Capítulo 3: El reencuentro

Al día siguiente después del incidente del reportero

Han pasado cinco años, aproximadamente, desde que los estudiantes se graduaron de bachillerato y cada quién sigue su camino, aunque hay uno que por el momento no ha tenido la mejor de las suertes y solo ha tenido malas noticias desde su salida.

Dylan se encuentra viviendo en una casa con su tío Aarón, debido que es el único familiar que le queda vivo, ya que sus padres fallecieron en un accidente de auto hace tres años, donde Dylan fue el único que sobrevivió, aunque resulto muy herido .

Cuando Dylan supo que su tío no había llegado a la hora que le mencionó y no se había comunicado con él, sabía que el último lugar al que fue era a la mansión, así que se puso a planear qué podía hacer para investigar el lugar sin ir solo.

Después de unos minutos, se le ocurrió realizar un reencuentro con sus compañeros de la escuela para procurar que el lugar no estuviera solo y él pudiera buscar a su tío en la mansión, así que empezó a avisar a todos sus compañeros para que se reunieran en la mansión en el periodo vacacional para asegurar que fueran más personas.

El presente, trece personas respondieron a la invitación de Dylan.

--- Ha llegado el día queme pondré a investigar la mansión, quizás si hay muchas personas ahí, la mujer de la leyenda no aparezca, espero que todo salga bien y sea rápido. Dijo Dylan.

Los excompañeros empezaron a llegar a la mansión.

Primero llego Alfred, un empresario inteligente, después llegaron Amy y Mya, unas gemelas que siempre han sido distraídas, después llego Harold, una persona problemática, después llego Patrick, un vendedor de drogas el cual solo aceptó para venderle a sus compañeros y después llego Jack, Rick y Zack, tres primos que se dedican a trabajar en el negocio de su familia, poco tiempo después llego Javier junto con Max, Alan y Cody.

Al llegar a la mansión, Javier reconoció el lugar de las visiones que había tenido hace cinco años, aunque no mencionó nada para no empezar a incomodar a los demás y que lo trataran de loco.

Poco tiempo después llegó Helena junto con su novio Martin, reuniéndose con sus viejos amigos de la escuela y presentándoles a Martin a los demás.

Después que llegaron todos, Dylan los invitó a entrar diciéndoles que los había invitado a la mansión para pasar un fin de semana inolvidable, donde podrían divertirse y hacer todo el ruido que quisieran, ya que el lugar estaba por lo menos a una hora del pueblo más cercano, ocultándoles el verdadero propósito que tenía.

Amy, Mya, Patrick, Harold, Jack y Zack empezaron a festejar en la sala principal de la mansión poniendo música a todo volumen y celebrando por haberse reunido después de mucho tiempo, mientras que Javier, Max, Cody, Alan y Alfred decidieron observar el lugar para ver si encontraban algo interesante en él.

Por otro lado, Helena y Martin se encontraban afuera de la mansión, caminando por el bosque mientras ella le platicaba sobre su vida en la escuela y cómo había conocido a sus amigos.

Rick quería visitar el ático en el tercer piso de la mansión, aunque antes de subir hizo una parada en el baño, pero para su suerte sus primos, habían subido a dejarlo encerrado mientras ellos bajaban y seguían festejando junto con las gemelas.

--- Chicos, ¿siguen ahí?, déjenme salir, saben que no me gusta estar en lugares cerrados. Dijo Rick.

Mientras los demás se la pasaban juntos, Dylan aprovecho para investigar la mansión empezando por el sótano, buscando alguna pista que le ayudara a saber si su tío había estado ahí o no.

Sin encontrar nada en especial, lo único que pudo encontrar fue una fotografía en la que aparecía la mujer al lado de un hombre muy similar a su tío en casi toda la apariencia, al voltear la foto vio que tenía una frase escrita con sangre.

Cuando los perros ladran, la mujer despierta.

Dylan, sin entender que significaba esa frase solo guardó la foto como evidencia para poder buscar información después sobre la mujer que había en ella, después de salir del sótano se dirigió a la segunda planta de la mansión para seguir buscando alguna información que pudiera servirle.

Falta una hora para la media noche.

Mientras tanto, Alfred les propuso a Javier, Max, Cody y Alan una competencia para ver quién encontraba el objeto con mayor antigüedad o valor en las habitaciones de la mansión (con la intención de ganar algo de dinero si lograban encontrar algo valioso), entonces, los cuatro se empezaron a separar mientras Alfred los esperaba tranquilamente en el cuarto de juegos que tenía la mansión.

Mientras Javier se dirigía a una habitación para encontrar algo de valor, se encontró con Dylan husmeando en los cajones.

--- ¿Qué haces Dylan? Preguntó Javier.

--- Nada, solo investigo el lugar para ver si hay algo interesante. Dijo Dylan nervioso.

--- Estás mintiendo, no te he visto con nadie en toda la noche y tú fuiste el que nos invitó a venir aquí para volvernos a juntar por el fin de semana. Dijo Javier.

--- La verdad es que no los invité a venir aquí por que quisiera verlos realmente. Dijo Dylan.

--- ¿Recuerdas a mi tío Aarón, del que les conté hace cinco años? Preguntó Dylan.

--- Sí, nos dijiste que se dedicaba a desmentir leyendas y escuché que había desaparecido, ¿qué tiene que ver él con esta mansión? Preguntó Javier.

--- Esta mansión tiene una leyenda y mi tío me dijo que vendría aquí a demostrar que era una mentira y que solo la habían inventado para que el pueblo cercano ganara fama. Dijo Dylan.

--- Cuéntame sobre la leyenda de esta mansión. Dijo Javier.

--- Las personas dicen que en este lugar vivía una pareja y que la mujer al enterarse de que su marido la engañaba, envenenó todo el lugar con gas tóxico, prometiéndole a su marido que ahora estarían juntos para toda la eternidad, no sin antes lanzar una maldición sobre la mansión para que su marido no pudiera morir del todo y estuviera con ella toda la eternidad. Dijo Dylan.