En alerta

En alerta 
Un último disparo de una flecha con fuego griego da en la garganta de la reina para que por fin su vida se pague, el fuego consume el cuerpo y la plata la vida. 
Kalkota/Calcuta, India. 
En el sótano del Victoria Memorial, en el sótano de construcción se encuentran diez alfas, “reyes” de sus tierras, unas lejanas a la griega otras cercana, el común denominador de esos diez es la enemistad con los licaones. 
_Asena se atrevió a ir en contra de ellos y miren como finalizo todo. 
_Y sin recibir ayuda, me refiero que Asena no solicito ayuda de ninguna manada. 
_Nosotros lo superamos en número a los Licaón, no podrán con nosotros... 
_Yo me deslindo de toda responsabilidad – los nueve restantes voltean a ver a la mujer- _ Mi imperio es pequeño sería el primero en caer. 
_Con gusto te ofrezco protección Aiko. 
_Y aceptaría, pero debo ver por mis cachorros primero. 
_No te creí tan cobarde Aiko. 
_Sabes bien que no lo soy, acepto mis limites Krasnny, ustedes deberían aceptar el suyo. 
_La unión hace la fuerza y ellos llevan milenios en el poder. 
_¿Cuál poder? Si ellos hace más de dos mil años fueron reducidos a solo Grecia, su imperio cayó. 
_Pero ellos no.  
_Déjenla, si mal no recuerdo es Ciro “su padre”. 
_Así es, es mi padre, y soy buena hija. Mi esposo puedo hacer lo que sea, yo estoy fuera. 
La japonesa deja el sótano, el ruso detrás de ella justo al cruzar la puerta la cabeza de la alfa cae por los suelos, Krasnny regresa con el cuerpo de ella lo deja caer, el esposo de Aiko solo asienta. 
_Sabía demasiado, corran la voz de que fue Ciro quién la mato, así los demás clanes de Japón se van a unir. 
_ Prosigamos. Vera ¿creen cumplir su parte? 
_¡Claro! Nos deben la vida de Karenina. 
_Eso es verdad nos deben esa vida. 
_ En ese caso prosigamos...  
_En estos momentos están por iniciar el ataque. 
_Esperemos buenos resultado. 
_Debemos levantarnos con la victoria, aprovechando que ya murió Elián. 
_Uno, nos faltan dos, Calix no sabe ser rey, no sabe como dirigir una guerra. 
Atenas, Grecia. 
Es medio día y Darío se encuentra en medio de las piras, que aún no se usan esperan a que lleguen los Buitimea, el menor inmutable con nada más que el short como prenda de vestir, sigue inmerso en los sonidos de que le rodean y si estos cambian para mal. 
_”¡Wow! Te ves esplendido a pesar de tu dolor. 
_Puedes salir de mi cabeza por favor. 
_” Lo haría con gusto, pero me han pedido un favor muy especial que es cuidar de ti”  
_¿Quién solicitó tal estupidez? 
_” Una mujer que es un verdadero fastidio” 
_Hablaré con Nereida. 
_” No fue ella” 
_¿A no? -curioso abre un ojo- _ ¿Quién?  
_” No la conoces, pero ella a ti y a Elián si”  
_- Los sonidos cambian, Darío retira la única prenda que portaba- _ Si no ayudas, no seas un estorbo, y sal de mi cabeza. 
Como  abejas a la miel cientos de “hombres” saltan las altas bardas de la Villa Licaón con el único objetivo de dar fin a la familia Licaón, Darío coloca una rodilla en el piso deja caer su brazo derecha a su costado como si no tuviera fuerzas, baja la cabeza...las vibraciones de los atacantes se pueden sentir por toda la villa, las alarmas suenan, en la casa principal se puede ver a mujeres y niños correr, un par de hombres saltan con el fin de dar muerte a Darío, el griego da un golpe en la tierra con la derecha otro con la izquierda se pone de pie al hacerlo es la bestia blanca con espada y escudo en mano, de las piras varios soldados emergen iniciando así los enfrentamientos.  
A cierta distancia Ciro ve observa las peleas cada tanto tiempo dice palabras, no son palabras al aire, no, está identificando a los agresores, Talio a lado de su tío escribiendo al tiempo que habla por teléfono replicando las ordenes de su tío, yendo en trinas un rastreador, un cazador y un asesino. 
Todos en la villa logran escapar dejando el inmueble vacío e incluso uno de los atacantes da la orden de alto, observa atento a su alrededor da indicaciones de buscar por toda la casa...no hay mueble alguno, no encuentran ser vivo era como si por arte de magia la casa se hubiera quedado vacía. 
