Capítulo VII: Encuentros inolvidables.

Después de la plática entre Fudo y Akane, rápidamente decidieron ir a la casa del clan Suito, por supuesto, para hablar con su líder. Apenas llegan Fudo se encuentra algo nervioso.
–No te pongas nervioso solo por los rumores, ¡¡actúa como un sucesor!!
Acto seguido, Akane le dio un golpe a Fudo.
–¡¡Ay!!, ya, pero no pude evitar sentir una extraña sensación.
–Debes aprender a darte a respetar, o si no, cuando seas el líder de tu clan, se volverá un caos, aprende de mi.
–Aunque eres algo egocéntrica, sabes dar consejos.
–Pues claro. En fin, ya fue mucha plática.
Akane se acercó a las puertas de la casa para hacer un llamado. Y nadie respondía.
–¡¡El tiempo de una chica como yo es muy valioso¡¡, ¿¡entienden?!
–Ya, tranquila, no creo que…
Una flecha se hacía presente, y amenazaba con acertarle a uno de los dos.
–Tormenta disipadora. –una técnica de viento de Fudo repelía la flecha, que no venía sola, otras más se dispararon, pero los vientos seguían repeliendo. Akane tomó una flecha y la inspeccionó.
–¿Veneno?, parece que intentaron envenenarnos, que extraño que se hayan arriesgado a atacarnos, técnicamente tenemos influencia en la sociedad de la brujería.
–¿Quién sabe?, pero ahora no me voy a quedar de brazos cruzados.
Fudo se preparó para tumbar las puertas, y algo lo detuvo, su cuerpo no respondía.
–Inmovilización. –decía la voz de otra chica.
–¡Fudo! –Akane se percató de que era un ritual, y logró ver a la hechicera, que estaba en la muralla de la casa.
–Destello brillante. –En un instante se encontraba detrás de la hechicera, pero alguien más la recibió con un golpe bastante fuerte, que la mando a volar hacia la casa del clan.
–¡Akane! –Fudo recuperó la movilidad e iba a auxiliar a Akane, pero sintió algo afilado en su cuello, algo que amenazaba con arrebatarle la vida.
–Vaya, miembros del clan Akitaka y Takebe, ¿no? –decía una voz suave pero que imponía… miedo.
–Oh, que mala educación de mi parte, no me he presentado, me conocen como “el Ponzoñoso Ángel Caído”, soy el líder del clan Suito, Kiriko Suito.