CAPITULO VII "UN VIAJE Y ALGO MÁS"

Olivia:

Me encuentro observando la playa desde mi habitación, de verdad no hay nada mejor como las playas de Brasil, estoy decidida a descansar antes del desfile de la diseñadora a la que debo de convencer para firmar el contrato, me cambio la ropa por un vestido de flores y unas sandalias, tomo mi libro de Jane Austen y mi llave del cuarto, mi celular y me dirijo a la piscina del hotel para estar frente a un buena vista para deleitarme con la historia de amor de Emma. La mañana se pasa con rapidez y cuando me doy cuenta ya es hora del almuerzo, me dirijo al restaurante para pedir algo de comer y observo el mensaje de Emily:

WhatsApp

Emily: el presidente a estado preguntando por vos a los demás directores.

Olivia: Ya se firmó el contrato “le restó importancia al hecho de que Bruno hace preguntas de mi trabajo, era obvio que lo haría, después de todo piensa que soy una casa fortuna.

Emily: Lo firmaremos en unos minutos, estamos esperando al abogado de la chocolatería Dumont para concretar el acuerdo.

Olivia: Avísame cuando lo hagan, y dile a Gustavo que espero que trabajemos, más seguido. Y no te olvides de acompañar al director Dae-hyun a ver a los proveedores de las flores para el comercial de los chocolates, debes ver al representante de María Becerra para la realización del marketing de su próxima gira para ver las especificaciones que debe tener este, y no te olvide de revisar todos los detalles para el evento de la Bodega Viena.

Emily: Esta bien, y deja de pensar tanto en el trabajo, descansa al menos un rato antes del desfile.

Olivia: Por supuesto que lo hago “le mando una foto de la vista de la playa” está hermosa la vista.

Emily: Que envidia, a la próxima debes llevarme.

Olivia: Por supuesto, te dejo me voy a almorzar.

Hago mi orden y observo con tranquilidad por la ventana, pero, cuando observo a la señora Dumont acercarse a mi con mucha emoción, diablos no puedo escapar, es muy escandalosa, y desde hace ya varios meses intenta emparejarme con su hijo menor, quien es un don juan que solo sale con modelitos de cuerpos perfectos, Dios deseo escapar de ella.

• Oh querida estas aquí – su voz chillona me sobresalta – que hermosa coincidencia es esta, ¿Qué haces en Brasil mi niña? – se siente su emoción
• Estoy aquí para el desfile de esta noche – digo con una sonrisa cálida y veo como se ciento en mi mesa y llama al mesero para pedir más comida.
• Que bien querida, entonces podemos sentarnos juntas y observar la belleza de la ropa de la casa Laurent – toma mis manos y sonríe – mi hijo menor también está aquí así que nos vamos a sentar juntos los tres, supongo que viniste sola no es cierto querida – su mirada esta tan fija en mí, que asusta.
• No, estoy aquí acompañada por un colega de trabajo – miento intentado zafarme de pasar la noche con la señora más cargosa del mundo.
• Emily está aquí – dice emocionada – perfecto, así podre charla con ella.
• No – suelto y ella me observa – con otro compañero varón – doy una leve sonría.
• Aun mejor, así me distraigo con el muchacho – que viejita verde me resulta.
• Claro – respondo con una sonrisa falsa.

Lo que parecía que iba ser un almuerzo tranquilo y pacífico, se convirtió en la charla de una señora ricachona, que me habla de sus tiempos en la escuela y de su perro que esta enfermo, me limito a sonreír y responder poco, esta persona realmente puede ser estresante, terminamos el almuerzo y cuando pensé que por fin tendría paz, ella me pregunta que hare en la tarde y si podemos ir de compras juntas, pues se ha olvidado lo que usara en el evento, me limito a sonreír y decir que tengo trabajo por realizar así que volveré a mi habitación. Le doy las gracias y me dirijo al ascensor para volver a mí habitación y encerrarme ahí hasta que se le olvide que me vio, pero en el ascensor me encuentro al idiota de Luca Fiere que abre sus ojos al verme, me limito a entrar al ascensor y marcar el piso y observo como las puertas se cierran y nos dejan a los dos solos, el silencio predomina en el ambiente, lo cual me calma debo de admitir, las puertas se abren y salgo con tal rapidez que no dejo tiempo para nada, me dirijo rápidamente a mi habitación y entro en ella con rapidez, pero no pasa mucho para que le den unos toques a mi puerta, no abro porque se de quien se trata. El verlo me deja un shock, lo cual me provoca un dolor de cabeza, me limito a tomar la pastilla que me recetó el doctor y me hecho en cama, está pastilla siempre me deja adormilada luego de tomarla, agradezco estar en un hotel con aire acondicionado, porque de lo contrario no aguantaría estar en cama con esta calor, cierro los ojos y despierto luego de unas horas, levanto el celular y veo la hora, me e quedado dormida por al menos dos horas, observó si tengo algún mensaje importante, y me topo con el mensaje de Emily diciéndome que se firmó el contrato con la familia Dumont, y luego leo el mensaje que dice, creo que te llegará una sorpresa al viaje y una cara picarezca, eso me deja con bastante dudas, tocan la puerta nuevamente y me mentalizo para no matar al patán que está fuera de mi habitación, salgo furiosa y cuando abro la puerta: 

•Déjame en paz idio - me detengo al observar a mi jefe confundido - Bruno - digo mientras lo observó a él y a la administradora del hotel.

• Disculpe las molestías señorita Méndez, pero usted no respondía el teléfono y el señor insistía en que la conoce - suspira con preocupación - ustedes dos se conocen.

• Si - digo confundida - él es mi...

•  Necesitamos hablar con urgencia - no me deja terminar mi frase - si nos disculpa señorita, ambos tenemos cosas de que hablar.

• Claro - dice preocupada, mientras ella me observa - lamento las molestías, - observó cómo se voltea para retirarse.

• ¿Podemos pasar? - pregunta, estoy a punto de cuestionarle, pero veo que del ascensor sale Luca, quién nos observa y está caminando hacia nosotros.