_¿Qué ha pasado? 
_Vimos gente correr despavoridos. 
Todas y cada una de las puertas son cerradas por fuera, Darío emite un aullido, Ciro hace una señal y el cielo se llena con ruidos de helicópteros, y desde las alturas son extraídos el príncipe y sus hombres incluso los heridos, acto seguido explosiones inundan la villa haciéndola caer en pedazos, Darío se coloca los audífonos especiales, da órdenes a los carroñeros de no dejar nadie con vida. Ciro ve caer su casa de cientos de años. 
Londres, Inglaterra. 
Giles asienta se escucha el crujir de su cuello, aclara su garganta, se acomoda sus gafas oscuras, se encamina por el exquisito edifico de última generación, llega con sus primos, los cuatro se quedan en completo silencio. 
_Aquí no ha pasado nada, nosotros no sabemos, Giles anda con Denes como su nada, Elena conmigo. 
_Lo que digas primo. 
_Giles – la sonrisa que se le dibuja al sucesor la entiende a la perfección el mencionado-  
En la que fuera la casa de la reina Artur y Marian, así como los antiguos escribas han sido amagado, el resto de la manada estaban enterados den que pertenecían ya a los Licaón, en venganza iban por la cabeza de regente heredero de la primera manada, los asesinos de Boudica llegan al moderno edificio. Calix se en cuetra junto a su hermana menor viendo la televisión y comiendo bocadillo...la puerta es derribada de un golpe, por la ventana entran más de cinco hombres, el griego toma a su hermana, la coloca detrás de él, coloca una mano atrás, otra enfrente como tratando de detener el ataque, una rápida mirada por la habitación quince en total, repite el número en voz alta, camina con su hermana dando paso hacia atrás hasta tocar con pared, al mismo tiempo se mueven a lado izquierdo hacen el mismo movimiento de inclinación “quince” dice en voz alta y en griego, él se inclina, Elena usa la espalda de su hermano como plataforma saltando a los enemigos, empezando a pelear, Giles y Denes se dedican a llevar al resto a justo donde ellos querían el último piso del edificio. 
Elena ya ha dado muerte a cinco sin salir bien librada pues las piernas y su brazo dominante han sido heridos, Denes ya les dio muerte a otros tantos, pero siguen en pie otros más, espalda con espalda los hermanos se encaminan al ventanal quebrado, se toman de la mano y se avientan al vacío, en el techo los primos ya hicieron lo suyo, causando el mayor daño posible, el hijo de Ciro escucha el grito de su primo, lo busca con la mirada ve como lo están acribillando, se abre camino hasta llegar con él, se lo hecha al hombro sin tiempo de nada también se deja caer al vacio al caer al piso como bestia de dos patas se reune con su primo mayor y le entrega el cuerpo casi sin vida del menor, Calix da la orden y el edificio es asaltado por los asesinos de su tío Darío, en pocos segundos una los cuatro abordan una ambulancia, para ir directo a la casa de Boudica, para cuando llegan la casa ya estaba tomada por el ejército griego.  
Giles con su primo corre a al hospital improvisado en la parte alta de la casa, Calix en la sala celular en mano da una orden a sus hombres “aniquilar a todos las familias inglesas ya sean antiguas o no”  
_Querían ver sangre correr, la verán.  
Las estatuas que se encontraban en la casa de la exreina fueron hechas pedazos, el terreno era extenso, contaba con una pequeña arboleda en ella se había símbolos de la religión que ellos profesaban, símbolos que el mismo Calix redujo a cenizas. 
_” Señor” - Calix atento a las palabras- _ “Encontramos un orfanato, solo omegas y niños” 
_ No quiero a ni una omega viva, todo aquel mayor de tres años … a los bebés ya saben a dónde enviarlos.  _” Si señor” 
_Altavoz, quiero escuchar.  
_Calix, primo. 
_Por el tono de tu voz se lo que vas a decir. - Se duele, toma una bocanada de aire- _ Sabíamos que esto podía pasar, murió con honor y con honor será despedido, que lleven su cuerpo a Arcadia. 
_Yo mismo lo llevaré. 
_No, te necesito a mi lado, llama a Crystel, Talio debe seguir a lado de mis tíos. 
_ Si señor. ¿Por qué Talio debe seguir con ellos y no con nosotros?  
_Petición de tu padre – caminan entre los árboles- _ Talio es casi tan viejo como ellos, creo es menor que nuestro tío treinta y tres años, él tiene experiencia en esta clase de batallas. 
