¿Qué es este lugar? Se preguntó la joven, estaba acostumbrada a tener sueños extraños, después de todo no era la primera vez que le ocurría. Pero estaba soñando con su crush de ese momento, que necesidad de interrumpir el maravilloso sueño por ir a aquel lugar.
-Hola- gritó - ¿hay alguien por aquí?- genial pensó, ahora como salgo de este lugar.
Miró a su alrededor para ver si reconocía algo, de todos los lugares fantásticos que visitaba en su sueño este parecía el más fascinante de todos.
“LA FUENTE” escuchó una voz en su mente. En el medio del paisaje se encontraba un manantial con el agua más pura que algunas ves pudo apreciar.
- Creo que aquí no llegó la contaminación ambiental- bromeó la joven, solo que estaba sola así que nadie pudo escuchar su broma sarcástica, humor que la caracterizaba.
Alrededor de aquel espejo de agua se levantaban majestuosamente barias columnas, por la imagen de esas estructuras todo parecía indicar que eran muy antiguas. Cada una de ellas formaba como un marco que simulaba ser puertas, a la nada misma ya que solamente se extendía el paisaje en general.
Lo que llamo la atención de la joven más allá de que en ese lugar no se encontraba nadie, era que el ambiente se apreciaba distinto a través de cada puerta, -¿serán portales?- dijo , es la única explicación de que el cielo era más azul en un lugar, tonos sepias como en una fotografía vieja en otro.
Un movimiento llamo su atención se acercó a una de estas columnas, mirando con total asombro y un dejo de terror,
-Son ovejas, que se están comiendo a un lobo.- ¿Desde cuándo esto ocurría? ¿ No debía ser al revés? Los animales levantaron el rostro, sus bocas estaban llenas de sangre.
- Lindas ovejitas- decía la joven mientas retrocedía. Sin pensarlo mucho salió corriendo.- No quiero morir así, es muy tonto ser comida de ovejas. Ya verán cuando vuelva a la tierra yo comeré a sus hermanas en un delicioso asado. Me las pagaran.- corría y gritaba la joven.
Mirando hacia atrás para ver si los ovinos la seguían. Sin darse cuenta cruzó una de las puertas.
Caminaba sin rumbo alguno. - Al fin una cuidad debo buscar alguna persona que me ayude a salir de aquí-, era los pensamientos que cruzaban por su cabeza.
-Hola- saludo gesticulando mucho- ¿sabes hablar mi idioma?
- No eres de por aquí- respondió el hombre. Gracias dios porque me entiende y habla mi idioma decía mentalmente la joven.
- ¿Me puede llevar con su líder o alguna persona que esté a cargo? Es que necesito ayuda.
- Por supuesto- respondió el hombre, seguía caminando por el lugar que le mostraba aquel sujeto, era lo único que podía hacer.
Cuando se dio cuenta se encontraba sola nuevamente. ¿Dónde se habría metido la persona?
- Buenas- saludo, un niño de aproximadamente dos años; el bebé mas adorable del mundo, era pequeño con las mejillas regordetas y sonrojadas.
- Hola, pero que bebé más tierno eres, ¿también te perdiste?- decía la joven mirando alrededor para ver si encontraba a los padres de aquel infante.
- No,- dijo el niño.- Soy Isak, el líder de este lugar.- terminando de decir eso se escuchó una estruendosa carcajada.
- -Perdón, es que te ves muy pequeño para ser un líder- dijo la joven mientras se calmaba poco a poco de aquel ataque de risa.
- Bienvenida a “HAIRODAN”, es una dimensión en el cual el mandato está a cargo de los niños, después de todos somos más sabios, ya que seguimos cerca de la fuente, cuando vamos creciendo, perdemos facultades, nos convertimos en seres escépticos, pero no podemos culparlos después de todo son adultos.
Cada palabra que decía el niño era más confuso, una dimensión liderada por niños, bueno al menos en esta unas ovejas no tratan de comerme, pensaba la joven.
- Sígueme te acompaño a la salida-. Y así lo hizo caminaran por un sendero, - hasta aquí puedo acompañarte, mas allá deberás seguir sola.
- -Muchas gracias Isak, te ofenderías si te alzo en brazos al menos una vez antes de irme, es que eres el bebé más hermoso y adorablemente sabio que jamás vi.-
Sin decir ni una palabra más el niño levantó los brazos, señal de que no le molestaba.
-Adiós- se despidió la joven- hasta luego- respondió el niño una vez nuevamente con los pies en el piso.
La joven siguió por el camino que le indico Isak.
¿Dónde estabas?- era “su señorcito”- ¿Dónde estabas tú?- respondió ella- Se supone que eres mi guía o algo por el estilo estaba perdida y no apareciste para ayudarme, ME CORRIERON OVEJAS PARA COMERME- Gritó.
- Pero donde te fuiste a meter. – No se -le dijo la joven, luego comenzó a describir el lugar.
- -Imposible- dijo “su señorcito- a ese lugar nadie puede entrar.
- Pues yo sí que pude.
- -¿cómo lo hiciste?- dijo con sincera curiosidad.
- No lo sé, parpadee y aparecí allí.
- Está bien hablaremos de eso otro día, es hora de despertar después de todo ibas a dormir la siesta un poco para después seguir estudiando para tu examen- hablaba el hombre mientras la acompañaba.
- Aguafiestas- murmuro ella.- Nos vemos en la próxima.
Nuevamente despertó.