Más que Mil Palabras

El fanmeeting fue una locura, habían muchas personas presentes, momento en que las fans lanzaban palabras de coqueteo, cantaban sus nombres, o en el momento de tenerlos de frente les daban los regalos y pedían sus firmas, realmente era algo bonito, excepto en los momentos en que les tocaban con YoonGi, algunas tocaban sus manos o acariciaban su rostro, para TN era una oleada de furia y celos que llenaban su cuerpo, sabiendo que no podía hacer nada.

TN estaba sentada en los bancos al fondo del lugar, cerca del staff, su mirada estaba completamente enfocada en Suga, y de vez en cuando él también le mandaba miradas fugaces desde su puesto.

El salón del fanmeeting estaba iluminado con luces suaves, decorado con carteles, globos y una energía vibrante que solo los fans más dedicados sabían generar. Había una larga mesa blanca donde los siete miembros de BTS estaban sentados, firmando álbumes, sonriendo, escuchando atentamente a cada persona que pasaba frente a ellos.

TN estaba orgullosa de su hermano, claro. Pero en ese momento no podía concentrarse en NamJoon. Toda su atención iba inevitablemente hacia el tercer lugar desde la izquierda, donde Min YoonGi sonreía con ese gesto casi imperceptible que solo ella sabía descifrar.

Su mirada estaba tan perdida que no se dio cuenta cuando alguien se sentó al lado de ella, un hombre, alto, de cuerpo atlético y atractivo.

XX: Primera vez aquí? -Preguntó el chico con una voz suave y profunda-

TN lo miró, llevaba una camiseta con el logo de la banda, se veía joven, pero no más que ella, llevaba la camisa de color negro y unos pantalones deportivos, también tenia en su muñeca izquierda una pulsera, quizá de parte del staff o un fan de sección VIP

TN: Así es -Respondió la menor, con un tono amable pero distante-

XX: Te gusta BTS o vienes por alguien más? -Preguntó con curiosidad-

TN: Tengo... una conexión cercana con uno de ellos -Dijo cuidadosamente, sin dar detalles-

XX: Wow, suerte la tuya -Respondió el chico, inclinándose un poco hacia ella- Yo vine aquí por TaeHyung, pero no me molestaría cambiar de bando si tú estás interesada en hacerme un tour por Seúl.

TN se rió, más por incomodidad que por otra cosa. Giró el rostro para no parecer grosera, pero también para evitar seguir la conversación. Ni siquiera se dio cuenta que YoonGi la estaba observando y había notado aquella interacción. Desde su asiento en la mesa, entre firmas y saludos, Suga alzó la vista justo en el momento en que el chico inclinaba su cuerpo demasiado cerca de TN. Vio la sonrisa de ella, aunque no sabía que era por nervios, y la sangre le hirvió bajo la piel, y su lápiz negro con el que firmaba se dejó caer un momento en el álbum que estaba firmando.

NamJoon notó esto, aunque no dijo nada, solo dirigió su mirada hacia donde él había observando segundos antes y supo lo que lo había molestado, aunque lo poco que conocía a TN, sabía lo que realmente sucedía.

YoonGi tragó saliva. Se obligó a mirar al siguiente fan con una sonrisa tenue. Pero sus pensamientos estaban en otro lugar.

Con ella. Y con ese idiota.

HORAS DESPUÉS...

Cuando el fanmeeting terminó y el público comenzó a salir lentamente, TN se deslizó entre las cortinas del área VIP hacia una sala trasera. Sabía que no podían hablar mucho, pero no podía irse sin verlo.

YoonGi se quitaba los anillos de los dedos mientras caminaba con paso decidido, los labios apretados, el ceño fruncido. Cuando la vio, se detuvo.

TN: ¿Estás bien? —preguntó ella, notando su expresión.

SG: ¿De verdad me preguntas eso? -Respondió incrédulo-

TN lo miró, confundida. Pero entonces comprendió. Y suspiró.

TN: ¿Viste al chico?

SG: ¿Qué crees? Estaba justo frente a mí. ¿Lo disfrutaste?

TN: No seas ridículo, YoonGi. Solo me habló. Yo ni siquiera... -La interrumpió-

SG: Te reíste. Como si estuvieras cómoda con él.

TN: Me reí por incomodidad. ¿Qué querías que hiciera? ¿Decirle "¡Aléjate, estoy con Min YoonGi en secreto y nadie puede saberlo!"? -Dijo obvia-

SG: Lo siento -dijo finalmente, en voz más baja-. Sé que no fue nada. Es solo que... no puedo decir que eres mía. No puedo ni tocarte. Y cuando veo a alguien más cerca de ti... -desvió la mirada-

TN: ¿Te arde por dentro?

Él asintió. TN dio un paso hacia él. Lo tocó suavemente en el pecho, allí donde su corazón palpitaba, y donde el calor se le acumulaba, su toque fue suave, lento y lleno de cariño.

TN: A mí también me arde no poder abrazarte en público. Pero eso no cambia lo que somos.

YoonGi la miró, más tranquilo

SG: Solo prométeme que si otro se te acerca... te vas a acordar de esto.

Se inclinó hacia ella y, en una esquina escondida del camerino, tomó su rostro en sus manos y presionó sus labios contra los de la menor, cerrando sus ojos y dejando que la suavidad se transmitiera, apenas una caricia de labios, pero cargado de todo lo que no podían decir delante del mundo. Sus manos bajaron lentamente hasta descansar en su cintura, apretándola suavemente mientras la pegaba a su cuerpo, el beso fue breve, suave, no habían segundas intenciones en ese momento. Cuando se separaron, Suga juntó sus frentes sin soltar su cintura y con su mano libre acarició con su pulgar su mandíbula mientras la miraba con amor.

TN: No necesito prometerlo -susurró ella, con una sonrisa suave-. Nunca dejo de recordarlo.