Navaja que encaja

"¿La herida sigue afectando tu vida?"

La vida es como la tinta a veces sangra y cada persona te marca. Aunque se esconda el trauma la encuentra, cada piedra que otra persona le lanza, cada problema hace que se remueva.

El recuerdo se refleja en cada momento que hace que el daño vuelva. La herida sólo se posterga, se evita el problema para que no duela.

Cuando te haces pedazos o has sufrido un daño cargando con el peso de un corazón herido que se quedó atado al nudo.

Miedo al espejo, miedo a tu reflejo, si ignoro cada pedazo partido, si huyo de lo que dolió aunque el dolor es demasiado no hay que evitarlo.

Cuando lloro me escondo porque tengo miedo que con el tiempo cada rastro que dejo sea un cabo suelto. Sólo necesito un abrazo como recordatorio de que todo cambio y que el tacto de un humano no es un daño sino un apoyo en cada momento que siento que me ahogo.

Así como un tatuaje que con cada toque arde, aunque lo intente hasta romperse necesita liberarse de un veneno que se esparce porque aunque entre más delgada sea la aguja más te corta al final la espina salva a la rosa.