Emily
Ya cállate.
La primera pareja que pasó al círculo eran geniales, los movimientos que tenían parecían de película, era imposible de creer que estaban ahí por primera vez en su vida. Él sujeto fue el primero en caer. La joven pareja se le carcajeo en la cara, pero creo que fue su peor error ya que él tomo su tobillo antes de que se levante y la tiró al suelo quedando arriba de ella con una sonrisa en la cara.
— ¡Suficiente! —Gritó fuerte Shawn—. Siguiente.
— ¡Nosotros! —Exclamó mi rival mientras sentía su mano sobre mi nuca como si fuera un pobre perrito.
—Suéltame —Dije tratando de zafarme de su agarre.
Me solté, pero caí al suelo.
Él inmediatamente se subió a mi trate de empujarlo pero era muy fuerte y robusto, las cosas se comenzaron a salir de control cuando sentí sus manos grandes y ásperas acariciando mi piel, le pegaba pero no se corría. No podía ver a Shawn y eso me molesto ya que se supone que él nos cuidaría, pero no era así… no estaba aquí.
No sabía qué hacer ante aquella situación, temía por mi vida.
Si hacía algo que a ese sujeto no le gustara se vengaría de mí, no sé cómo, pero sé que lo haría y sin dudar ni una sola vez.
Luego sentí como las manos se detenían y como el peso de aquel sujeto desaparecía, abrí mis ojos y vi los suyos. Los ojos del joven sandía frente a mí, inmediatamente mi ceño se frunció y negué con la cabeza y asco en mi interior, la furia se apodero de todo mi cuerpo y me subí a él.
— ¡Eres un verdadero asco! —Exclamé sobre él.
Mis manos le pegaban fuerte pero él ni se movía, no hacía absolutamente nada. Parecía entender que se había equivocado y demasiado a decir verdad, yo estaba furiosa con su tontería y eso era bastante visible a los demás lo que provoco que las personas salieran de la habitación.
— ¡Lo sé!... fue un error, suéltame —Salió de sus labios.
Me quedé completamente estupefacta ante lo que oí, debo admitir que no lo esperaba decir eso. Pensé que nunca se podría dar cuenta de su error, pero aún así no me ha pedido perdón o una simple disculpa por su acción.
— ¡Dilo! —Le grité en la cara mirándolo directamente a los ojos.
— ¡Bien! —Hizo un segundo de silencio, no salió nada de sus labios—. Lo siento… perdóname.
Una sonrisa amplia se dibujó sobre sus labios, nuevamente estaba planeando algo y eso lo podía notar como la última vez… ¿Pero ese había sido su plan? Sentí sus manos alrededor de mi cintura y luego me empujó fuerte hacia delante, caí y me levanté rápidamente para lograr comenzar a correr, las personas me miraban como si estuviera realmente loca ya que al parecer no había entendido la primera vez que todo eso sucedió.
—Eres una idiota, hablo enserio —Dijo él.
Nuevamente estaba frente a mí, no comprendía lo que sucedía ya que siempre aparecía delante de mí en un abrir y cerrar de ojos, yo corría pero él era aún así más veloz y fuerte que yo.
— ¿Qué es lo que quieres de mí? —Pregunté mirando sus ojos.
Él simplemente niego con esa sonrisa y se acercó acorralándome en la pared, sus ojos seguían sobre los míos y negué mirándolo, era mi final… siempre que estaba él sentía que nada bueno podría salir, sentía que era mi fin.
—Cumple tu misión.
—No…
Sentí como clavo nuevamente algo en mi cuello, no podía pensar en ese momento todo se volvió completamente negro. Otra vez lo mismo, era mi misión… ¿Cómo será?