Katheryne Blanc
Días después.
Bajaba del avión, con mis cosas.
Iba por mi segundo objetivo, matar al mandamentario.
Desde hace unos días Eliza, lo estaba s iguiendo a cada sitio que iba el señor.
-Pensativa. Hablo Fredd
-¿Está todo listo?
-Sí, Eliza está siguiendo cada paso queda.
-Está bien, encárgate de mis maletas que yo me encargo ahora de él.
-¿Lo harás hoy? Pregunto sorprendido.
-Sí, ya no tenemos tiempo. Contesto sin mirarlo.
-Cuídate Katt.
-Claro, nos vemos en la casa. Dije subiéndome al coche.
Mientras manejaba mi celular comenzó a sonar.
-¿Dónde estás? Pregunté
-Estoy que lo sigo, esta dirigiéndose a la embajada.
-En cuanto tiempo llegaran. Hable
-En treinta minutos. Respondió
-Está bien retírate antes que se den cuenta, ¿Cuantos son?
-Es tu día de suerte, solo están el chofer y el Señor Fernando. Hablo Eliza
-Está bien ahora me encargo yo, solo mándame la ubicación exacta.
-Lo harás ahora. Hablo
-Claro, ya no tenemos tiempo. Hable poniéndome la peluca. -Llego en diez, ahora vete y espérame en la casa.
Mientras manejaba, me estacione en la pista para esperarlos, lo bueno era que a estas horas de la mañana no venía mucha gente. Así que podía hacer mi trabajo tranquila.
***
Al momento que vi el auto venir, salí del coche y lo pare, el chofer al verme paro el auto y bajo.
-Se encuentra bien Señorita. Hablo mirándome
-Lo siento. Dije sacando mi arma.
-¿Cómo? Pregunto confuso.
Pero antes de reaccionar le dispare en la cabeza. El parlamentario, al verme lo que hice comenzó a cerrar la ventana y puso seguro a la puerta. Me acerque a el despacio marcando mis pasos. Lo mire por la ventana mientras levantaba el arma y le dispare. Me apresure a subir al auto y salí del lugar dirigiéndome a un estacionamiento de autos, me saque la peluca y me puse la chaqueta mientras me dirigía a mi moto. Subí y salí con la misma. Hasta llegar a mí casa. Mientras entraba vi a Eliza, preocupada.
-¿Paso algo? Pregunte
Ella al verme corrió hacia mí y me abrazó.
-¿Estas bien? Pregunto mirándome.
-Claro que estoy bien.
-Lo hiciste. Hablo Fredd.
-Claro que si Fredd. Hable con una sonrisa.
-Llama a Lucas y dile que se lleve el carro y lo desmantele o desaparezca.
-Está bien, yo me encargo. Contesto.
-Gracias, hicimos un buen trabajo sin ustedes todo eso no hubiera sido posible.
-Para eso está la familia. Hablo Fredd.
-Iras a informar a Dugés. Hablo Eliza.
-Sí, pero mañana. Hable mirándola.
-Ahora necesito descansar.
-Katt.... Hablo Fredd
-¿Paso algo? Pregunte confusa.
-¡¡Megan!! Hablo Eliza.
-¿Qué pasó con ella? Pregunté angustiada.
-Nada, solo que te mando una invitación. Hablo Eliza
-Invitación. Hable mirándolos.
Fredd se acercó y me extendió un sobre, la tome y la abrí. Es una invitación para una cena, con sus compañeros de trabajo. Pensé
-¿De qué se trata? Pregunto Eliza.
-Es una invitación para una cena, con sus compañeros de trabajo. Contesté.
-Iras. Hablo Eliza
-No lose. Contesté mirándola.
-Como que no lo sabes, no entiendes que Megan solo quiere pasar más tiempo contigo. Hablo Fredd molesto.
-No, tengo vestido y es para hoy. Hable mirando a Fredd. -Por favor entiéndeme, no quiero ponerla en peligro.
Megan, te mando algo. Hablo Eliza
-¿De qué hablas? Pregunte.
-Por qué no lo averiguas, está en tu habitación. Contesto Eliza.
Subí lo más rápido, al abrir la puerta vi una caja muy bonita en mi cama. Y encima había una nota, la abrí y comencé a leerla.
"Espero que te guste, cuando lo vi no pude resistirme para comprarlo. Espero verte hoy" Atentamente. Tú hermana.
Al dejar la nota en la cama. Saque la tapa de la caja y lo que vi me sorprendió. Era un vestido y unos zapatos muy bonitos, era para esta noche.
Deje las cosas como estaban y saque mi celular y marque a Megan, pero me mandaba a buzón de voz. Sabía que lo estaba haciendo apropósito. Pensé.
Mire el reloj, aún era muy temprano para las siete.
Salí del cuarto para dirigirme a la cocina, en realidad tenía mucha hambre.
Me prepare algo y comencé a comer.
***
Después de terminar de comer. Fui a mi habitación para poder alistarme.
Me metí a la ducha y después me seque el cabello, para ver que peinado me hacía.
***
Al momento de terminar me puse el vestido y llame un taxi ya que eran las seis y media. Tenía solo treinta minutos para llegar.
***
Ahí fue cuando escuche al taxi llegar, salgo para dirigirme al auto y le digo que me lleve a la dirección de la tarjeta.
Mientras conducía el chofer, estaba muy nerviosa. En realidad no quería ir, pero Fredd decía la verdad. De que hoy era un día muy especial para ella y mis padres estarían muy orgullosos, si estuvieran con nosotros.
-Señorita, ya llegamos. Escuche al hombre hablar.
-¿Cómo? Pregunte.
-Que ya llegamos Señorita. Hablo mirándome.
-Gracias. Hable pagándole y salí del auto.