La Maldición de la Princesa Vikinga.

"Cuenta la leyenda que hace 1.500 años, una princesa vikinga buscó a un hechicero para que le enseñara magia, quería poder dominar los lagos y los ríos por donde navegaban sus barcos conquistando otros reinos, el mago le concedió su deseo pero le hizo una advertencia, le dijo que jamás debía usar la magia con los mares y océanos que eran el reino de Poseidón, y que si se atrevía a usarla en los dominios del dios, éste la castigaría 

por toda la eternidad.

La princesa prometió no usar la magia indebidamente y cumplió durante muchos años, pero un día quiso extender aún más sus horizontes hcia las exóticas tierras del sur, para lo cual tenía que navegar los el Atlántico.

Pudo haberlo hecho sin magia como todo el mundo, pero no estaba dispuesta a perder la ventaja que le daba la magia, proporcionándole conquista tras conquista sin pérdidas materiales y, sin resistirse a la tentación, hechizó el océano y embarcó ella misma con toda su flota.

Cuando estaba en alta mar se le aparece Poseidón; el océano queda quieto y los peces y los barcos se detienen, entonces Poseidón dice:

"Se te dio un don que pocos mortales obtienen, pero solo usaste una parte de ese don y despreciaste la otra; la gracia que se te concedió con el poder de la magia, es la sabiduría para usarla y la compasión que perdiste, no fuiste capaz de ver que tu viaje era por la vida y la conquista era de tí misma".

Después Poseidón se tragó toda la flota dejándola a ella navegando a la deriva sin agua ni comida, pero tampoco tenía hambre ni sed.

Al cabo de muchos años llegó al sur y vio las hermosas costas de la tierra que había querido conquistar, pero su nave encalló en un banco de arena.

Entonces Poseidón se le apareció de nuevo y le dijo: 

"Tus poderes han sido restringidos a un lago que está escondido en la floresta, fue creado para que habites en él, y solo en él tendrás potestad; has arruinado tu viaje por la vida y no podrás reencarnar para completarlo; envejecerás más lentamente y morirás cuando el ciclo de vidas que debiste vivir llegue a su fin".

Luego Poseidón la hizo navegar desencallando el barco que subió por un río hasta llegar a un claro dentro de un bosque, cuando el barco estuvo en el medio comenzó a entrar el agua del río y anegó la tierra, los árboles se movieron formando una pared y sólo quedó una entrada donde el río se volcaba formando el lago.

La princesa pensaba que Poseidón no podía hacer eso porque la tierra no era su dominio, pero después recordó cuánta tierra había conquistado y comprendió que el dios estaba en su derecho".

"Ni lo pienses, no! -dice Enzo asustado- éste es un dios y está furioso con la princesa".

"No voy a meterme con esos poderes -dice Lara- Poseidón.....( y hace un gesto de incredulidad) no castigó a esas personas que desaparecieron sino a la princesa, claro que no voy a meterme al lago, pero sí puedo ir hasta la desembocadura y filmar el interior, voy a tratar de ver dentro del muro de árboles, alguna vez intentaron espiar a través de ellos?"

"Intentaron de todo -dice el Profe- fueron con lanchas, botes, un mini-submarino, helicópteros; se ataron con cuerdas gruesas y cadenas pero nada sirve: una vez que tocan el agua más allá del límite están perdidos y nadie puede impedir que regresen allá.

Lo último que hicieron ya hace tiempo fue cerrar el río con una red de acero que no deja pasar nada por debajo del agua, hay guardias cuidando la desembocadura por si un turista se mete sin saber".

"Cómo nos llegó este caso? -pregunta Lara- no parece de los nuestros".

"LO de la princesa vikinga no -dice el Profe- pero los 80 pobladores perdido sí, nos contrataron sus familias por medio del Intendente, él dijo que hagamos lo que podamos, porque si bien algunos ya deben haber muerto de viejos, tampoco sus fantasmas pueden salir de allí".

"Sí -dice Lara- sé que quieren que rescatemos a sus parientes sin meternos con.....Don Posi, pero si ellos están atrapados allí es porque la princesa los detiene con su magia, y si.....Don Posi le dio esa potestad.....no nos estaremos metiendo con él?"

"Oh por Dios! -dice Fede- cómo-no-lo-deduje!"

"Es un enredo.." -dice el Profe.

"Bueno -dice Lara- vayamos con cuidado, hagamos la filmación desde la reja y según lo que salga decidiremos".

Esta vez llevaron una cámara extra y una larga escalera para subirse hasta las copas de los árboles, ya que los troncos habían crecido tanto que estaban soldados en una maraña de cortezas superpuestas, solo en lo más alto encontraron un resquicio por donde  meter el cable conectado a la laptop del Profe, en un furgoncito al final del camino de tierra; Fede sostenía la escalera sobre la que Lara estaba con la cámara, ella separa unas ramas y ve un lago de aguas tan transparentes que aún desde donde está puede ver el fondo con toda la vida que se desarrolla en él; hay infinidad de canoas, botes y veleros navegando sin rumbo con sus ocupantes demacrados, cadavéricos, inmóviles y algunos solo huesos.

Lara siente que se marea y baja, Fede la lleva al furgón y la sienta.

"Dios mío -dice- les está haciendo lo mismo, hasta los esqueletos tienen vivos los ojos; no los deja morir".

"Es como si quisiera recuperar su flota.." -dice Fede.