poderme mover durante lo que pareció una eternidad, estaba completamente quieta procesando lo que acababa de ver, las lágrimas se apoderaron de mis ojos y comencé a sentir la calidez de ellas en mi mejilla. Era mi hermano.
Y estaba con él.
Estaba con él, joder.
"Antes éramos 4"
"Lo perdí hace un año"
Se refería a mi hermano, y yo no me di cuenta.
Entonces, ¿Ellos se conocían? ¿Que hay de Lisa? ¿Y de Andy? ¿Todos me habían mentido?
¿Solamente se habían acercado por él? ¿En realidad no era tan especial como él decía?
Mientras las preguntas se apoderaban de mi cabeza y las lágrimas de mis mejillas yo iba de camino a casa, tengo que averiguarlo, tengo que saber la verdad, no puedo seguir con tantas mentiras.
Tengo que saber qué paso con mi hermano.
Subí las escaleras con rapidez y al entrar solamente estaba Lisa con un libro en la mano, sonrió al levantar la cabeza y verme entrar, pero la sonrisa se le borró en el momento en el que vio la caja que tenía en la mano. Las pertenencias de Liam.
- Sam... - intento decir con un nudo en la garganta - ¿Dónde encontraste eso?
La observe sin decir nada, la habitación se inundó de un silencio tenso. Joder, ¿que se supone que haga? No soy capaz ni de dirigirle la palabra porque se que me quebrare al intentarlo, aún así, debo de hacerlo, no puedo retrasar esto más tiempo, por más de que se como va a acabar.
Abro la boca para tratar de decir algo, cuando la puerta se abre de nuevo y no necesito darme la vuelta para saber qué son Luka y Andy. Al entrar, ambos se dan cuenta del ambiente y mantienen el silencio.
- Lo conocían, ¿No es así? - logró susurrar - Conocían a mi hermano incluso antes de que yo viniera aquí.
Todos seguían en silencio, me aleje para poder observar a Andy que agachó la cabeza al igual que Lisa. Luka me mantuvo la mirada unos segundos y pude ver a través de él: dolor, culpa y confusión. Sus ojos se llenaron de lágrimas.
- Respondan - exigí, aunque sonó más a una súplica - Díganme que me estoy equivocando.
- Sam - susurro Lisa con la voz rota - te juro que podemos explicarlo.
- ¿Explicar el qué, Lisa? ¡¿Explicar que me mintieron durante un jodido año?! - mi voz se lleno de coraje.
- Te juro que no es como piensas - inició Andy - tratamos de decírtelo, muchas veces, pero simplemente no pudimos.
- ¿No pudieron decirme que estaban con él ese día? - respondí lentamente, viéndolo a los ojos tratando de mostrarme fuerte - ¿No pudieron decirme la verdadera razón, ni mucho menos, que lo conocían? Hemos pasado muchas cosas Andy, hubieron tantas oportunidades, tantas, y nunca lo hicieron. Se suponía que eran mis mejores amigos - se me rompe la voz al decirlo.
- Lo somos - susurro Lisa de nuevo - de verdad, lo somos, fue un error nuestro, entramos en pánico y no sabíamos que hacer.
- No, Lisa. No lo son, de haberlo sido me habrían dicho como mínimo el porque te acercaste a mí. - mi voz iba cargada de dolor, estaba a punto de decirle lo que más me dolía - Porque no fue porque te pareciera increíble, ¿verdad? - hice una pausa para mirarla - lo he visto todo, he oído cada palabra de la llamada con Liam ese día. En realidad no te acercaste a mí por casualidad, ¿No es así? Te acercaste porque tenías que estar al tanto de mi vida, para que no descubriera nada sobre lo que paso realmente.
Las lágrimas descendían por mis mejillas de nuevo, tomé aire y volví a hablar.
