Capítulo 5

Al Día siguiente...

Narra Mi Yeon:

Siempre es la misma historia, coje rabia, y se la quiere desquitar conmigo, y ahora tengo esa curita en mi mejilla, me tocará inventar cualquier cosa, Ash. Entró a la empresa...

-Señorita Lee... Y ¿el presidente? -pregunta la Secretaría Ji-

-¿Cómo?, ¿no ha llegado? -pregunto-

-No, por eso le pregunto, es extraño que el presidente llegue tarde. -explica-

-Hay Dios. -suspiro, saco mi celular para llamarlo y contesta la señora Park- ¿Señora Park?, ¿Sung Jong dejó el celular en casa?

-No mi niña, el presidente está aquí. -me contesta ella-

-Pero yo salí y no lo vi. -explico-

-Está aquí en su habitación.

-¿Qué?, ¿no piensa venir a trabajar?

-Está enfermo.

-¿Cómo?, ¿Y por qué no me dijo nada?

-Ahora me doy cuenta, y por eso conteste, tiene la temperatura alta.

-Esperame, ya voy para allá. -Cuelgo- Secretaria Ji, por favor, si el presidente tiene alguna reunión hoy, aplacela.

-¿Le pasó algo al presidente? -me pregunta la secretaria-

-Solo se siente un poco mal. Haz lo que te dije, ¿si?

-Sí señorita. -responde-

Salgo de la empresa y encuentro al abogado kang esperándome.

-¿Ya está lista?, hoy si llegue temprano -Sonríe-

-Abogado, creo que hoy no podremos ir a la reunión. -digo un poco apresurada-

-¿Por qué?, ¿pasa algo?, ¿se siente mal?. -me pregunta algo preocupado-

-No, yo estoy bien. El que no está bien es el presidente, ahora me dirijo hacia la casa para ver cómo está. -explico-

-Entonces, déjeme llevarla.

-Gracias. -Nos subimos al auto-

-¿Qué tiene el presidente?

-Amaneció un poco mal, es todo.

-Y a usted, ¿qué le pasó en el rostro?

-Ah, ¿esto?. Una vasija se rompió ayer y un pequeño pedazo rozó mi mejilla.

-Pero, ¿Está bien?

-Si, lo estoy.

Llegamos a la casa, entramos y me dirijo a la habitación de Sung Jong.

-Señora Park, ¿Cómo se encuentra? -pregunto-

-Ya se le bajó un poco la calentura.

Estaba acostado en la cama, aún dormido. Y me acerco.

-Nana, ¿puedes ir un momento a bajo y atender al chico que está allá?. Por favor.

-¿Quién es el chico?

-Un abogado, estaba a punto de salir de la empresa cuando llamé.

-Ok mi niña, ya bajo. -se va-

-Ash, ¿cómo es que te paso todo esto?, ¿por qué tomaste tanto? -Me siento en un pequeño banco para quedar a su lado- A veces me pregunto ¿por qué sigues poniéndote celoso?, si tú no me quieres. -Me lo quedo mirando-

Todo esto lo hago por esas condiciones que puso su padre, siempre las he seguido al pie de la letra, nunca deja de retumbar en mi cabeza.

-Si tan sólo dejarás de ser así conmigo... tal vez, podría quererte. -Suspiro-

Narra Hyun:

La Señora de la casa me recibe tan atenta.

-Tenga abogado. -Me da un poco de café-

-Gracias. -Se lo recibo-

-Así que, ¿usted es el nuevo abogado? -me pregunta-

-Si, así es.

-Mmm, la señorita vino ayer muy feliz.

-¿Cómo no estarlo?, pudieron firmar el contrato. Hoy íbamos a hacer las gestiones de otros documentos que faltan, pero ocurrió esto.

-Claro, la señorita tan atenta.

-Y ¿el presidente está muy mal?

-Un poco de fiebre. Pero si gusta puede pasar a verlo.

-Gracias.

¿Qué?, me da curiosidad... así que me levanté, dejé la taza de café y subí.

Cuando llego, la puerta estaba abierta, veo a la Señorita Lee sentada cerca de él. Y me quedo afuera de la habitación, sólo escuchando.

-... ¿Mi Yeon? -pregunta apenas despertando-

-Si, soy yo. -el presidente hace el esfuerzo para levantarse- No, no te levantes. Aún estás débil.

-Suspira- ¿Qué haces aquí, mujer? Deberías estar trabajando.

-Si claro, y tu aquí enfermo.

-¿Le avisaste a la Secretaría Ji?

-Lo hice, le dije que las reuniones que tenías para hoy las dejará para después.

-Bien hecho.

-Ash, ¿por qué tuviste que tomar tanto?. -coge un trapo húmedo y se lo coloca en la frente-

-Hay, está frío!

-Para que te enfermas, llorón.

-Oye, ¿qué te pasó en el rostro?

-Ya no te acuerdas, lo de la vasija, ayer.

-No, ¿qué pasó?.

-Mirate los brazos. -le dice ella-

-Se mira los brazos- Ash, con razón me arden. Y, ¿a tí no te paso nada más?

-No puedo creer que no te acuerdes, claro, como estabas tan borracho.

-Pero sabes, Que bueno que estés bien. -La abraza-

Ahora siento que el adolorido soy yo. Ash, qué tontería.

Narra Mi Yeon:

¡¿Qué es lo que le pasa?!, por que se comporta tan extraño.

-¿Qué pasa?. Sabes que esto es lo más incómodo para mi. -Le digo-

-El abogado está mirándonos. Y ¿él por qué está aquí?

-¿El abogado? -trato de levantarme pero no me deja-

-Oye, recuerda, eres mi esposa.

-¿Vas a comenzar con lo mismo?

-No, sólo lo dejo en claro.

-Ash. -escucho que tocan la puerta- Idiota. -Sonríe y lo suelto para mirar hacia atrás- Abogado.

-¿Interrumpo algo? -pregunta el abogado-

-No tranquilo, pase. -le digo y entra a la habitación-

-Y, ¿Cómo se encuentra presidente? -sigue con sus preguntas el abogado-

-Un poco adolorido, es todo. -responde sung jong-

-Bueno, ya que estas un poco mejor, nosotros nos vamos. Tengo cosas por hacer, ya sabes. -Afirmó- Nos vemos más tarde, tomate las pastillas sin discutir y déjate cuidar de la Señora Park. -mientras digo esto me levantó y tomó mi bolso-

-Si, esta bien. -me responde-

-Vamos abogado. Cuidate.

-Igual tú. -Responde el presidente y vamos saliendo de la habitación- Linda.