8. El cumpleaños

Ya estoy casi lista.

Me pinto los labios con mi coral lipstick, compruebo si esta perfecto en el espejo del tocador... ¡Estoy lista!

Guardo mi celular en mi bolso pequeño, su regalo de Valentin y tambien mi lipstick, cierro mi puerta y bajo las escaleras. Cuando estoy en el segundo piso una puerta se abre y como diría mi nana es ''nada más y nada menos'' que César.

Hola -saludo, mi nana me decía que un saludo no quita lo valiente.

-Hola.

Sigo mi camino hasta llegar a la sala, la decoración esta bonita, focos con diferentes luces de colores, los globos, que infle la mayor parte, estan pegadas en las paredes y la musica es... esta bonito.

De acuerdo la musica no me gusta.

Estoy orgullosa de mi misma por usar un vestido que no sea tan elegante y, tambien en ves de usar tacones escogí zapatillas, no quiero llamar mucho la atención ya que no es mi cumpleaños. Me acerco donde están las bebidas y comienzo a sentirme incomoda cuando me miran, creo que es normal, es la primera vez que ven a una chica hermosa como yo.

***

Más personas estan ingresando y sospecho que algunos no son amigos o vecinos que viven por aquí. Valentin esta bailando con una chica, lo que me llama la atención, aparte del color de su cabello, son los pasos de bailen... son muy sensuales. Yo tambien puedo bailar así, pero no me atrevo. No quiero ser la unica que baila sola mientras los demás estan con su pareja.

-¿Aburrida?- pregunta un chico desconocido.

-Un poco -contesto.

-¿Quieres ir a un lugar?

-¿Dónde? -pregunto, desconfiada.

El castaño mira por todos lados como si no quisiera que le escuchen lo que va a decir. Se acerca un poco a mi, exactamente a mi oído.

-Atrás de esta casa, como a estas horas suceden cosas paranormales -sugiere.

Como a estas horas... ¿Por qué siento que me estoy olvidando algo?

-No gracias -sonrió falsamente. Este chico es rarito.

-Sabes, siento que seremos grandes amigos, mi nombre es Bruno ¿y el tuyo? - extiende su mano.

-Vania -acepto su saludo. Es bueno tener un amigo temporal.

-Y yo soy César.

Bruno y yo nos asustamos cuando escuchamos la voz de César, que esta al lado de Bruno. Pongo una mano en mi corazón tratrando de calmarme. Bruno por su parte cambia de lugar y se pone a mi lado izquierdo, quedando yo al final, en medio de los dos.

¿Por que se cambio de lugar? ¿No le agrada César?

-Si, ya sé que eres César -hablo para romper el hielo que se formo hace unos segundos.

De nuevo, los tres estamos en silencio. Saco mi celular de mi bolso para ver la hora, de verdad estoy aburrida, lo mejor será darle mañana su regalo a Valentín. Son las doce de la noche y decido que es mejor que me vaya. Me levanto de mi asiento y los dos tambien hacen lo mismo, miro confundida a ambos.

-Eh... esto...- no sé que decir- ¿Qué les pasa a ustedes dos? Quiero estar sola. Bruno fue un gusto conocerte espero verte pronto -la verdad es que no.

Me asusto cuando Bruno me quita mi celular, comienza a teclear algo y luego lo pone en mi mano.

-Este es mi número, agregame como ''nuevo amigo'' -me da un beso en la mejilla y se va.

Estoy con la boca abierta y la cierro cuando César aparece a frente de mí.

-Me parece injusto- dice serio.

-¿Qué cosa?

-Cuando me acerque a ti para ver tus ojos me empujaste porque supuestamente estaba invadiendo tu espacio, sin embargo él te beso y no lo empujaste.

-¡Me tomó por sopresa! -dije a la defensiva.

Se queda mirándome un rato, abre un poco la boca para decir algo, niega con la cabeza y tambien se va.