- En realidad no me trajiste aquí para ayudarme a superar las cosas, no me trajiste aquí porque eras mi mejor amiga, lo hiciste porque de no ser así, tardaría menos en encontrar la verdad, podrían estar al tanto de que pasaba conmigo. Para no sentir culpa de que me haya quedado sola ¿verdad?
- Él quería que pensaras que fue de esa forma, no quería que se arruinara la imagen que tenías de él y tiraras tu vida por una decisión suya - susurro Andy de nuevo - No quería que te perdieras, no quería dañarte de tal forma.
- Aunque haya sido para mantener la idea de él limpia, merezco saber la verdad, merezco saber que paso realmente. Merezco saber cómo murió. Él era mi hermano, de no ser por él no hubiera podido seguir cada vez que caía, él estuvo para mí, necesito saber al menos por qué murió - sollocé.
«Por qué la culpa nos invade» porque no solo era a mi, era suficiente verlos a ellos para saber qué pensaban lo mismo que yo.
Solamente que ellos si saben la verdad, yo no.
- Él estaba sofocado, ya no podía más, su mente era una tormenta constantemente, en si era suficiente para ti - empezó diciendo Luka, hablando por primera vez - Ese día llegó a su límite, me pidió que fuera con él, en cuanto llegue llamé a Andy y a Lisa, nos dijo que había encontrado a su madre, que fue tan... Doloroso.
Hizo una pausa, su voz estaba llena de dolor.
- Su madre no lo recordaba, ella no sabía quién era él. La había encontrado al fin, pero ella ya tenía una nueva familia, y ni siquiera sabía quién era el, Sam. - susurro, sentí un escalofrío al escuchar su voz tan rota - nos dijo que no sabía que hacer, la había buscado tanto tiempo y no sirvió de nada, para ella él ya no existía. Lo recogí e íbamos en el auto, aún hablando con Lisa y Andy. Yo manejaba y el iba a la par mía, no estaba prestando atención a la carretera porque me interesaba más verlo a él, mi mejor amigo, destrozado, no fue solo por lo de su madre, sino por todo en general.
Me miro con los ojos rojos y lágrimas en las mejillas.
- Un auto venía en contra nuestra, manejando sin cuidado, un borracho supongo, pero nos dimos cuenta muy tarde. - y antes de que yo hablara añadió - movió el volante y evito que el dañado fuera yo, me salvo la vida. Antes de ello, cuando íbamos de camino, nos dijo que ya era momento de que se fuera, que ya no podía más. Trate... trate de detenerlo, hacer que entrara en razón. Vio la oportunidad y la uso, y al mismo tiempo me salvo la vida. Sabíamos que le pesaba dejarte sola, que no quería que te culparás por su muerte, nos pidió que te buscáramos y cuidáramos de ti. No te mentimos en qué fue suicidio, Sam, porque preferimos verlo como un acto de valentía, el no querría que lo vieras como alguien débil, queria que te quedaras con el chico fuerte que era. Te diríamos poco después como pasó, pero tenía miedo, no quería que me culparás y te alejaras de mi. Fue mi culpa.
En cuanto termino de hablar lo mire en completo silencio, yo solamente quería salir de ahí, él se preocupo por mi, no fue porque peleara con el antes, por mis palabras hacia él.
- Pase desde entonces creyendo que fue culpa mía, por haberle dicho tantas cosas cuando peleamos, pensé que colme el vaso. - dije tratando a toda costa de no llorar - lo sabías, Luka, te dije numeradas veces que me culpaba por ello, y solamente decías que no era así, no me dijiste la verdad.
- Lo sé, yo debí...
- No, Luka, se suponía que me amabas - observe a los otros dos en la habitación, mientras me volvía a quebrar - se suponía que eran mis amigos.
Sabía que esas palabras les dolían, pero no podía evitarlo, necesitaba sacar los pensamientos.
- Y lo hago, Sam, lo sabes - dijo desesperado.
