Surge el lado oscuro.

Uricel en un abrir y cerrar de ojos tenía todo el dinero que jamás había soñado, recordaba lo que sucedió como una alucinación o un sueño, y prefería pensarlo así, la serpiente tatuada en la palma de su mano izquierda, le perecía extraña, no recordaba porque apareció allí, pero prefería no pensar en ello, por qué salía dinero de su bolsillo con solo meter su mano en él?, magia quizás pensaba…suerte…en fin no le importaba mucho, solo él sabia y por supuesto seria su secreto más preciado, se sentía poderoso, y lo único que quería era impresionar a Zarah, pues su amor por seguía intacto en su mente y su corazón.

Llego entonces muy bien vestido y en una elegante camioneta, se bajó, mientras se acercaba inmediatamente el vigilante y le pregunto que deseaba, Uricel respondió: - Busco a Zara ella trabaja aquí,       -Ella no se encuentra ahora, aquí no hay nadie, le dice el vigilante, decidieron hacer el evento en otro lugar, no le avisaron?, -No,le responde Uricel intrigado, mientras el vigilante le sigue haciendo preguntas- Es usted algún familiar? Esta invitado a la celebración?; - Soy amigo, y de que celebración me está hablando?, -El compromiso de Don Felipe y Doña Zarah, siendo usted amigo, está seguro de que ella no le invito?, por supuesto Uricel no respondió esa pregunta, se subió a su camioneta y arrancó, rodeo la finca y vio por donde podía entrar, se metió por los cultivos y llego a la casa, sin queue nadie lo notara, entro al cuarto de Zara forzando la puerta y estuvo allí observando sus cosas, vió una foto de ella y la guardó, pensó en ir a buscarla en dicha fiesta, tenía oscuros pensamientos e intenciones, pero no quería exponerse y hacer una locura que luego le costaría caro, lloró, se lamentó por no haber llegado antes, pues estaba seguro que si Zarah veía al nuevo hombre que era, le amaría…pero aun había tiempo, fue a buscar una rosa en el cultivo, para dejarla en su alcoba como una señal…pero al tocar dicha rosa se marchito de inmediato, toco otra y le sucedió lo mismo…que ocurre pensó? Seguía intentando cortar una pero se marchitaba…era este un cultivo muy hermoso…observando pensaba el más bello que había visto....Don Felipe tenia los cultivos de flores más bellos de la región, era reconocido por el éxito que tenía como floricultor, y todo lo que tenía lo había conseguido trabajando en ello. En la mente de Uricel solo había odio hacia él, le robó a su amor, y quería matarlo, por ahora no podía, o no se atrevía, pero podría quizás empezar por arruinarlo, pensó, se fue entonces por todo el cultivo tocando las rosas y se iban marchitando inmediatamente, se tomó su tiempo, pues sabía que estando ocupados en su celebración nadie lo encontraría, y el vigilante ni sospechaba que él estaba allí,  tenía todo la noche para que no quedara viva ni una flor, se paseaba mientras iba rosando los surcos de flores con sus manos y veía como morían a su paso, se sentía poderoso, algo le impulsaba, una fuerza incontenible, que pronto él no podría dominar.

Mientras tanto, sin sospecha alguna Zara y Don Felipe celebraban felices su compromiso. No había sido fácil para él conquistarla, y convencerla de que le aceptara, pero lo logro, después de que Uricel desapareció pasaron casi 8 meses, y Don Felipe se dedicó a enamorarla, y lo logró, pues en el fondo Zara le amaba sólo que sus miedos y prejuicios no la dejaban hacerlo con libertad, ella pensaba en Uricel, no supo más de él, le había tomado cariño y le preocupaba que sería de su vida…pero sabía que a él nunca lo iba a poder amar, y que mejor era que estuviese lejos de ellos, pues si estaba cerca haría más difíciles las cosas. En fin su presente y Futuro ahora estaban al lado del hombre que había ganado su corazón, y se sentía muy feliz de que esto le estuviera sucediendo, y ni hablar de Don Felipe, se estaba dando la oportunidad de amar nuevamente, sin importarle los señalamientos y sin sentirse culpable, merecía ser feliz y había encontrado a la mujer con quien serlo, quien se convirtió en una segunda madre para sus hijas y en todo para él.

Al  despertar la mañana siguiente escucharon el alboroto de los trabajadores, el administrador llamó a Don Felipe y le conto lo ocurrido: - Venga para verlo usted mismo, le dijo; y así fue tuvo que ver el mismo su campo de flores totalmente destruido, ninguna flor viva, nunca antes había sucedido algo así, una pérdida total de su cultivo, sin ninguna razón que el pudiera encontrar coherente. Llamo entonces a un laboratorio para que se investigara si había rastro de algún químico, algún veneno que le hubiesen roseado por equivocación o quizás alguien premeditadamente; pero no encontraron nada, ni en las flores y en el suelo, no había explicación alguna para que hubiese sucedido algo así, los cultivos eran tecnificados, el personal capacitado y aunque siempre había un margen de perdida, solo ocurría en un pequeño porcentaje, jamás la pérdida   total.

Por supuesto esto significaba para Don Felipe, la posibilidad de una quiebra, puesto que todas sus inversiones estaban puestas allí. Esto fue un golpe muy duro para él, pero Zara fue su apoyo, no le permitió derrumbarse, tuvo que despedir empleados, vender algunas cosas y pedir préstamos en los Bancos, para reunir de nuevo el dinero para volver a cultivar. Aunque Don Felipe pensó que Zara ya no querría continuar con los planes de boda, puesto que el ya no poseía el mismo nivel económico que antes, zara le demostró que estaría con él en las buenas y en las malas y que su amor por él era genuino, así que estaban planeando realizar una sencilla boda donde estuvieran los más allegados, estaban felices y llenos de ilusiones porque habían logrado superar juntos este bache que lo que logro fue unirlos más.

Mientras tanto Uricel seguía acumulando riquezas y se iba convirtiendo en el respetado Señor Beltrán, invertía en importantes empresas y se iba posicionando como un gran empresario, aunque pocos sabían de donde había salido, su dinero hablaba por él, se volvía cada vez más excéntrico y se daba lujos por doquier. Pero por supuesto nada de esto le satisfacía por completo, pues su objetivo era conseguir el amor de Zara; contrato entonces a un hombre a quien le pagaría muy bien por ir allí y hacerse pasar por un trabajador, cuyo propósito era que le mantuviera informado de lo que acontecía allí, así que pronto se enteró que los planes de boda seguían en pie y esto lo enfurecía, tenía ganas de quitar del camino a este hombre a toda costa.