Capitulo 3

8 AM y suena el despertador, hoy era un dia de mucho trabajo porque habia junta con uno de los inversionistas de Rai, ella era la encargada de verificar que los acuerdos estuvieran bien, además de brindar una cordial bienvenida en lo que Rai regresaba de su viaje.

Como parte de su trabajo y favor para su adorado jefe, ella se encargaría de alojar, enseñar el lugar y como ellos lo llamaban; entretener al inversionista. No en una forma fuera de lo común, si no que como Rai recibia a menudo visitas de diferentes personajes públicos, tenia una lista de lugares ya evaluados a los que llevarían sus clientes durante la estadía,  que muchas veces no pasaba de una semana.

Este dia la empresa recibiría no un cliente, si no alguien que podria marcar un antes y un después en la empresa, era un empresario con mucho dinero y esto es justamente lo que necesitaban. El mundo del entretenimiento iba cada vez más rápido, pero también asi iba disminuyendo la rentabilidad de las empresas musicales, ya que muchos de los nuevos talentos se conformaban con autograbar sus canciones y publicarlas en las redes sociales.

Con esta tendencia, la gente tenía mas fácil acceso a la música, pero la industria iba decayendo, solo los artistas de más categoría podian permitirse contratar una disquera. Pero un contra de esto es que la disquera se encargaba de invertir todo el dinero principal en la compra de canciones, edición, imágen, lanzamiento y demás. Por eso, para Rai y Lisa era muy importante cerrar este negocio.

Mientras se arreglaba, leyó su wathsapp

Brenda: Volviste a soñar con él?

Lisa: Si hubiese sabido sobre tu acoso no te contaba nada

Lisa: Pero si, soñé con él. No era nada decente

Brenda: uuyyyy pero si hasta calor me dio, con tremendo cuerpazo que tenia ese hombre

Lisa: Recuerda que es solo eso, sueño. Quizas nunca lo volvamos a ver

Brenda: zassss! Se te haga chicharrón la boca.

Lisa: Solo digo la verdad. Chao, nos juntamos en la tarde!

Como siempre tomó su café corriendo mientras se vestía, por una extraña razón decidio vestir un poco más sexy, asi que se encaminó al closet y eligió un vestido amarillo un poco ceñido, unos tacones rojos y sus pantimedias negras. También decidio llevar un poco de maquillaje, asi que se sento en el tocador e hizo arte con el delineador y el labial rojo. Normalmente solo usaba protectos solar, corrector de ojeras y algún que otro pintalabios con colores nude, pero en su mente sabia que esos sueños con aquel hombre habian despertado su lado salvaje, y al menos por hoy se sentia imparable.

Peino su melena roja y le pareció ver frente al espejo una mujer distinta.  Se sentía lista y segura para conquistar el mundo de los negocios, porque como decían, los tacones y el pintalabios rojo hacian crecer la seguridad femenina. Por último se perfumo y decidió tomarse una foto en el espejo frente a su cama, porque se sentia hermosa y queria capturar ese momento de amor propio.

Por un instante penso en devolverse, cuando bajóa la entrada del edificio y el guardián se quedó petrificado con su belleza, de no haber sido por el saludo natural que le daba cada mañana, él habria pensado que era otra mujer.

- Buenos dias Izac!

- Buenos dias señorita Elizabeth! Disculpe el atrevimiento, pero se ve muy diferente hoy

- Ya sabes Izac, de vez en cuando hay que variar- Contestó a carcajadas.

- Pero siendo asi Señorita, este debería ser su estado natural, esta realmente hermosa

- Si me conoces, sabes que esté no es mi estilo, pero gracias por el halago, pasa un feliz dia!

Y con una sonrisa en sus labios se dirigio al garage, donde encendio a Fin (asi llamaba a su precioso audi A7 color blanco, gustito que se habia permitido hace un año atrás) se sentia en las nubes cada vez que lo montaba y siempre opinaba que valía cada centavo. Tenia su celular sincronizado con el altavoz asi que abrio su Spotify y dio reproducción aleatoria a Tito Nieves, porque si habia algo que la alegraba era el sonido de la salsa, con esa buena energia condujo a los edificios de Raiwood Entertainment.

Al entrar al edificio iba saludando a todos, era un poco timida, pero al ser la cara que representaba al dueño conocia a todos y por ende, tenia cortesía con los distintos departamentos. Claro esta, que como ningún trabajo es perfecto habian unos que otros empleados que daban lata, sobre todo el grupo de Fyn, este era encargado de relaciones públicas, estaban sub contratados porque a pesar de sus molestos rumores y calumnias, él y sus dos compañeras eran conocedores de la industria y por más que Lisa los detestara por sus malas actitudes hacia ella, reconocía que ahora mas que nunca la empresa necesitaba de sus conocimientos.

- Vaya, Vaya! Pero que milagro - Comenta Tesa, es una de las compañeras de Fyn. Tesa era una morena alta de esas que parecen sacadas de una revista de modas, siempre estaba perfectamente arreglada como si todo el tiempo se la pasara retocandose. Esto último es cierto, para ella una imagen perfecta era una de las cosas más importantes de su dia a dia. Era una mujer superficial y no perdia tiempo en dar a demostrar lo contrario.

- Buenos dias Tesa! - Responde Lisa con una seca y forzada sonrisa - Estaré en mi oficina preparando la oferta para el inversionista, envíame, por favor, la carpeta de la propuesta de tu departamento.

- De acuerdo! Oye, te vestiste asi por él Sr. Meyer?

Aunque Lisa pensó una lista de barbaridades que podia responderle, se limitó a preguntar - Y se puede saber quién es Meyer? Porque tendría yo que dedicar mi tiempo a vestirme y arreglarme para alguien que no conozco?

- Como no lo conoces, es el inversionista con el cual tenemos reunión, ese hombre además de ser multimillonario, es un hombre por el cuál si tuviera, hasta me casaría - y era mucho decir viniendo de ella, ya que opinaba que lo mejor era comer de todos los platos sin atarse a ninguno.