Incluso en este caso, me dolía verlo tan dolido y desesperado, de no ser está la situación, hubiera ido a esconderme en sus brazos, pidiendo que me abrace hasta que se hiciera de día de nuevo. Pero no era así, y en realidad ese amor surgió a base de una mentira.
- El amor no son mentiras, Luka. Me veías llorar y culparme sin decir nada. Podías tenerme entre tus brazos, o mirarme a los ojos, podías besarme y aún así, no decirme nada, consolarme con palabras vacías, cuando en realidad lo sabías todo. El amor es decirle las cosas al otro, hacer todo lo posible para que la otra persona se quede, por qué no sufra, por tenerla a tu lado, no obligarla a irse. Incluso cuando lo último que quería era hacerlo - añadí en un susurro.
Retrocedí unos pasos y tome la manilla de la puerta.
Al ver mis intenciones su rostro se lleno de miedo, miedo a que me fuera.
- Sam, no te vayas, por favor - suplico él en un susurro, mientras las lágrimas caían de sus ojos - No me dejes, podemos arreglarlo. No quería que me odiaras, no quería que me vieras tal y como yo me veo, no quería que te fueras, quería encontrar la forma de decirlo sin que me aterrara perderte.
- ¿Sabes que es lo peor, Luka? - dije dolida, necesite arrancarme las palabras de la garganta - Que pienses que te habría culpado, odiado. Incluso ahora, no lo hago, porque se que no fue tu culpa, él hizo lo que tú habrías hecho por él - dije viéndolo a los ojos - hubiese sido más fácil si me lo decían, hubiera dolido menos, habría entendido más. Ahora solamente pienso en que todo lo que han hecho por mi desde que me conocen, fue por culpa, no por amor.
- Sam, no es así. - susurró.
- No lo sé, solamente quiero salir de aquí, porque cada vez que los veo solamente recuerdo el hecho de que mis mejores amigos y el chico del que me enamoré, en realidad no están porque vieron quien soy, solamente intentan sentirse menos culpables por la mentira que le dijeron al mundo.
Él me observaba en silencio, suplicando con la mirada que no me fuera. Lisa y Andy me miraban llenos de lágrimas, rogándome que los perdonara y comprendiera. Lo haría, pero ahora solo quiero pensar, estar sola. Las inseguridades llenaron mi cabeza sin detenerse, joder, ¿De verdad me querían, o fue solo por culpa? Lo niegan, pero, ¿Cómo se supone que sepa que es verdad?
- Este anillo, no es para mí, Luka - susurré dejándolo en la mesa - No pertenezco aquí, aunque, por un momento, me hicieron sentir en casa, ahora no paro de pensar en si de verdad me vieron, o solo me hicieron creer que sí.
Antes de cerrar la puerta, añadí en un susurro:
- Creí haber encontrado mi lugar seguro en ustedes, pero creo que esto iba a pasar, tarde o temprano, se terminaría acabando.
Cerré la puerta y me dirigí al auto, estaba lloviendo demasiado, estaba a punto de subir a el cuando escuché un grito.
- ¡Samantha!
Me gire, era Luka, estaba tan empapado como yo.
- Samantha, si quieres irte esta bien, pero no lo hagas ahora, está lloviendo demasiado, me da miedo que te pase algo, desde lo que paso con tu hermano... - se corta, desesperado con los ojos cristalinos - solamente espera a que se pase, no quiero que te hagas daño.
Oírlo tan preocupado me revolvió el estómago, joder, ¿Por qué es tan difícil? Si no hubiera pasado esto, seguiríamos juntos, sin necesidad de irme, porque estaba tan segura de que este era mi hogar.
Pero no lo era.
Solo me hicieron creer que sí para que no sufriera y así evitar la culpa.
- Se que piensas que todo lo que hice por ti fue por eso, Sam, pero no fue así. Fue porque yo si te vi, aunque digas que no, te vi y me enamoré de ti - dijo como si leyera lo que pienso - por eso te di ese anillo, por eso hice todas las cosas que hice, no por culpa.
