La Elegida De Los Muerte Negra [1° L/m.N]

1: ¿Cómo termine Aquí?

Hola, soy Estefani Prais. Se preguntaran ¿qué diablos hago aquí tirada en una celda? Es sencillo, hace cinco años cuando tenía específicamente dieciséis, fui raptada por los multra. Ahora tal vez también se pregunten ¿Quién carajos son los multra? Bueno ellos son los guerreros de los muerte negra.

Los Muerte Negra...

Son una mezcla entre razas, tanto de vampiros, lobos, brujos y humanos, aunque en algunos casos también son de demonios. Son más fuertes que cualquier especie existente tanto al ojo humano como el sobrenatural, llevan un tatuaje el cual lleva la función de su lado espiritual o "Animal espirual", como ellos lo llaman. Le dicen así porque tiene forma de un animal desde el más pequeño al más grande, además, como dice su nombre, controla la parte animal en otras palabras su lado lobo. Ya al referirse a lo espiritual le ceden tres poderes pero sólo eso les sucede a los puros. Cuando usan sus poderes sus ojos cambian de color según su animo, su alimento son almas humanas lo cual a mi vista es repugnante. Su única debilidad es la verbena, si las tocan los quema, pero en cambio si los beben su cuerpo arde y se vuelve ceniza.

Parece que fue ayer que descubrí todo esto sobre los muerte negra...

[...]

Yo estaba con mi padre en el gran parque de sntarpars, suplicándole que dejará de investigar sobre los muerte negra, su motivo para hacerlo era mi hermanita Lucy, la cual nació siendo uno de ellos. Mi otra hermana era Tif la cual se tomaba muy en serio en protroteger a nuestra hermana.

Cuando de la nada unos hombres vestidos con ropa completamente negra se aparecieron enfrente nuestro.

Sus caras neutrales no decian nada bueno, así que lo más razonable sería hablarle con la mejor amabilida.

Para lastima de ellos yo no lograba convencer a mi padre así que...

--¿Qué quieren?--Emm sip... fui grosera, no me culpen, ¿está bien?

--A ustedes. --dijo el hombre mas alto sonriendo de lado, un segundo... ay no.

-- Sí... -dijo papa escaneándolos de reojo para luego voltear a verme a mi--. Estefi... si está es otro de tus trucos para hacer que deje mi investigación, pues... Lo siento, cariño, pero no pue... --Lo interrumpí.

-- No, papá... Yo... Está vez no... --Las palabras se trababan en mi lengua, no sabía que decir.

En cambio los tipos sonrieron de lado. Esto no es buena señal.

--No va a funcionar, no voy a dejar de averiguar e informarme sobre los muerte negra. --dijo mi padre negando varías veces con su cabeza.

--¡Y algún día nos mataran! AISH --dije al vorde de mi paciencia -- ¡A mi por ser la intrusa y complice, y a ti... Y a ti... Por no tener la puta boca cerrada!...--Y explote--. No ves que tenemos compañía. --Señale a los hombres los cuales nos veían serios. Ya habían dejado de sonreír --. Si van a venir... que vengan ya y me maten de una puñetera vez. --Dramatize.

--Están de suerte...--Se oyó la voz brusca de uno de los hombres, sus ojos se fueron tornando de un negro no tan fuerte, eran opaco como si perdiera el brillo

--Estefani...--susurro papá--. Corre.

--¡Que mierda cres que hago!--Dije brusca mientras corría con todas mis fuerzas.

Sentía el aire frío del otoño golpiar suavemente en mi cara--. No mires atrás..., ni se te ocurra mirar atrás, estefani. --Me reclame a mi misma y ¿adivinen que hice? Sí, mire atrás.

Uno de los tipos me perseguía el otro tenia agarado a mi padre. Por descuidada me tropecé con una roca que estaba al frente de mio y caí de boca al suelo. El tipo aprovecho y me agarro los brazos, empecé a pataliar y a forcejear con todas mis fuerzas, hasta que logre darle un cabezaso. Este solto mis manos pero antes que pueda hacer algún otro movimiento rodio su brazo fornido en mi pequeño y fino cuello, así logrando una quemadura leve con la gema de mi collar con vervena.

--Perra--me gruñe mientras suelta quejidos de dolor y yo gustoza y con júbilo me río de su quemadura como nelson de los simpson ya saben algo como "JA JA" pero mi risa fue parada por la cachetada que recibí. Voltee la cara donde pude ver su sangre negra rodiando su naris eso hizo que mi sonrisa se agrandará en mis labios.

Me llevo junto con mi papá a una camioneta negra. Nos subió a puros forcejeos, claro la que forcejio fui yo, mi padre estaba tranquilo esperando su muerte.

Al poder subirme nos pucieron unos sacos negros en nuestras cabezas, ya creo que exajeran con el negro. Osea, ¿Qué tienen con el negro?

Nos llevaron a... sabe dios dónde. Al llegar según creo yo por que detuvieron el auto. Mis sospechas se confirmaron cuando nos bajaron del auto y nos quitaron los sacos, lo primero que vieron mis ojos fue la cara de un hombre (multimedia) esté nos vio con repugnacia y superioridad.

--Vaya. --dijo el hombre desconocido para mis ojos, me ve a mi luego ve al idiota que deje sangrando--¿Qué te paso, Estuar?...--Silencio... derivado del silencio más silencioso llegado de los silencios incómodos. Sonreí orgullosa de mí magnífico trabajo. El hombre se acerco a mi con las inteciones de tomarme pr el cuello pero Estuar lo freno.

--No, señor... Tiene vervena --dijo Estuar mostrando la marca que se hizo al tocar mi bello cuello. Quién lo manda agarrarlo.

--¿Y está quién es? Yo sólo pedí al investigador, no a una mocosa --Lo que salio de sus finos labios provocó que mi sonrisa se borrara. ¿Mocosa? ¿Me acaba de llamar mocosa...? A no, esa si que no.

Empecé a forcejear con Estuar, pero el pendejo es fuerte. ¡Diablos!--Oh, la niña tiene carácter. --Sonríe con suficiencia. Entre cerre mis ojos, pero él voltea a ver a mi padre--¿Quién es?.

--Mi hija...--dijo Papá susurro--. Y usted debe ser multro, el líder de los multra sur... ¿No?.




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