_Con más razón debería estar con nosotros, su experiencia, mi juventud, y nuestras fuerzas combinadas. 
Ambos ven la casa de la reina que data del siglo XV, Calix señala ciertas áreas, Giles asienta, entran a la casa directo en donde se encuentra el cuerpo de Denes, Elena sigue llorando la muerte de su hermano, eran los más chicos y los más apegados, Calix la consuela, ella limpia sus lágrimas y coloca dos monedas de oro en sus ojos. 
_El consuelo que me queda es que papá no lo vio morir. Espero se encuentre con mamá. 
_Seguro, él siempre fue pacifista, entrar en guerra le causo conflicto.  
Calcuta. India. 
Todos se han quedo en shock al ver en las noticias le explosión de la villa Licaón, uno de ellos se pone de pie se acerca a la pantalla, pasa sus dedos por ella como si pudiera tocar el desastre. 
_¿Ganamos?  
_¿Perdimos? 
_No perderemos hasta que nuestras cabezas sean desprendidas de nuestros cuellos. 
Atenas, Grecia. 
Ciro le da la lista de los clanes involucrados a Darío, el menor la lee y la analiza, nombra a cada uno de los clanes reconociendo al de la rusa que su esposa derroto y que él sometió, no reconoce tres de los diez nombres e incluso se le hace extraño. 
_ ¿De cuándo acá tenemos enemistad con los hindúes? Hasta donde sé nunca fuimos tan lejos. 
_No tengo idea, estoy haciendo memoria intentando dar con algún conocido. 
_ En lo que haces eso, partiré a esa parte de Rusia.  
_ Ve, por cierto, murió Denes, ya Calix lo va a enviar a casa.  
_¿Él? Pobre de mi niño. - Darío se limpia una lagrima- _ Menos mal que mi hermano no va a sufrir su perdida – se llama la mano al corazón- _ duele perder a tu pareja, pero créeme duele más un hijo.  
_ Debes irte. 
Darío hace una reverencia, silba, los automóviles ya están listos, él acompañado de unas cincuenta asesinas los abordan en una hora él y las chicas se encuentran volando al sur de Rusia.  
Ciro se queda en lo que ahora son las ruinas de su primer hogar en Arcadia justo donde su abuelo Licaón fue maldecido, camina entre ruinas y maleza hasta llegar al lugar donde se acordaba estaba el templo a Zeus, ya es de noche, esa noche fría, se colca de rodillas quedando justo enfrente de donde se encontraba el padre de los dioses y de la humanidad, reza en silencio, abre los ojos.  
_Padre de los dioses- guarda silencio- _ Ya cayó toda Inglaterra, espero mañana Bemus me informe que ha caído España, Rusia no es nuestra, pero fue arreglar un asunto, se va a alzar con la victoria. - una sombra que no pertenece a la noche da unos pasos hacía él- _ Denes ha muerto. - la sombra da la media vuelta para marcharse, Ciro comienza a hablar en voz alta dando los nombres de las manadas que atacaron la villa – _ La manada más antigua de Rusia se ha levantado, nosotros nunca nos metimos en guerra con ella, nuestros tratos eran comerciales, es una manada demasiado grande no vamos a poder contra ella – La sombra gira para desaparecer-   
Avión de Darío. 
Darío se coloca enfrente de las cincuenta mujeres, todas ellas ya de pie.  
_A la mayoría de ustedes yo las cambié porque así me lo pidieron ustedes, yo mismo las entrené, venimos a exterminar no a perdonar, habrá bajas, puede ser cualquiera incluso yo, Cassia, si caigo salva al resto. 
_Si señor. 
_Bien chicas, que no queda nadie con vida, cuando digo que nadie es nadie. Cassia, serás la última en saltar, y señoras, no quiero decepciones.  
El avión baja hasta cierta altura, apaga los motores, planea, las puertas se abren siendo Darío el primero en saltar, Cassia se cerciora que salten las cuarenta y nueve siendo ella la cincuenta, se deja caer mochila a la espalda, todas como lobo de cuatro patas siguen a su alfa, Cassia sigue como humana a las demás, al llegar a cierto punto se separan para iniciar el ataque, Darío cambia a hombre silba en diferentes tonos haciendo que entre el primer ataque. Cassia llega a su lado, cruzan un par de palabras, y el griego se pone en marcha, la griega se prepara para iniciar a disparar las cargas incendiarias.  
_No deje a ninguna con vida mi señor. - lanza la primera carga la ver la señal de Darío-