Inmarcesible

Capítulo (6)

 

<<Despedida>>

 

Después de acompañar a Kelly en las gradas volví a las clases y luego me dispuse a ir a mi casa, ella se ofreció a llevarme pero yo me negué, se que tengo que llegar temprano para poder llevar a mamá al aeropuerto pero aún así no quería que ella me trajera, se que hay algo que no me a dicho y de verdad que no quiero que sea lo que yo creo que es.

 

Ya en mi casa, entro y encuentro a mamá en el mueble con un vestido rojo que se ajusta a su cuerpo, unas zapatillas de plataformas negra y su hermoso pelo castaño alrededor de sus hombros, cuando desvió mis ojos al suelo veo sus dos maletas y al lado de ella veo a Zack vestido con unos pantalones formales negros unas zapatillas deportivas negra y una camiseta negra (ahora me eh dado cuenta de que no soy la única persona obsesionada con el color negro) y por supuesto el cabello alborotado. Ni siquiera se ah dado cuenta de que estoy aquí ya que está muy concentrado en su Laptop.

 

– Hija, te estábamos esperando– dice mamá levantándose del mueble con una hermosa sonrisa en la cara– no quiero perder el avión así que sube y cámbiate rápido.

 

– Está bien– digo abrazándola y después me dirigí a mi habitación, no puedo creer que se valla a otro país y me deje aquí con este idiota, además la extrañare demasiado.

 

Cuando termine de subir las escaleras me metí en mi habitación y busqué un short blanco, un suéter negro de mangas largas y unas zapatillas deportivas negras, cuando termine de ponérmela me mire en el espejo y me hice una coleta alta, cogí mi cartera de lado y mi celular y salí y me dirigí a la sala, creo que mamá debe de estar esperándome, cuando termine de bajar mamá estaba parada en la puerta esperándome.

 

– Lo siento, mamá, me cambie lo mas rápido que pude– dije caminando hacia ella.

 

– Si, ya se que duras una eternidad cambiándote, no se por que te mande a cambiar– dijo poniendo los ojos en blanco y saliendo de la casa.

 

Cuando salimos de la casa nos dirijamos a un carro negro, creo que es ¿Eston Martin? Joder, si la verdad nunca me llamaban mucho los carros pero este, este pasa los límites.

 

– Están listas?–dice Zack interrumpiendo mis hermosos pensamientos.

 

– Ya estamos lista– dice mamá entrando al coche, yo también lo hice, no podía quedarme como una estupida hay parada.

 

No se como haré para soportar a Zac mientras mamá esta de viaje para España, no se como es que todavía sigue trabajando en ese ospital después de tantos años y siendo bastante buena, podría hacer su propia consultorio, no le veo el problema.

 

– Mamá , ¿por que no haces tu propio consultorio?– dije rompiendo el silencio que emanaba en el coche desde que arrancó.

 

– Pues porque no hay necesidad de hacerlo, estoy muy cómoda en el hospital donde estoy, amor– dice ella girando la cabeza para verme.

 

– Si, pero si tienes tu propio consultorio no tendrías que viajas tanto y dejarme sola– dije mirándola, la verdad no me gusta quedarme en la casa solo, esta bien que aveces quiero estar sola y olvidarme del mundo por un momento pero no pasar dias sola, aunque ahora estaré con Zack pero eso no cambia nada.

 

– Hija, no seas dramática aunque tenga mi "propio consultorio "– dice haciendo comillas con los dedos– tendría que viajar igual que como siempre lo eh echo, además esta vez te quedarás con Zack, no estarás sola.

 

– Eso no cambia nada– sin querer miro por el espejo y veo que Zack me está mirando pero rápidamente desvía la mirada para concentrarse a la carretera– ¿cuando volverás?

 

– creo que en dos semanas, no estoy segura.

 

– Bueno– dije girándome para poner la cabeza en la ventanilla de la puerta.

 

– No te preocupes, te llamaré a diario– dice con una sonrisa en el rostro.

 

– Está bien.

 

Espero que dos semanas pasen lo más rápido del mundo, nunca me a gustado que mi mamá se valla de viajes y me deja sola y nunca me a gustado que ella se valla sola a un país que ni siquiera conoce, solo para atender a un pariente que ni siquiera es de su país, ¿ es que allá no hay médicos buenos o que?.

Media hora después ya se podían ver las luces del aeropuerto y los carros saliendo y entrando, Zack busca un aparcamiento libre y lo estaciona, cuando  lo estaciona el y mamá comienzan a salir y a sacar las maletas, yo sin  embargo me quedo en mi mismo puesto, no tengo ni ánimos para salir.

 

– Vamos Ana, sabes que me tengo que ir– dice mamá cuando está todo afuera.

 

– No pienso salir, adiós– dije sin mirar donde ella esta.

 

– Amor, se que eres mala para esto pero quiero despedirme de ti.

 

– No

 

– Ana– joder, abro con fastidio y me dirijo hacia ella, la miro a los ojos y con eso vasta para que se me agüen los ojos, odio esta mierda.

 

– Lo siento amor, pero tengo que ir– dice mamá, abrazándome.

 

– Está bien–dije despegándome de ella.

 

– Te amo– dice volviendo a abrazarme.

 

– Yo también te amo, mamá.

 

– Bueno, ya, basta de lloriqueos me tengo que ir– doy un paso a tras y esta mira a Zack y le entiende los brazos, miro a Zack y este todavía tiene las maletas agarradas, con las cejas alzadas.

 

– Se que tu tampoco eres bueno para esto pero  se que no te pondrás a lloriquear– dice mamá

 

– Claro que no lo haré– dice Zack con una sonrisa en los labios, esto hace que mamá y yo soltemos unas carcajadas, pensé que no tenía sentido del humor, Zack suelta las maletas y se dirige a mamá para darle un abrazo, joder, mamá se ve  como una niña delante de Zack, es muy alto.

 

– Me la cuidas eh– dice mamá echándome una mirada.



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En el texto hay: misterio, reencuentro, amor

Editado: 23.06.2023

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