Ian | Extinción [||]

Capitulo V / Liberación

_ Tus niveles de cortisol se han incrementado considerablemente, ¿Me permite usted activar las Ondas Deltas para su serenidad? _ Le decía el Sistema Modular IAV al morador del mismo.

Erik despierta después de una intensa pesadilla, donde los fantasmas de un pasado lejano, pero no tan lejano de su mente, lo volvían a perturbar.

_ Son imágenes horribles, pero, ¿Hemos realmente escapado de nuestra fallida existencia? _ preguntaba en su mente, mientras ignoraba la sugerencia del Sistema IAV.

Masajeando su frente, y con sus ojos entrecerrados, mira de reojo a aquello que no le permitía encontrarse en solitario, y que, de manera silenciosa, sabía perfectamente, cuales eran esas imágenes que a su mente les invadió, sin mediar palabras.

_ Percibo tu conmoción Erik, esas imágenes del pasado, de cuando estuvimos a muy poco de entrar en batalla con las Fuerzas de la GlobalSociety, esa masacre garantizada que por muy poco fue… Comprendo tu impotencia de no poder quitártelas, eras apenas un niño con un arma en tus brazos y una doctrina enfermiza en tu etica, las que tus padres te inculcaron. Activare las Ondas Deltas para tu relajación, y así puedas volver a descansar _ decía el Sistema IAV, con una tonalidad suave y tranquila, pero al mismo tiempo, evocando una sensación un tanto siniestra para un puñado de personas, entre ellas, Erik.

_ ¡No te di autorización para que las actives! _ reprocho Erik. Al mismo tiempo, que su mirada se tornaba borrosa, su respiración se relajaba y, lentamente, volvía a caer de espaldas para sumergirse en un sueño profundo.

El NanoChip implantado en la parte superior de su mano izquierda, monitoreaba constantemente e ininterrumpidamente a su portante; alimentado con su propia energía vital, casi como un parasito, el pobre Erik, no se libraría de el hasta su ultimo día, para él, era sabido y eso, lo llenaba de angustia.

No poder pensar, soñar, perderse o encontrarse en un lugar, sin que el Sistema IAV, supiera a cada segundo de su paradero, de su condición, de su postura ante el nuevo mundo que a Erik, le tocaba ahora vivir, se hacía para él, cada vez más insoportable. Erik no lo sabía, pero para el Sistema regente, ya estaba siendo considerado, como un insurrecto, un posible factor de subversión, IAV, lo tendría más supervisado que a un ciudadano común, esto implicaba para el pobre Erik, un monitoreo y un control más riguroso, ¿Hasta dónde su mente iba a soportar?

En la mañana, con Erik más distendido “gracias” a las potentes Ondas Deltas que actuaron sobre él a la mitad de la noche, se prepara para comenzar su día.

_ Buenos días Erik, lamento el infortunio de anoche, están preparadas las capsulas y un refrescante vaso de agua para tu desayuno. Que inicies bien tu jornada. _ decía IAV.

Erik generalmente, ya no respondía a IAV, sentía un hartazgo cada vez más evidenciable, su falta de libertad y privacidad le estaban pasando facturas, no poder ni siquiera, estar solo con su mente, ya que el NanoChip, monitoreaba hasta sus pensamientos, y estos, eran cargados de forma instantánea al Sistema IAV. Sin embargo, su frustración lo ganaba cada vez más y replica:

_ No llames a unas míseras capsulas de vitamina un desayuno, yo conocí lo que era realmente un desayuno. _ a pesar del descortés comentario, Erik no tiene opciones y debe consumir, lo que el Sistema Modular le ofrecía, una pequeña capsula con altísimos concentrados de vitaminas, capaces de satisfacer al consumidor hasta la próxima comida.

Sentado en su mesa y con un vaso de Wiskhy (ignorando el vaso de agua que IAV le ofreció) el latoso Sistema Hogareño observa al huésped y, trata de interactuar con él.

_ Erik, sé que estas incomodo por tu falta de libertad y privacidad pero, ¿Acaso no ha valido la pena? Vivimos ahora en un mundo mejor, donde nada te falta, se respira y se vive la paz más auténtica y pura de la historia, la que la humanidad siempre a anhelado ¿No sería más adecuado asociarse con tu nuevo entorno en lugar de cuestionarlo inútilmente? _

Bajo leves efectos del alcohol, Erik replica con sinceramiento, pero al mismo tiempo con moderación, a sabiendas de que sus palabras, podrían resultar peligrosas para su integridad.

_ Sé que es lo mejor para mí, no quiero más cuestionamientos, déjame solo. _

Si bien Erik, sabía que su NanoChip detectaba su estado de ánimo y sus opiniones que solo se resguardaban en su mente, al mismo tiempo, desconocía de los limites, casi infinitos, de la vigilancia que en el recaía, su mente le dictaba su postura real acerca del Sistema IAV, del mundo en el que ahora vivía, de su estrés por su falta de libertad y privacidad, imposibles de disimular o aplacar, junto con su creciente hartazgo, no solo se expresaba dentro de su cabeza, sino que, ya mostraba conductas desafiantes ante el Sistema que lo perseguía por todas partes.

Los Agentes que custodiaban el edificio donde Erik residía, patrullaban y, con cada vez más frecuencia, se acercaban a la puerta del Módulo en cuestión, aquel en donde se hospedaba un supuesto “peligro”, aquel que deseaba cada vez más, su anterior vida, su anterior mundo, antes que seguir bajo el Sistema IAV.

_ Estoy agotado, me voy afuera _ le dice Erik al Sistema.

_ Permítame, se estima que la temperatura será de unos agradables 24 grados, con cielo despejado, le sugiero que para llegar al Parque Central, tome una ruta alternativa a la habitual, ya que las calles se encuentran congestionadas. _ IAV sabiendo con anticipo, a donde iba Erik.




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