La Mensajera de la Muerte

Capítulo 30

*Madison*

Una vez estuve lista me tome unos momentos para caminar y de esa manera poder pensar con claridad que decisión tomaría si llegaba a comprobar que el idiota de mi secuestrador tuviera la razón no puedo cambiar lo que siento no lo amo a el y si alguna vez lo ame debió ser mi vida pasada porque esta en esta vida mi corazón le pertenece a mi buen doctor que seguro debe estar desesperado por saber de mí.

—bien Madison López eres una guerrera y como tal vas actuar tomaras el toro por los cuernos y hablaras con ese loco y si lo que el dice es verdad simplemente lo tomaras como una historia de tu vida que paso, pero tu presente y futuro no cambiara -aunque puede servirme para salir de aquí fingir un poquitico pensé para mis adentros esos que no pueden ser escuchados por nadie.

Sali de la habitación y me baje las escaleras con sumo cuidado definitivamente este lugar es inmenso no lo note antes y es obvio solo he querido escapar recién me estoy dando el tiempo a recorrerlo, pero, en fin, al llegar al área del comedor pude notar que había un enorme pero enorme banquete servido en la mesa. <<parece que alguien te quiere engordar para mi que nos quiere comer>> por primera vez después de muchos años mi conciencia aparecía se supone no existía y ahora de la nada sale linda la niña la ignore y me adentre hasta a la habitación <<por eso me fui porque jamás me prestas atención>> por ahora espúmate déjame trabajar sola.

—mi hermosa princesa has llegado, pero ven no te quedes parada en ese lugar ven conmigo toma asiento y disfruta de este banquete que envié a preparar para ti como todo lo que desees. -este tipo estaba loco ni me conocía y decía amarme si por lo menos supiera algo de mi sabría que toda esta comida solo me quita mas el apetito.

—gracias, pero creo que has exagerado sin embargo mas que la comida deseo conocer la verdad esa de la que tanto hablas.

Lo vi sonreír y negar indicándome que primero comiéramos para luego mostrarme lo que quería saber no puse más objeción y comí a duras penas unas frutas picadas no me entraba mas comida así que en vista de que no quería comer mas el se puso de pie y tomo mi mano para que yo hiciera lo mismo de esa manera salimos juntos hasta una habitación de lo más extraña pero más bien parecía un planetario pero este era muy real me daba la impresión que estábamos en el espacio y todo que emoción.

—¿Qué es este lugar? Parece un planetario.

—justamente es un planetario, pero real solo mantente a mi lado y nada malo pasara -claro lo dice quien me secuestro lindo el imbécil. —bien mi amor ven es hora de que conozcas la verdad.

Y como si magia se tratare aparecieron unas imágenes frente a nosotros unas de la época medieval y tal vez más atrás pero no fue eso lo que me llamo la atención si no verme a mi misma en aquellas imágenes claro con otro tipo de cabello y vestimenta de hecho me veía bien buena <<se seria que nos están mostrando nuestra antigua vida tonta>> deja de fastidiar no me estorbes, seguí observando al parecer mi yo antiguo era bastante parecida a mi alegre un poco distraída y muy confiada pero eso no era lo mejor si no que parece era una princesa por mis atuendos y tiara de colores del arcoíris.

—¿Por qué mi tiara es diferente a las demás tiene colores las otras no? -pregunte sin saber si obtendría respuestas.

—porque tu eres especial eres la princesa de los elementos la única capaz de dominar todos y cada uno de los elementos que existen en la tierra por eso eres inteligente, libre, inquieta y curiosa como el aire, sensible, cariñosa, intuitiva, dulce e independiente y en ocasiones algo inestable como el agua, realista, practica, leal, simple, organizada y muy sensual como lo es la tierra y por ultimo eres apasionada, alegre, optimista, confiada, agresiva, impulsiva y con una vitalidad única como lo es el fuego. -carajo me describió muy bien este tipo definitivamente me conocía en un veinticinco porciento no mas de eso.

—vaya veo que me has analizado bien sin embargo eso no responde a mi pregunta del porque tu y yo debemos estar juntos.

—bueno sigue mirando la historia de tu vida mi amor

—no me llames mi amor que no soy nada tuyo y esto. -dije señalando a lo que estaba frente a nosotros. —no cambia nada ni lo cambiara puede que el pasado fuéramos algo, pero este en el presente y es mío y yo decido que hacer con mi vida y que no espero respetes eso.

No dije mas solo seguí viendo la película por así llamarla que tenía ante mí y efectivamente después de varias cosas más pude ver como mi antepasada podía manejar los elementos y a su vez como conocí a este ángel caído quien al parecer callo por mi causa se enamoro de mi y por eso fue desterrado y yo al parecer lo amaba mucho pero el cambio la ambición de los la raza humana lo controlo y termine yo misma encerrándolo para que no lastimara a la humanidad carajo yo lo traicione por un bien mayor pero me dolió hacerlo que después de acabar con el termine suicidándome que mierda es todo esto.

—lo vez nuestro amor es mas fuerte que la misma vida me dejaste porque no compartías mis ideales, pero no soportaste estar sin mi yo aun no puedo vivir sin ti te busque todo este tiempo y ahora que te tengo no te dejare mi princesa. -el tiempo me beso y yo no sabia si corresponder o huir estaba confundida que se supone debía hacer <<por ahora seguir el beso no esta tan mal este tipo además esto hará que nos ganemos su confianza>> mi conciencia tenía razón necesito su confianza para salir de aquí pero no significa que lo ame mis sentimientos están claros mas que claros seguí su beso y espero mi buen doctor entienda la situación…

*Helmut*

Pero ¿Qué diablos era lo que Lucia nos estaba contando? ¿cómo que en la época antigua mi mujer fue la mujer de ese ángel tenían su historia, pero esa era la antepasada de ella ahora Madison es mía y de nadie más? Y de esa manera seguirá siendo.




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