Capítulo 2

Miro todo a mi alrededor, parece que todo está bien, no me ha pasado nada, sin embargo, este lugar está totalmente desolado ¿Qué paso? Se supone un auto me arrollo o eso, recuerdo no siento frío ni calor, de hecho, no siento nada, sin embargo, estoy en el mismo sitio donde casi fui arrollada, tal vez el auto se desvió de pronto escucho como una voz me llama, pero es lejana no reconozco de quien es sigo algo desorientaba, pero de un momento a otro veo a la señora que ayer murió arrollada por un auto, pero un momento ella murió eso significa que yo…. de un momento a otro siento como si una fuerte corriente de aire me arrastrara y luego solo oscuridad y sueño……

El insistente sonido de una máquina me despierta me encuentro desorientada y no tardo en ver donde me encuentro en la camilla de un hospital y por su aspecto es terapia intensiva que carajos hago aquí luego recuerdo que fui impactada por un idiota al volante, pero más raro aún es recordar el sueño que tuve ese en el que veía a esa señora muerta que habrá significado eso, la cabeza me dolía a millón, justo en ese momento la puerta de la habitación se abrió dejando ver a una enfermera ya mayor la misma que se acerca a revisarme.

—ha despertado, señorita, dígame, ¿cómo se siente, recuerda porque está aquí? –no preste mucha atención a sus palabras, más me preocupaba la sombre que detrás de ella estaba. —se siente bien señorita, será mejor que llame al médico.

Sin más ella Salió y junto a ella esa sombra que carajos fue eso creo que las medicinas y el golpe afectaron mi pobre cabeza gentes con sombras claro ni que esto fuera la una película de terror carajo debo dejar de ver esas cosas definitivamente. —vaya así que es verdad la señorita ha despertado, pensamos que nunca lo harías. –como que esperaban que no lo hiciera.

—a.… a que s…. Se refiere. –diablos no podía hablar bien, me pesaba la lengua.

—veo que al menos si puedes hablar normal, si sientes la lengua pesada es producto del sedante, recuerdas fue lo último que paso. –yo solo asentí con la cabeza como pude. —bien déjame decirte que estuviste legalmente muerta, pero parece que te aferraste a la vida y aquí estas llevas exactamente un mes en coma, por lo cual es bueno verte despierta otra vez.

¿Qué diablos había dicho? Muerta, estuve muerta, entonces no fue un sueño lo que tuve antes de despertar, pero ¿cómo es eso posible? Esto tenía que ser una broma, pero si nada más hace unos mementos estuve en la universidad por Dios, mis clases, mis exámenes, mis tareas, no puede ser, perderé mi beca, no me puede estar pasando esto a mí, empecé a negar de manera errática, mi cabeza intente ponerme de pie, pero el médico me lo impidió si será imbécil era lindo pero idiota.

—no puedes levantarte, estar aún delicada, el choque que tuviste fue fuerte, debes calmarte.  –la máquina que indicaba mis latidos empezó a sonar muy fuerte, en eso recordé que si acabo de salir de coma debo relajarme según todo lo que había leído de estos temas es mejor mantener la calma, decidí obedecer al bueno del doctor y quedarme tranquila, sin embargo, quería ver a mis padres deberían estar destrozados y aterrados era lo único que les quedaba después de lo de mi hermana no sé si la adrenalina o qué, pero ya no sentía la boca tan pesada.

—mi…. Mis padres quiero ver a mis padres.

—en un momento más los haremos pasar, están afuera y ya saben que has reaccionado igual que tres chicas más que tampoco se han desprendido de aquí.

Mis bellas amigas preocupadas por mí, pobres el susto que debieron llevarse sobre todo Lau ella que nos cuida como una mamá están linda solo espero que el imbécil que se me fue encima este pagando su condena tarado estúpido por su culpa estoy en estas, en ese momento la enfermera volvió a entrar, pero ya no traía ninguna nombre eso significaba que todo fue producto de mi imaginación hace un momento menos mal me había asustado, en el momento en que gire mi rostro para mirar con detenimiento el lugar volví a ver la sombre estaba junto a la puerta, pero que significaba esto si bien es cierto nunca he sido una persona normal, pues hace muchos años mucho antes de la muerte de mi hermana podía ver cosas, cosas que ante los ojos de los demás eran y serian imposible de creer, sin embargo, hay estaban los funerales los odiaba podía ver al muerto admirando su funeral unos normales otros con cadenas y algunos simplemente no los veía, pero era algo que había desaparecido con el tiempo o simplemente yo lo ignore, pero ahora porque regresaba que era esa sombra que quería de mí y porque ni se iba.

—parece que estás bien, así que te trasladaremos a una habitación para que tú familiares y amigos te puedan ver. –solo asentí estaba aterrada con esa sombra aquí.

El lindo del médico salió dejándome con las enfermeras y con esa espantosa sombra, esto no está bien, algo me había pasado en ese accidente, eso era seguro, despertó cosas en mí que pensé estaban dormidas o simplemente desaparecidas, ingresaron unos enfermeros uno de ellos también llevaba una sombra, pero que carajos era esto porque otra de esas cosas, estaba empezándome alterar agradecía que me hubiera ya desconectada de esa máquina o me dejarían encerrada aquí decidí cerrar mis ojos y contar hasta 10 en eso uno de los enfermeros se me acerco y me saco de mi cuenta.

—bien te vamos a llevar a tu nueva habitación para que está cómoda dependiendo de cómo evoluciones podrás irte a más tardar esta semana.

—eso es un alivio, gracias. –lo primero que haría es ir al psicólogo, no quiero ver cosas locas.

Salimos de la sala de cuidados intensivos por una puerta trasera que daba a unos ascensores yo iba en la camilla muy cómoda, pues me había traído solo la enfermera y enfermero que no tenían sombras macabras al llegar al piso en donde estaba la habitación que se me asigno pude ver como una niña pequeña corría detrás de otros dos por Dios como es que dejan a esos niños jugar aquí pueden ocasionar un accidente, pero en fin allá los padres seguimos hasta estar en mi cuarto en el cual ya estaban mis padres llorando cuando me vieron estaban tan impacientes por acercarse, pero no lo hicieron hasta que me acomodaran bien una vez lista salieron los enfermeros y me quede con mis padres quienes me llenaron de besitos y no dejaban de dar gracias a Dios porque estaba bien, me sorprendió ver en el brazo izquierdo de mi mamá unos números que diablos cuando se hizo ese tatuaje luego preguntaría por ahora solo quería que me mimaran y consintieran.