Capítulo 6

Miradas y colores

Llevo un tiempo viéndolo, me encantaría saber su nombre, se monta en el tren, en mi vagón, siempre ha llevado un traje, azul marino, negro, gris, café, y una corbata a juego, le he visto blanca, roja y azul, más mono no podía estar, a veces usa otra ropa, como pantalones de mezclilla, o un pans, sí, una vez llevo un pans, caí en cuenta que siempre lleva aquella pequeña mochila café, eso es lo único que no cambia, y sus ojos, o por dios sus ojos, siempre trato de detallarlo bien, trato de ver que más tiene pero siempre termino cayendo en lo mismo, sus ojos, verdosos, tan bellos, me ha pillado mirándolo un par de veces, creo que comienza a darse cuenta de mi presencia, y eso me pone a flipar, parece un modelo, es tan hermoso, sin embargo yo no quiero acercármele, no soy ni la mitad de bonita, ojos negros, comunes, cabello negro, muy negro, y un cuerpo que no deja mucho que desear, si fuera más guapa, si fuera una chica de revista, como aquellas que salen en las portadas seguro me miraría más, y quizá, solo tal vez, me atrevería a hablarle, pero no puedo, me da mucha pena, además, ¿Qué podría decirle?, me he pensado en cambiar un poco mi vestimenta, eso hará que se fije, ¿cierto?, no lo sé, solo quiero poder obtener un saludo de su parte, aunque aún no puedo esperar mucho, solo llevó algunas semanas viéndolo, y todavía no tengo la suficiente confianza para acercármele, para darle un simple hola, todos los días rechazo el tren que va directo y elijo ese tren, solo para toparme otra vez con él.