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Mirando hacia el horizonte la ciudad se abría paso, incluso las luces comenzaron a ser mucho más brillantes. Sonrió a la cámara cuando la enfocaron, era la décima toma que hacia en unas dos horas. Sus mejillas se sentían entumecidas, incluso le dolía el solo hecho de haber sonreído.
Cuando gritaron "Corté" pudo al fin suspirar, su asistente apareció frente a ella cubriendo de la cámara su rostro. No hacia mucho habían descubierto que algunos fanáticos deseaban ver una faceta mas humana de ella, una faceta que no estaba dispuesta a mostrar aún.
Se levanto del banquillo donde había estado sentada, esta vez no solo era su asistente sino además su asesor de imagen y la estilista personal llegaron con ella. Luego de un saludo formal con el director partió hacia su camerino, donde su guardaespaldas se encontraba buscando alguna cámara oculta por su seguridad.
Todos a su alrededor seguían tensos debido a los últimos incidentes que habían sucedido en su rutina, como encontrar vídeos de ella en paños menores circulando por el internet, se podía ver como cambiaba su vestuario del día por el del ensayo del drama que protagonizaba y eso fue suficiente para que todo el mundo tuviera de que hablar por días.
--el auto esta listo, partiremos a su departamento señorita Min en cuanto termine aquí-- dijo el hombre de gran porté saliendo del lugar, su asistente corrió a cerrar la puerta con llave en lo que su asesor de imagen le otorgaba sus prendas, dentro del camerino colocaron una cortina que le ayudaba a cambiarse sin ser notada incluso por ellos, su pudor incluso las inseguridades que habían creado a su persona le molestaban mas de lo que estaba dispuesta a admitir.
--Mel dijo que esta semana sera el sorteó--- comento la rubia con anteojos, miro hacia otro lado cuando ella contesto con un "aja" --dijo que debía de ir para estar dispuesta, ellos quieren que usted saque el boleto ganador-- se la escuchó reírse para luego verla salir con su ropa de día, que tenia un estilo retro muy de motociclista, se quito la chaqueta de cuero para ponerse el poncho blanco con pequeños destellos dorados.
--dile a Mel que no estoy dispuesta a asistir-- comentó dejando que su estilista le esponje el cabello.
Su asistente entro a la cortina para tomar las prendas y colocarlas en las perchas de vestuario --pero señorita Min, es necesario-- insistió al verla tomar el libreto del día siguiente para su drama en emisión que estaba apunto de terminar --si no va se tomará como que no le interesan los niños, y eso no es bueno-- cerro las paginas de golpe cuando por el espejo miro a su asistente, la analizo buscando en ella algún atisbó de duda pero no encontró nada.
No le agradaban las subastas donde ella era el premio ganador, había accedido a participar por el hospital KoKoNu uno de los mejores en cuanto a pediatría y neonatología.
La recaudación de los boletos había servido para comprar nuevos equipos y muchas mas camas en las salas, ampliando a otros dos pisos solo para los niños en uno de los hospitales más completos del país.
Al colocar su nombre en los anuncios, los grandes empresarios de toda la región habían gastado fortunas para poder conseguir mas de un boleto, incluso los casados. No le agradaba eso ya que no solo se veía como carne en venta. Sino que además algunos de esos empresarios en algunas fiestas de la alta alcurnia intentaban tener un par de palabras con ella, palabras que no llegaban a mas de dos frases.
Cuando estuvo dispuesta a contestar se escucharon los dos toques en la puerta, todos se pusieron alerta y haciendo un escudo frente a ella abrieron la puerta para notar a uno de los chicos que estaba trabajando en con ella hace solo segundos llegar con un bolígrafo y un cuaderno --perdón señorita Min, puede darme su autógrafo-- lo vieron hacer una reverencia y poner delante de él el bolígrafo y la libreta, con un poco de rencilla se acercó para tomar lo que se le ofrecía para darle al muchacho lo que quería.
--¿como te llamas cielo?-- el muchacho se paro derecho, el rubor en sus mejillas fue tan intenso que sus orejas se comenzaron a colorear.
--JaeBum, Im JaeBum-- ella garabateó un par de palabras terminado con su firma se lo devolvió, él muchacho hizo dos reverencias mas antes de salir de allí dando brincos y con una sonrisa brillante.
La castaña miro a su asistente antes de decir --¿quien dijo que no me importan los niños?-- su estilista sonrió antes de señalar el pasillo por donde debían salir, la rubia bufo siguiendo la arrastrando consigo el bolso Louis Vuotton.
Una vez fuera del edificio, llegaron al estacionamiento subterráneo para poder partir hacia su departamento.
Con todos dentro de la camioneta blindada partieron, vieron a varios periodistas en la entrada del estacionamiento gracias a los vidrios altamente polarizados podía notar los flashes pero no sentirlos en sus ojos. Suspiro una vez se acoplaron a el ritmo de las calles transitadas, podía escuchar el jazz suave envolver todo a su alrededor. Casi luego de pensar en lo que su asistente dijo sobre el sorteo le encontró algo de razón a la desesperada mujer.
Si no llegaba a ese lugar el miércoles era muy probable que lo tomaran a mal, aún seguía el incidente del vídeo dando vueltas, no había dado una declaración oficial de lo que sucedió incluso su agencia había logrado demandar a los que publicaron el vídeo pero el daño a su imagen estaba hecho y eso solo marcaba su carrera como algo negativo.
--iré a eso, pero el boleto lo sacara un niño del hospital no yo-- comento dejando a todos callados como si en todo el camino hubieran estado esperando su respuesta.
--se lo haré saber a Mel-- dijo la rubia tecleando en su teléfono.