Capítulo - 8

Me voy ya que realmente tenía que trabajar, al llegar voy directo a mi oficina donde al entrar encuentro a Fer esperándome.

- ¿Qué haces aquí?

- Bueno quería saber como te fue con Daniela.

- Fer no tengo tiempo para tus cosas así que si me disculpas tengo trabajo.

- Ya Max por favor ya deja de fingir se te nota que te gusta Daniela.

- ¡Que no! – empezaba a fastidiarme – no entiendo porque insistes tanto con esto.

- Tal vez será por la forma en que la miras, cada que la vez pareces mongolito.

- Ya te dije que no me gusta y por favor ya deja ese tema, entiende no trates de buscar alguien para mi.

- Pues sabes que si lo necesitas para ver si así se te quita lo amargado y gruñón – agarra sus cosas y se va.

La verdad en cierto punto Fer tenia razón, si me pasaba algo con Daniela pero no quiero admitirlo porque es absurdo, no tiene mucho que la conozco.

 A demás de que yo no estoy aún preparado para volver a tener una relación y no se si pueda llegar a estarlo de nuevo. No quiero que él recuerdo de Pamela que tanto me atormentaba aparezca de nuevo al estar con alguien más, no solo lo hago por mi salud mental sino también por la de Daniela, no estoy seguro de mi mismo y no quiero lastimarla con eso.

- ¿Max te encuentras bien? – me saca de mis pensamientos.

- Si, lo siento me perdí en mis pensamientos.

- Descuida te entiendo. – toma asiento delante de mi.

- ¿Está todo bien con tu empresa?

- Sí, no era nada grave ya está todo bien.

- Me alegro que así sea, bueno empecemos.

Nos pusimos a trabajar ya que nos teníamos que poner de acuerdo en muchas cosas. Estuvimos varias horas y todavía nos faltaba mucho.

- Yo creo que le voy a llamar a Daniela para que venga.

- Claro esta bien.

- Mas que nada ella se va a hacer cargo de la empresa de Matías cuando este lista.

- Por lo que tengo entendido ella también estudio lo mismo que todos nosotros y sabe sobre estas cosas ¿No? 

- Si pero nunca se relaciono con nada de esto, cuando termino la carrera se caso con Matías y bueno después llegaron los niños por lo cual no se involucro. Ahora ella siente que no está lista para esto por eso necesita tiempo.

- Entiendo, bueno entonces llámala y entre los dos le ayudamos en lo que no entienda y tenga duda.

- Muchas gracias por la comida Diego.

- No me agradezcas, fue un gusto comer contigo y con los niños.

- Bueno yo creo que es mejor irnos para la casa. 

- Claro, los llevo.

- Muchas gracias, vanos niños.

- Muy bien entonces vamos.

- Me está llamando Pablo – me alejo un poco para contestar. - ¿Qué pasó Pablo?

- Estoy con Max en su empresa necesito que vengas para que estés al corriente.

- Está bien voy para allá.

Terminó la llamada y voy a dónde están los niños y Diego.

- ¿Todo bien? 

- Tengo que ir a ver unos asuntos con Pablo sobre la empresa. ¿Podrías dejar a los niños en casa de mis padres? 

- Bueno yo voy para la casa de mis papás si quieres los llevo conmigo y luego pasas por ellos.

- Claro por mi esta bien.

- ¿Quieres que te lleve a la empresa?

- Sino te molesta.

Nos subimos al auto y me deja afuera de la empresa de Max. En cuanto entro voy a hacia una recepcionista y le pido información sobre donde queda la oficina de Max, a lo que la mujer también me mira mal y no entiendo que pasa con las mujeres de ahora.

 No me dice nada así que me doy la vuelta y cuando doy un paso choco con un hombre.

- Disculpe no lo vi.

- No se preocupe Señorita, disculpe pero escuche que busca la oficina del Ceo de la empresa.

- Si, ¿Usted sabe donde queda?

- Claro pero por favor háblame de tu, me llamo Raúl mucho gusto.

- Mucho gusto, Daniela.

- Si gustas te puedo mostrar donde es su oficina de hecho voy para allá.

- Claro muchas gracias. – entramos al elevador.

Disculpa, ¿De donde eres? Lo pregunto porque nunca te había visto antes.

- Soy de aquí solo que viví fuera del país por un tiempo.

- Entonces tengo mucha suerte de encontrar a una mujer tan hermosa por aquí.

- Te agradezco. ¿Trabajas aquí?

- No yo soy abogado pero soy amigo de Max y vine a verlo. ¿Tú trabajas aquí?

- Tampoco, mi hermano esta aquí trabajando con el y me pidieron que viniera.

- En ese caso va a correrme para dejarlos trabajar pero bueno valió la pena venir hasta acá – sonríe y salimos del elevador – Mira ahí es la oficina de Max.

Nos acercamos y Raúl habla con la secretaria, después toca la puerta y entramos al escuchar un adelante, al entrar veo a Max trabajando y la verdad es que se ve muy guapo, no se porque pero me le quedó viendo más de lo normal y cuando veo que va levantar la cabeza desvió la mirada y me doy cuenta que Pablo se dio cuenta que me le quede viendo.