Seguí guardando silencio, no sabía que decir sin quebrarme de nuevo.
- Te demostraré que es así, solo déjame hacerlo, está bien si quieres mudarte, lo intentaré igual, pero, por favor, Sam, te lo ruego, no te vayas ahora.
Sus palabras fueron hasta lo más profundo de mi, fue un poco de calidez, incluso ahora, lograba eso, hacer que me sintiera un poco mejor.
- Tengo que irme ahora, o no podré hacerlo después. - dije rápidamente un poco más tranquila - cuídate, Luka, no te detengas en nada. Sigue siendo increíble hasta que regrese.
Dicho eso, me subí al auto y me fui dejándolo atrás. Dejando a mi hogar atrás.
Horas después, ya estaba anocheciendo, faltaba alrededor de 30 minutos para llegar a casa y ver a mi papá, quería decirle todo y que me aconsejará, él sabría que hacer.
Y con esa idea en mente, seguí adelante.
La lluvia seguía cayendo demasiado fuerte "un poco más, aguanta un poco más" me pedía a mi misma, no podía dejar de temblar, joder, estaba aterrada. Luka me conocía perfectamente, debí hacerle caso.
Pero ya no quedaba nada más, ya lo había dejado atrás.
La oscuridad de la noche y la lluvia eran dos cosas que me revolvían el estómago, un poco más, solo un poco más. Mientras seguía manejando, analizaba la situación.
Lisa era mi amiga, y aunque ella no me dijera la verdad, entendía su miedo. Supongo que hubiese entrado en pánico al igual que ella, porque yo tampoco la quisiera perder. Andy no tomaría la decisión de decirme el solo, puesto que es algo que le correspondía mayormente a Luka, él me ayudó siempre que pudo, me escucho, y aunque estaba con Lisa, siempre me cuido a mí también. Me cuido como a una hermana, pero nunca busco reemplazar a Liam.
Y Luka, bueno, el siempre había estado conmigo, desde el minuto uno en el que lo vi, siempre fue increíble conmigo. Puede que mi hermano haya influido, puede que lo haya hecho por él en un inicio, pero aún así, estuvo conmigo siempre, y luego solamente pasó, y está vez no fue por mi hermano.
Liam siempre mencionaba a su mejor amigo, usaba su apellido "Collins" cambiándolo a una abreviatura "Coll" entonces nunca supe a quién se refería. Aunque, ahora que lo pienso, no sé cómo no me di cuenta antes, es el chico increíble que siempre describió.
No podía dejarlos, Luka tiene razón, podemos arreglarlo, de hecho, sentía que nunca había sido tan feliz con alguien que no fuera Liam, y dudo volver a sentirme así en otro lugar.
Tienen que saber qué no lo dije en serio, necesito darles una oportunidad, se que nunca me dañarían por cuenta propia.
Debo volver.
Pero entonces, todo fue demasiado rápido.
Habia un auto en contra vía, no llevaba luces y lo vi demasiado tarde, no supe reaccionar y al final, solamente gire el volante al lado contrario. Mientras todo pasaba, podía ver todos mis recuerdos enfrente de mi, vi a mi hermano, a Lisa, a Andy, a Luka.
No los quiero dejar, al menos deben saber que los perdone, Luka debe saber que no lo deje de amar.
Luka, joder.
No me puedo ir aún, no quiero que se culpe aún más, no puedo dejarlo solo. Ya perdió a mi hermano, no puede perderme a mí también.
Necesito que sepa que sí quería volver, o al menos, necesito verlo una vez más. Necesito escuchar su risa, arreglar las cosas, aunque no sean como antes. Solo quiero verlo una vez más.
Su sonrisa se apoderó de mi mente incluso antes de que todo se volviera oscuro.
Y él se convirtió en mi último pensamiento.