PRÓLOGO

RESIDENCIA DE LA FAMILIA MILLS

   28/05/ 2016.

MICHAEL MILLS

—Jess, eres increíble...—le susurro a Jessica mientras acaricio con mis dedos su espalda desnuda.

Desde que la vi por primera vez quedé prendado de sus hermosos ojos color marrón oscuro  y su cabello castaño oscuro. Es una mujer muy hermosa. Tiene unas curvas de infarto, realmente ésta morena me tiene loco, pero sé que estoy haciendo mal, Adele no se merece esto. – O tal vez si, no lo sé.– Pero me enamoré de Jess. 

Ahora, estamos en mi habitación; en la casa de mis padres y hemos hecho el amor desde que se supone que nos reunimos unos pocos amigos para convivir un rato, pero terminó haciéndose una gran fiesta.

—Lo sé... nene— Me responde con un ronrroneo sensual —¿Terminarás con eso?— Se refiere a mi vínculo con Adele.

Me entristece romper el corazón de Adele. Es una gran chica, – aunque nunca me complació como mujer– y Kathy bien me advirtió que Adie es especial y que antes de ser hermana, era mujer. Me dejó claro que si le rompía el corazón a Adele me iba a arrancar los huevos y hacermelos tragar. Pero no pude evitarlo. Además yo soy un hombre, y como todo macho tengo mis necesidades que Adele no supo cumplir – tal vez es vírgen– aunque lo dudo, ella estuvo alrededor de año y medio con el idiota de Jared, seguramente él imbécil se la cogió.

—Si, nena. No puedo ya apartarme de ti... Ya no.— No estoy mintiendo. Me encanta Jess, ella es todo lo que quiero.

—Mike, yo no quería que las cosas fueran así—murmura preocupada y se aferra a mi cuerpo.

—Ni yo... pero de hoy no pasa. De ahora en adelante seremos sólo tu y yo— le prometo y levantó su rostro para que me mire a los ojos.

—Si, sólo tu y yo...— posiblemente tenga una hija aunque es imposible que esa bastardita sea hija mía, Georgia sabe muy bien de quién es su hija y pretende cargarme el muerto a mí.
 

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JARED RIVERS

¡Ay madre! Esto de seguro que eso si hace que Adele mande a la mierda al hijo de puta de Michael. 

Estoy parado fuera de una habitación que supongo que es la del imbécil de Michael. Esta casa es preciosa, me imagino que vivir en una casa tan lujosa debe ser una exquisitez. Mike al igual que la engreída de Kathy vivían entre algodones. No por nada su padre se ha esforzado por darles la mejor educación que el dinero pueda comprar...

Lástima.

En los principios morales como que les faltó reforzar la lección. Él imbécil de Mike, me robó a mi Adele, y Kathy es una zorra ricachona. Hay veces que las putitas más grandes están en las mejores familias.

Mientras esos dos follan como si no hubiera un mañana, su novia – mi Adele– está buscando a su supuesto novio. Pero así como el saber esto le romperá el corazón, yo seré quien me encargué de hacerla sanar. 
Este es mi momento de recuperar nuestro amor. Por fin ella volverá a mis brazos, de dónde nunca debió salir.

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ADELE PHOENIX 

—Addie, que se pierda Mike... hasta te va a hacer un favor. Además de que independientemente de que sea mi hermano, no es el hombre para ti— me dice Kathy durante una fiesta que se ha salido de madre. 

Hay desorden por toda la casa, compadezco a los empleados de los señores Mills, ellos tendrán que limpiar después.

—Kathy. Tenemos que parar...

—De buscar al pelmazo de Mike. Tómate otro shot y te aseguro que después de eso te va a valer tres pepinos mi hermano— Katy me interrumpe y sirve dos caballitos de tequila sobre la barra del mini bar que tiene en la mansión de sus padres.

—Katy...— le riño. No tiene respeto ni por su hermano.

—De verdad. Verás que en menos de lo que canta un gallo te vas a olvidar de él...— me insiste Katy y me tiende un caballito de tequila, y brinda —¡Salud, Phoenix, porque  ser soltera es lo máximo!

—¡Adie, cariño! Perdón las interrumpa, pero debo decirte algo...— llega Jared a nuestro lado casi jadeando. 

—Te escucho, Jared.

—A solas— me dice mirando elocuentemente a Kathy.

—Descuida— que no juegue, Kathy es mi mejor amiga.

—Como digas— Respira profundamente y de pronto suelta su bomba:— Mike está follando con una mujer en una de las habitaciones y le oí decir que eras una estúpida y que no le servias más que como adorno, por que como mujer eres un asco— dice Jared dejándome helada.

Estoy atónita viendo a Jared.

Él no dijo eso. Yo escuché mal.

—¡No es cierto!— ¿Como puede mentirme, con algo así? Por Dios, es mi amigo y ex novio ¡Sé supone que nos tenemos cariño!

—Si no me crees, sigueme, y yo te llevaré donde ese bastardo se folla a otra mientras dice las peores bajezas de ti— su seguridad me asusta.

No no no... aquí debe haber un error. Seguramente Jared miente, él aún tiene esperanzas de recuperar nuestro romance. Seguramente es una trampa.

— ¡Kathy! —Llama un hombre pero yo estoy petrificada por lo que ha dicho Jared que no me fijo quien llama a Katy.

—Escucha, Phoenix: yo conozco a mi hermano, así que te sugiero que lo sigas... yo iré a ver que quiere Steve.

—Te juro que si lo que dices es real, ¡yo misma voy a matar a Michael Mills!

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GEORGIA CRAVEN 

Estoy viendo el desastre que hay en ésta casa cuando veo al  estúpido engreído que baja las escaleras, se ve aturdido, como si algo le hubiese sucedido. 

—Michael Mills — digo con voz fría y llena de rencor, reflejo de como me siento por culpa de este hijo de puta. 
Michael se da la vuelta y queda sorprendido al verme aquí. 

—Georgia Cravennnn..., que sorpresa verte aquí— responde vacilante. Está super ebrio.

—Me enteré que los Mills estaban de fiesta y pensé ¿por qué no ir? Y aquí estoy— digo fingiendo amabilidad. 

—Ya veo... ¿Qué quieres?—Sé perfectamente que no le hace gracia verme aquí.