No se hablaba de otra cosa en el pueblo. La gente que no se había marchado a pasar sus vacaciones en otra parte salía a las calles a comentar lo ocurrido.
Las mujeres susurraban en el templo y los hombres gritaban en los bares.
Encontraron a June Cook detrás de la fábrica de papel Colors. Su hallazgo ya habría resultado lo suficientemente desagradable sin el montón de curiosos que acudió aquella tarde.
La chica estaba destrozada.
Parecía que el asesino se había ensañado con ella. Y la mayoría comentaba que ojalá la chica hubiese estado muerta cuando… el asesino le había hecho eso.