Dan.
Estaba encerrado, el maldito policía me tenía en su auto, John estaría preso. Pero había alguien que no encajaba en la línea, el policía principal que bajo de ese auto al gritarle a la pelirroja. Yo se que e escuchado su voz o haberlo visto alguna vez, pero quizá sea el mareo del golpe en la cabeza que me han dado.
-Quítate el casco. -mascullo, me veía a través del retrovisor.
-Acaso no lo sabes es la moda amigo. -Bromee un poco, tal vez si lograba sacarlo de quicio, quería golpearme y así tomar ventaja y escapar. Pero como localizaría a John si lo tienen capturado. Era una decisión difícil, escapar para mi beneficio o la venganza.
Soy el tipo que le agrada más la idea de la venganza.
Amber:
De regreso a una pequeña estación proporcionada por el alcalde del lugar entro todo el equipo y comenzamos a registrar los sucesos. Todos aplaudían y se abrazaban, acabamos la misión y atrapamos al delincuente mas buscado. Y lo eh hecho yo.
Joe se acercaba hacia mí, me abrazo ha sido un largo tiempo desde que algo así me había pasado y se sentía…bien.
-Estoy muy orgulloso de ti Amber. -su mano se posaba en mi hombro su mirada se suavizo y se alejó de mí. - gracias papa. -susurre.
Beau se acercaba a mí, realmente no se si lo quería cerca, después de su pequeño arranque en la escena con John. No parecía el en ese momento y ahora ya no sé si lo deba tener cerca. Pero por otro lado…
-Amber, creo que me e disculpado mas contigo que con cualquier otra persona debes pensar que soy un idiota.
-Si lo eres. Te has ido por la mañana. – lo mire fijamente pero el solo bajo la mirada.
-Eso lo sé y también me disculpo, pero bueno… realmente no se porque no me quede. – se acerco a mi y tomo mi mejilla. - Crees que puedas darme ya sabes una oportunidad para disculparme. - sonreí.
-Lo tomare. -me acerque a besarlo. Sus labios son suaves y su aliento era fresco olvide por completo que estábamos en medio de la estación. Papa me veía del otro lado de nosotros no se veía muy feliz.
-Debo interrogar a chico del casco. -dije
-Chico del casco? – replico con una sonrisa.
-Si me imagino que tiene nombre. -empecé a reír.
-No creo que debamos interferir en ello, que te parece si mejor salimos a comer algo despejar tu mente, has tenido un día largo. -tomo mi mano.
-Esta bien, pero no siempre podrás negarme el entrar sabes, yo estoy tan involucrada como tu en este caso. -una mueca amarga salió de su boca, pero pareció aceptarlo.
Después de una cena maravillosa y besos intercambiados no podía dejar de pensar en chico del casco y John. Estaba ansiosa de verlos y preguntarles de todo, saber dónde están todas esas personas desaparecidas. Una explicación de la caja que significa todo esto quizás, solo quizás Ed pudo ser parte de todo esto, pero no podía hacerme ilusiones.
Beau:
-Así que tu y la detective eh. -John me miraba fijamente. - no pensé que pagaran tan bien, amenos que. ¡OH DEMONIOS TE ACUESTAS CON ELLA CIERTO!, Rayos amigo te envidio tanto, espero te hayas divertido porque yo no pienso quedarme callado y no pienso caer solo en esto. -Sonrió.
-Steel, se nota que estas perdiendo la conciencia. Pero te llevaremos a la cárcel en cuanto nos den tu permiso de traspasarte como a un animal. Serás procesado en Seattle.
-Oh cierto olvide que te pueden escuchar. - miro a su alrededor.
-No pienso quedarme callado. - dijo con su mirada desafiante.
-Y yo no pienso dejarte hablar. - lo mire de la misma manera.
Dan:
Odio estar encerrado, odio estar vigilado, pero era necesario esperar el momento adecuado.
El policía que creía recordar entro.
-Como escapaste. - cerró la puerta a sus espaldas.
-Con razón creía conocerte. -sonreí abiertamente.
-Claro que me conoces, tu eres el bastardo que está arruinando todo. - debimos matarte en cuanto pudimos.
-Sabes que es mi especialidad. No creí que también me buscarían desde la policía. -Mis muñecas comenzaban a doler. Comencé a zafarme de las esposas, movimientos silenciosos ya que la silla haría demasiado ruido si lo hago en un solo movimiento.
-Quisiera dejarte libre, pero me quiero divertir un rato. Disfruta tu estadía si necesitas algo podrías ya sabes gritar, es divertido escucharte gritar me recuerdan viejos tiempos. -Cerró la puerta con fuerza al salir.
Amber:
Una vez mas Beau estaba en mi habitación besándome con locura, sentía su calor con el frio de Roma, era la sensación mas placentera que pude sentir alguna vez. La habitación quedo en silencio a comparación de unos minutos que estaba llena de jadeos y gemidos de nuestra parte. Beau estaba a mi lado su hombro era un lugar cómodo para descansar. Era perfecto. Pero aún no podía quitarme de la cabeza a Steel y a chico del casco, quería verlos de inmediato uno mas que a otro, pero era necesario saber todo, al menos lo era para mí.
-Eres muy hermosa Amber. -Rozo mi mejilla con mano.
-Basta, no sé qué decir en situaciones así. -Era cierto sin Ed hablándome al oído o tomando mis hombros cada vez que lo creía necesario yo no era nada no era nadie. Hasta ahora. Tenía al detective mas guapo de la estación y había capturado al delincuente mas buscado con solo un silenciador y un auto rentado.