La Mensajera de la Muerte

Capítulo 20

Ver a mi pequeña inconsciente aquí junto a mí me deja claro que no debí escuchar advertencias estúpidas del fantasma, espectro o que sé yo de mi madre, sin embargo, lo hice y en vez de actuar como el ser racional que soy hice todo lo contrario me comporte como un patán hijo de puta que solo piensa en él y en nadie más la verdad es que si pensé en mí no es que sea tan ignorante sobre los mensajeros de la muerte aunque eso más bien es maldición, sin embargo, no creo que todas o todos deban estar solos si el ángel o lo que sea que anda detrás de mi niña cree que me va a asustar se equivocó yo no pienso dejarla sola en esto aunque sé que ella ya no me quiere a su lado y merecido me lo tengo por idiota.

—Helmut crees poder ayudarnos con los trámites de los padres de Madison, llame a Jack, pero no puedo localizarlo creo que salió de viaje. –oh está follando con Isa. 

—claro que si yo me encargo de todo ustedes ocúpense de mi niña no la dejen sola.

—bien gracias.

Salí de la clínica para realizar los trámites pertinentes y organizar todo para el funeral de mis suegros definitivamente esto parece irreal es que de la manera en que sucedido el accidente es para que ellos estén malheridos no muertos, pero la verdad es que lo están, llame a mis amigos para pedir su ayuda necesitaba que ellos estuvieran presentes la verdad es que no sé cómo manejar esto, puesto que Madison está devastada y ahora cualquier cosa puede empeorar todo después de todo se ha quedado sola no tiene a nadie ni un tío o algo la verdad es que bastante extraño que ella no cuente con más familiares, pero de que me sorprende si mi caso es el mismo.

Me llevé toda la tarde alistando todo para que cuando mi pequeña saliera encontrara todo en orden incluso empaque unas cuantas prendas de ella en una maleta pequeña por si desea irse a casa de alguna de sus amigas me encantaría fuera a la mía, pero sé que rechazara la oferta y es lógico yo metí la pata hasta el fondo y sin frenos definitivamente soy el tipo más imbécil del planeta tierra.

—bien ya todo está listo esperamos a que llegue tu niña con las demás aunque tengo una duda ¿ya terminaron su pelea absurda? La cual no sabemos ni porque fue.

—por ahora estamos en tregua y los motivos no son de su incumbencia así que no sean metidos.

—bien perdón no preguntaré más, por otro lado, debes saber que tu ex ha ido otra vez al hospital, aunque anda extraña pareciera que es un zombi esa mujer de verdad está loca yo de ti me alejo de ella.

—ella jamás ha sido cuerda, pero parecer zombi tampoco Emiliano.  

—pues no sé qué te traigas con ella, pero si deseas dejar a Madi bebe por esa cosa desde ya te digo olvídate de mi amistad porque esa mujer está loca mira que llegar y golpear a tu secretaria amenazándola y luego ponerse a reír es estar loca para después salir como si de un robot se tratara.

—definitivamente, está loca y no he dejado a Madison por mi ex yo amo a Madi, pero por el momento hay cosas que debemos aclarar y no creo que sea el momento de hacerlo, pues ahora está solo o eso cree ella.

—en eso te doy la razón ahora esperemos que ellas lleguen. –justo en ese momento la puerta se abrió dejándome ver a mi pequeña que al verme salió corriendo a mis brazos acto que no espere, pero es obvio que al sentirse abrumada buscara refugio en quienes confiaba y me alegraba saber que confiaba en mí.

—ya pequeña calma sé que duele, pero tienes que ser fuerte como ellos siempre te vieron fuerte, valiente y decidida.

—no puedo Helmut ¿Qué voy a hacer ahora? Me dejaron sola yo no tenía a nadie más que a ellos.

Yo no sabía que más decir a pesar de que sabía lo que era perder a un ser querido no era fácil consolarla, la vi acercarse a los féretros de sus padres para llorar esto no era justo para ella porque que quitarles a sus padres ella solo ayuda a las personas ella solo maldita sea esto no lo pidió como carajos es que alguien tan dulce como ella terminó en esto.

—porque desde su nacimiento fue escogida para esto ella se lo negó desde niña, pero ahora que se la necesita no tiene idea de que hacer.

—diablos Lucia no me asustes de esa manera estamos en funeral yo no soy valiente como mi mujer.

—tu mujer o exmujer y hablando de ella necesito que la lleves contigo mientras este contigo no la encontraran necesita calmarse y recuperarse de este golpe.

—y porque conmigo no pueden encontrarla. –lucia señalo mi mano y entendí que se refería a mi pulsera.

¿—mi pulsera?

—si fue creada para ocultarte tu madre uso parte de su vida para su creación es una pulsera muy valiosa sin tu madre huyo dejo la misión antes de terminarla porque sabía que tú existías te oculto, pero cuando creciste le fue imposible la encontraron y por eso creo ese regalo para y luego murió.

—¿Cómo sabes eso?

Saco el diario de mi madre uno que por años intente descifrar, ya que estaba escrito como códigos indescifrables. —tu mamá practicaba cosas que yo entiendo y escribió todo en un lenguaje antiguo.

—bien luego me cuentas que dice ese diario por ahora hay que llevar a Madi a descansar.

Deje a la amiga de Madison en la entrada y me dirigí a mi pequeña por órdenes de Laura se decidió que todo fuera rápido las cosas habían cambiado y por las palabras de Lucia sabía que no era seguro dejar a mi niña sola solo pedía que ella aceptara irse conmigo…

*Madison*

Sabía que las cosas serían rápidas porque era lo mejor, sin embargo, no me sentía cómoda que fueran así, pero las acepte, así como acepte venir con el buen doctor a su departamento la verdad es que me daba igual donde estuviera si ellos ya nada tenía sentido mis padres eran mi mundo mi fortaleza y la razón por la que luchaba día a día y ahora mi fortaleza mi horizonte y rumbo no estaba la muerte me los quiero y no pude salvarlos.

—MALDITA SEA! –gritar era lo único que me calmaba y aproveche que Helmut fue por algo de comer para hacerlo solo quería morir, pero eso sería dejar que él ganara y ese maldito ángel no ganaría la muerte de mis padres no sería en vano no lo permitiría.




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