14 de mayo del 2019
1:59 pm
- Te ves divina, Emma - dijo Ámbar con las manos en su boca.
Me acerco al espejo para verme mejor, y las palabras de Ámbar no son mentira. Me encanta como me veo que este vestido azul corto, destaca tanto el brillo que tiene, no es tan cargado y las tiras del vestido son tan tiernos por sus lazos. Simplemente me encanta.
- ¿Quieres hacerte un peinado? Podemos ayudarte - propone Natalia.
- No gracias, me gusta llevarlo suelto - digo, pero Ámbar y Natalia se levantan y se acercan.
- No, no, todo el tiempo andas con el pelo suelto. Hoy vas a brillar dando ese discurso, Emma - dijo Ámbar.
- Además, cierta persona estará ahí - dijo Natalia levantando las cejas varias veces y Ámbar le seguía la corriente.
No me jodas que... Dios mío, lávale el cerebro a estas dos y devuélveles la neurona porque creo que la están perdiendo.
Suspiro pesadamente y cruzo los brazos.
- No me creo que ustedes dos me estén emparejando con el ¿Oh sí? - miro como mis dos amigas solo sonríen y no me dicen ni una sola palabra. Con ese silencio ya me confirman su respuesta, miro a mis amigas de pies a cabeza - Que decepción con ustedes - ellas se ríen de mi comentario.
Me siento en la silla del tocador, a ver si con un poco de maquillaje me arregla la cara de amargada que tengo ahora mismo.
- Además, no es por matarles la ilusión, pero él no ira.
- ¡¿QUE?! - gritan las dos, una pequeña sonrisa se sale de mis labios por su reacción - ¡¿Porque?!
- Nuestra conversación de ayer no fue la más agradable, mucho menos cuando tocamos el tema del discurso de hoy, por eso no ira - luego de decir eso podía ver por el espejo como Natalia y Ámbar no entendían el porqué.
- ¿Qué clase de conversación tuvieron? - pregunto Natalia.
Me quedo en silencio un momento solo para decir con una sonrisa...
- No quiero hablar de eso ahora ¿Me ayudarían a arreglar un poco mi cabello?
Ellas no saben nada acerca de lo que he estado haciendo últimamente, no saben de la discusión que tuve con Charlotte, no saben que intenté salvar a Santiago esa noche, no saben que estuve con los posibles agresores de Charlotte y Santiago, no saben que un desconocido entro a mi habitación y dejo una carta misteriosa, no saben que ayer tuve una discusión con Sebastián en relación con mi seguridad, no saben nada. Me han apoyado dándome esperanza de que aun haya manera de encontrar a Charlotte y Santiago, he compartido muchas emociones con ellas, pero no he compartido con ellas esta confusión que me hace preguntarme ¿Qué es lo que está pasando realmente?
Al final me hicieron dos trencitas y las ataron atrás, no quería algo que me hiciera sentir como si me estuviera arrancando el cuero cabelludo, así que ellas decidieron hacer algo simple ¿Y mejor que una trenza atrás con el pelo suelto?
- Me encanta - les digo y ellas me abrazan.
- Vas a estar increíble, Emma - dice Ámbar.
- Vas a darlo todo en ese escenario con tu discurso, Emma - dice Natalia.
- Gracias amigas, las quiero - y yo también las abrazo.
4:47 pm
Ya casi se acerca la hora de dar el discurso, no puedo comer nada mas de los puestos que hay por los nervios. Desde las tres que llegue con las chicas al colegio solo hemos estado de puesto en puesto probando de todo, viendo ciertos concursos y atracciones pequeñas que han hecho los estudiantes, pero lo mejor, lo mejor es el show de la noche, ese show siempre me deja asombrada. Ahora mismo me encuentro sentada en una de las mesas del patio mirando desde lejos el edificio del salón del teatro en donde están terminando los últimos detalles.
Me voy a morir de un infarto.
- ¿Qué sientes que dentro de unos vas a estar parada en ese escenario? - pregunta Ámbar mientras se come su helado de vainilla.
- Por favor no lo menciones, creo que iré al baño a calmar los nervios - me levanto de la silla y tomo mi celular.
- Esta bien, pero no tardes, que ya casi es la hora - dijo Natalia.
Yo solo le mostré un pulgar arriba y me fui al baño.
Unos minutos en el baño me ayudaron a relajarme un poco, por momento me he calmado, pero sé que cuando este en el escenario esos nervios harán que mi corazón explote, aun así, daré un buen discurso, este momento no lo vives todos los días, este momento en el que eligen al estudiante prodigio del año para que dé un discurso en honor al aniversario del colegio. Por ser este mi último año quiero conservar cada recuerdo preciado antes de irme a estudiar al extranjero.
Son las 5:04 pm, voy a salir de aquí, lavarme las manos y volver con las chicas.
- ¡Oye Patricia! ¡Ven rápido! ¡Vamos! - una chica entra al baño haciéndole señales a su amiga para que salga.
- ¿Qué paso? - le pregunta la chica con mechones azules.
- ¡Vamos! ¡Es para ayer! ¡Son los chicos de La Clase 6-B!
¿Cómo dijo? Dejo de lavarme las manos para escuchar.
- ¡¿Que?! ¡Pero decime antes!
Las chicas salen disparadas del baño. Me termino de lavar las manos y salgo.
Cuando los veo ahí en el pasillo, recuerdos invaden mi mente, esa superioridad, ese poder, esa diferencia que siempre llego a marcar cada estudiante de La Clase 6-B haciendo que siempre estemos en la boca de las personas, para mi ellos son como cualquier otro humano en la tierra, pero para los demás ellos son piezas de oro.
Veo a lo lejos, Verónica, Alan, Adam, Lilia y un chico a lado de ella que no sé quién es. Lilia me ve y su alegría hace que esta niña venga corriendo hacia a mí.
- ¡Emma! - dijo alegre abrazándome
Yo le devuelvo el abrazo - ¡Lilia! ¡Hola chicos! - los chicos me saludan con alegría.
- Lady Lilia, sabe que tiene que tener cuidado cuando corre con tacones - dijo el chico que venía a lado de ella regañándola.
#3759 en Thriller
#1945 en Misterio
#1483 en Suspenso
familia odio rencor abandono dolor, suspenso amor dolor, secuestro venganza romance
Editado: 18.09.2024