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Puso un poco de gloss en sus labios, miro hacia donde su asistente estaba sacando fotos a su vestuario de la noche, era sábado por lo que la cena se llevaría acabo en uno de los magníficos restaurantes de alta alcurnia, donde solo podía llegar con una reservación.

Gracias a que uno de los organizadores del sorteo había reservado a su nombre podría comer allí, ninguna de sus antiguas citas había logrado llevarla a ese lugar por lo que seria su primera vez.

Sonrió por la ironía de la velada, llegaba allí con un desconocido y no con un enamorado. Desacomodo un poco su cabello que caía en cascada por su costado, retocó un poco sus mejillas para luego levantarse y caminar hacia el vestido.

Su asistente sonrió luego de ayudarla a cerrar el cierre del vestido cían corte corazón, descubierto por la espalda que tenia cinturón fino de diamantes blancos, la mujer le coloco un collar pequeño que solo tenia una flor de loto con un diminuto diamante en medio, los pendientes que parecían dos pequeñas perlas combinando con el cinturón que también llevaba una flor de loto.

---se ve hermosa Señorita Min-- dijo la rubia, Hanbi suspiro mandándole una mirada de muerte por lo que Hyorin miro hacia el suelo antes de corregirse y decir ---estas muy coqueta unnie Bi--- ambas rieron.

---si fueras otra persona te daría un coco--- ambas volvieron a reír.

---en serio eres mala con los insultos unnie-- confesó terminando con la cola del vestido, que no era tan larga pero podía arrastrarse. Ambas se colocaron los zapatos en la entrada, por lo que al salir del departamento Taeyang las estaba esperando para escoltar las hacia el restaurante ---me encantaría mirar su rostro cuando te vea llegar. Seguro se babea.

Subieron al ascensor cuando llegó a su piso ---no creo que se interese por mí-- contesto Hanbi, ya que luego de las fotografías el hombre solo había señalado un día cualquiera, coronándolo como el día de la cena. Su guardián la miro sobre su hombro, ella sonrió ---hay veces en las que no soy tan bonita Tae---

--eso no es cierto unnie, eres hermosa, y perfecta. Eres perfectamente hermosa---  el hombre asintió ante lo dicho por su asistente, por lo que Hanbi río. Tomo la mano de ambos dándoles una suave caricia como siempre acostumbraba, sintió el apretón de ambos en respuesta.

Las puertas se abrieron al llegar al estacionamiento subterráneo, podía sentir algunos ojos curiosos por lo que se apego mucho mas a su guardaespaldas, arrastrando consigo a su asistente.

---vamos vamos--- murmuro llegando a la camioneta, subió y pudo respirar tranquila. Su asistente le entrego una botella de agua para calmar sus nervios por lo que  bebió muy poco. ---creo que debo de ir a ver a Yoongi, el sabrá que hacer con esto--- comento al estar en marcha, podía escuchar a algunos paparazzis en la distancia. Por lo que viajo con las ventanillas arriba.

Su asistente sonrio recibiendo una mirada del guardaespaldas, ambos lo sabían ella ya no se sentía segura. Si seguía así podría causarle un daño permanente a su salud. 





 

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Al entrar al lugar pudo sentir como todo el mundo se le quedaba mirando, por lo que sabía le otorgarían la mesa en medio del salón. La detestaba, ya que eso sólo atraería incluso muchas más miradas.

Pero de cualquier modo llego allí, siendo guiada por uno de los mozos --¿desea ordenar ahora? Señorita Min--- preguntó el hombre de bonitas facciones, ella negó.

---esperaré a mí acompañante. Aún que, podrías traer un poco de jugo de mango ¿por favor?--- al hombre se le colorearon las mejillas al recibir la hermosa sonrisa de Hanbi, ella miro su fino reloj de pedrería ojeo hacia la entrada, esperando por él.

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La tardanza no era algo que caracterizaba a los hombres de negocios, Hanbi lo sabia. Eran los que más ahorraban y utilizaban su tiempo de manera provechosa, por lo que le extraño que él no llegará. En su reloj daban las nueve y media, la cena era a las siete. Por lo que no se extraño de ver a su compañera de agencia Chu LeeLing caminar apresurada, luciendo afligida. Con total elegancia se levanto de su asiento para darle un abrazo a la mujer,  recibir un beso y una increíble actuación digna de una película.

---perdón unnie, vine tarde. No creí que estuvieras aún aquí--- sonrió a la mujer.

---dijiste que te esperará y eso hice--- ambas se abrazaron como si hace años no se vieran, dio una mirada al mozo que la había atendido y este llego corriendo. ---trae la carta por favor, y eso. Ya sabes--- giño el ojo izquierdo dándole una sonrisa convincente, el hombre asintió volviendo a la cocina.

---se me hizo tarde unnie, perdón.--- ambas se sonrieron, podían escuchar algunas cámaras de teléfono destellar algunos clic's por lo que siguieron con la actuación.

---te perdonó solo por hoy--- el mozo regreso con un chesscake con frutillas encima al igual que algunas velas, esta vez los flashes no se hicieron esperar. Hanbi con total elegancia le señalo las velas a su acompañante, esta con la emoción a flor de piel cerro los ojos pidiendo un deseo y soplo las velas. Ambas recibieron aplausos eh incluso algunas felicitaciones. El sabor amargo se instalo en Hanbi, aunque nadie lo notara estaba muy molesta. 




 

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Al terminar la cena ambas subieron a la misma camioneta, sabían que muchos habían sacado fotos de su encuentro ya que los rumores de que ambas no se llevaban bien eran lo primero en la lista. Rumores que no eran mas que la verdad, Hanbi estaba apunto de lanzar a la mujer a su lado por la ventana si mencionaba algo de lo sucedido esa noche.

Pero lo sabia mejor que nadie, ella no se quedaría callada.

---me sorprendió tu actuación Min--- fue el primer comentario que lanzo la rubia, se mordió el labio inferior por no soltar algún insulto. ---¿te dejaron plantada? Eso es nuevo. Aún que no es extraño--- Hanbi seguía mirando a la carretera, su asistente apretaba los puños y su guardaespaldas quien conducía trataba de llegar a su destino sin mirar a la mujer que intentaba denigrar a su jefa. LeeLing río, quería ver una nueva faceta de Hanbi y lo iba a lograr si seguía purgando, ella no se daría por vencida ---no es extraño que pierdas tu encanto. A muchos les agradan los artistas que se arriesgan, pero tú siempre vas a lo seguro. Y es fastidioso de ver--- comento.