La Catarsis De Un Eje Caido

IV

La mayor parte de mi día extraño aquellos tiempos cuando solo escuchaba cuentos de fantasia como si la vida fuera de color rosa.

 

La vida se volvió más complicada después de la muerte de mi madre y el secuestro de mi abuelita, encontré un hogar y comida pero el enemigo siempre durmió a mi lado.  Tenía que sobrevivir en un mundo con guerra donde mucha gente perdía la vida a cada segundo del día y quienes se convertían en tu familia era lo más importante a cuidar, era mi deber proteger a quienes más amaba aun si sufrir sea un sacrificio doloroso.

 

Los jóvenes a una corta edad tenían que madurar cognitivamente desarrollando sus habilidades de supervivencia y pensar como un adulto de 30 a 40 años, la vida de cada integrante estaba en las acciones de cada persona perteneciente al grupo. La crianza que me brindaba mi madre era totalmente diferente a la de mi tío y tutor Fielder debido a que mi madre me contaba las maravillas de lo que es posiblemente el mundo en el que actualmente me encuentro, un mundo mágico que creo mi abuelita. 

Según mi abuelita los arboles de este mundo eran felices y respiraban como si tuvieran vida propia, aseguraba que mientras los habitantes de este mundo dormían los árboles se quedaban despiertos pero solo aquellos de raza albina tenían la habilidad de escuchar su voz.

 

Fielder me proporcionaba reflexiones para poder tener esperanza de un futuro tranquilo sin pesadillas o arrepentimientos, nunca contaba historias mágicas pero si sobre un romance entre la igualdad de las personas haciéndonos recordar nuestros valores y empatía, era como un padre y tío que quise ya que biológicamente no compartíamos la misma sangre. El tio Fielder apreciaba tanto a mi madre,  desde que eran niños el amo a mi mama con todo su corazón así que cuando fue muy tarde y descubrió que uno de sus aliados era uno de los enemigos que teníamos que afrontar además de la guerra y el virus... no pudo segur sin tantos arrepentimientos y la culpa. Después las historias cambiaron a unas de justicia y fuerza mental con el propósito de superar la situación que estábamos viviendo.

 

Por un largo tiempo la mirada de Fielder estaba llena de mucha  tristeza y culpa debido a que arrastraba tal arrepentimiento por no poder hacer nada  durante años, fue entonces cuando después de mucho tiempo encontró otro amor hacia una persona que lo respetaba, Endor y yo para ese entonces teníamos 18 años. El con desconfianza y culpa rechazaba su oportunidad de volver a vivir enfocándose solamente en nosotras  y en el grupo de supervivencia para evitar sus sentimientos.

 

La vida te enseña muchas cosas y todo sucede por una razón. 

 

Después de 3 años quise formar un noviazgo con Endor haciéndolo público cuando apenas comenzaba a hacerse el grupo de supervivencia más grande, primero queríamos que Fielder el padre biológico de Endor lo aprobara y  después hacerlo público. Fue en ese momento cuando pude sentir una tranquilidad en Fielder como si su misión de cuidarme estaba terminada ya que queríamos iniciar una vida viviendo juntos dentro del campo de supervivencia, ambos teníamos 21 años en ese entonces  y esta vez me tocaba proporcionarle a Fielder una reflexión como él lo estuvo haciendo durante tantos años conmigo, después de eso dejo de mentirse  y encontró la felicidad.

En ese entonces había iniciado un noviazgo con un nuevo hogar y también conocimos al nuevo miembro de nuestra pequeña familia el cual ahora es como otro padre. Por otro lado, aún recuerdo la convivencia que tenía con mi madre y mi abuelita ya que era con menos responsabilidades y más la vida de un niño, recuerdo que la primera vez que profundice sobre la raza albina de esa historia fue cuando observe el dibujo de un joven estudiante con el apellido en frances, mi abuelita orgullosamente fue quien me platico sobre aquel sujeto. Podría asegurar que mi abuelita conocía a la perfección a ese joven ya que lo describia como una flor con espinas congelado en un panorama calido, por un momento pensaba que era una clase de romance en su juventud pero nunca tuve la respuesta.

 

Me sorprende lo rápido que fue crecer, lo más difícil hasta ahora es aceptar que el mundo que tanto intente olvidar es  real.

 

En esos años no creía en las palabras de mi abuelo antes de morir sobre aquellos pensamientos de haberse criado mi abuelita en ese mundo mágico, sin ninguna prueba el confiaba en ella y asegura su nacimiento en otra dimensión pero que por cometer la traición la corrieron de ese mundo y nunca pudo volver a ver a sus seres queridos ni despedirse. Él decía que éramos la única familia de mi abuelita aun si en sus libros escondía el dibujo de otro hogar y junto con todas las fotos estaba la imagen de un joven con razgos de un albino con piel oscura.

Esa fue la primera vez que sentí nostalgia y ganas de querer conocer más sobre su vida en el otro mundo pero fue ahí cuando todo se desborono tras la pérdida de mis tutores quedándome sola y viviendo con otras personas.

 

 

Capitulo IV

 

 

 

EL PEQUEÑO LOBO.

 

 

Se hizo costumbre despertar cada mañana con una caricia en mi cabeza por parte de Chvalier como si fuera su perro, aun no me acostumbro a su horario al despertar en plena madrugada, no hago nada más que estar encerrada.

Han pasado varios días desde que estoy en el cuerpo de un lobo. El día inicia levantandome con ronroneos involuntarios al ser acariciado como animal por 10 minutos en una cama suave y grande de color blanco, la habitación pertenece a Chvalier quien insiste en que me quede aquí, siempre observo lo que hace pero son actividades muy aburridas.

Se pone en el suelo para meditar durante largas horas, después procede a leer libros y escribir uno nuevo como si fuera un escritor con muchas investigaciones extrañas en otro idioma, aparentemente no tiene miedo de que en ese tiempo que está en el suelo con los ojos cerrados llegue un enemigo y comience a destruir todo su pueblo o hagan algo peor como mandar un misil sin poder abrir los ojos porque ya estas consumido en cenizas.



#9327 en Thriller
#5355 en Misterio
#15299 en Fantasía

En el texto hay: fantasia, psicologico, romance

Editado: 28.12.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.