La conciencia de los sueños

Corre...

Me encuentro desorientada entre la penumbra manta nocturna, adornada de vidas que ahora perecen en la atmósfera, las calles inundadas de la soledad del silencio, estoy sola sin presencia de ningún alma.

 Comienzo a caminar para divisar algo más, mis pies están descalzos más no siento frío o calor, mi cabello cae cuál cascada hasta mis tobillos, mi cuerpo cubierto por la fina capa de tela como seda color lila, mi piel de porcelana y clara como hoja, como un fantasma, un cuerpo sin vida que por las calles ahora camina pretendiendo estar viva. Camino, acelero el paso, paro, comienzo otra vez hasta quedar frente a lo que parece ser mi hogar. 

La linterna delantera ilumina el patio pero parece estar tan sola la casa que temo entrar ya que desprende un aura extraña. Cambio de rumbo caminando una cuadras atrás, las casas están en la más absoluta oscuridad a excepción de las primeras dos de la esquina. 

La luz se complementan con mi sombra y alguien más(?). Volteo la mirada en busca de aquellas sombras que no me pertenecen y es ahí cuando observo a un hombre ya mayor de edad y una pequeña niña de tierna mirada acompañada de un niño que se mantiene rígido. 

Aquel hombre se dirige hacia mi y toma mis manos con las suyas y me dice con un tono emocionado "Ya has nacido". En aquel momento cuando aquel hombre termina la oración siento un escalofrío recorrer todo mi cuerpo dejando me una sensación de desconcierto y temor, lo que provoca que por inercia suelte el agarre de sus manos. 

Confundida intento calmarme y comprender las palabras de aquel hombre, que unos segundos después me muestra una tétrica sonrisa mientras me mira fijamente para nuevamente hablar y dice " Atrapenla". 

Cuando intente procesarlo mi cuerpo se encontraba en un frenético movimiento de aceleración, estaba corriendo mientras sentía mis piernas pesadas como rocas y mi palpitar descontrolado que hacía que cada respirar a mis pulmones arder. Cada paso se me hacía eterno ya que el camino tan solo parecía alargarse y aquellos dos niños estaban más cerca de mí, el hombre solo me miraba con un aterradora sonrisa mostrando su dentadura cubierta de aquel tono carmín de la sangré. 

El camino termina y me encuentro frente a la casa de mi vecina, en un intento por auxiliarme entró sin pensarlo dos veces a aquella casa. La casa está iluminada totalmente pero vacía, el piso de cemento desaparece por una loceta aperlada con líneas azules y al voltear hacia la entrada ahí están aquellos dos niños. Cubiertos de sangre, sosteniendo una daga la niña y el pequeño un cuchillo, es ahí donde colapso mentalmente e intento correr hacia una habitación en busca de escapar de aquel destino cruel.

Pero al dar el primer paso en mi escape el piso comienza a inundarse y comienza a hundirse de forma diagonal, con temor y latidos desenfrenados intento mantener la razón, mi cuerpo resbala al hacer fricción el agua que cubre el piso con mi vestido de seda. Aquellos niños sonríen satisfechos a punto de apuñalarme, desesperada me aferró al piso que cada vez se balancea más incrustando mis uñas mientras lágrimas saladas recorren mis mejillas, siento como la carne se desprende de mis uñas provocando una intensa agonía. 

Mi cuerpo comienza a debilitarse, mi brazos blancos como papel manchado de cuerdas internas verdes y moradas, mis piernas sangrando y mi vestido extrañamente limpio. De pronto mi temor disminuye y mis latidos se encuentran estables, mis cuerpo ya no siente más dolor o cansancio y es ahí donde me doy cuenta de que me he soltado a punto de caer en las garras de aquellos infantes. Al soltarme caigo sobre ellos pierdo la conciencia, todo se torna oscuro para después aclararse y darme cuenta de que me he despertado de aquel tormento.

Sola en mi habitación, en la esquina de mi cama con el corazón hecho un desastre y mi rostro cubierto de humedad salada, pero extrañamente siento un dolor intenso en mi costado izquierdo y mis piernas están entumidas. Aquellas sensaciones se quedaron presentes aún en mi despertar y eso me llegó a alterar, como un sueño podría provocar un dolor inexistente.

 

Este es uno de muchos sueños que me han atormentado por años una y otra vez...

Atte.M.L

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.