Jake.
¡Maldita sea! Mi cabeza Me duele como el infierno, me tomo la cabeza por el dolor tan intenso que tengo, me levanto de la cama para poder tomarme dos pastillas, ya no vuelvo a tomar de esa forma nuca, bueno creo que esa ni yo mismo me la creo, voy al baño para hacer mi aseo diario, salgo con una toalla enrollada en mi cintura para después ir a mi armario y ponerme lo primero que encuentro que sería una playera blanca, un jean, una chamarra negra y tenis blancos, me coloco mi reloj, me paso los dedos por mi cabello y por último tomo las cosas que siempre llevo a la universidad, cuando estoy por salir de mi habitación un grito me detiene.
- ¡Hijo baja a desayunar!
-Si mamá ya bajo- respondo también en un grito, bajo las escaleras extrañado ya que son muy pocas veces las que mis padres están en casa.
-Buenos días hijo- saluda mi padre.
-Hola hijo- dice mi madre.
-Buenos días- respondo con la cara llena de confusión, en verdad es raro que estén aquí.
-Oye hijo el sábado cumple años la hija de un gran amigo así que los invitamos a cenar, te lo digo desde este momento para que no hagas planes de salidas ya que tú también tendrás que estar presente- mi padre bebió de su café tranquilamente después de lo que me dijo.
- ¿Yo por qué? Eso no me interesa a mí, tú lo has dicho es cumpleaños de la hija de tus amigos no míos, aparte ni siquiera sé quién es- remarqué la palabra "tus" ya que era la realidad, tal vez él los conocía sin embargo yo no.
-No me interesa, estarás presente y punto, además ese día daremos una noticia muy importante así que no hay más que discutir.
-Está bien.
-Ese es mi muchacho.
-Me tengo que ir o llegaré tarde, nos vemos.
-Cuídate hijo- dijo mi madre, asiento y salgo de la mansión, obviamente alguien como yo tiene que vivir en una.
Es increíble y me encanta, al estar afuera me dirijo a mi hermoso lamborghini negro mate, es como mi hijo, lo amo y no es para menos si simplemente es hermoso al igual que yo.
En fin, no cualquiera tiene uno y en la universidad solo dos personas tenemos, uno lo tienen Rachel que es la nerd, la verdad no entiendo como una persona que tiene tanto dinero como yo, que puede comprar cosas bonitas, maquillaje o lo que sea que usan las mujeres termina siendo una nerd y ella... ella me odia bueno yo no me quedo atrás con el sentimiento ya que es mutuo, pero en fin ella y yo somos las personas con más dinero en la universidad y solo nosotros tenemos ese tipo de coche, personalmente lo que más amo es la adrenalina que se siente al ir a una muy alta velocidad... simplemente me encanta.
Claramente Rachel y yo tenemos nuestras diferencias, ella como ya lo dije es una nerd, le encantan sus libros, solo tiene una amiga, callada, saca las mejores notas y por supuesto es una romántica empedernida.
Por el contrario yo soy el más popular, me acuesto con las mujeres que quiero pero siempre les dejo en claro que nada va enserio aunque después ellas lo toman así, me encanta ir de fiesta, me gusta mucho el alcohol, no saco malas notas pero tampoco son las mejores y me gusta leer (creo que eso es algo de lo muy poco que tenemos en común y solo Christian, mi mejor amigo lo sabe), la verdad no creo en esas cosas del amor una sola vez creo haberlo sentido y... no la verdad creo que solo fue atracción física, yo jamás en la vida me he enamorado y nunca lo haré.
Al llegar a la universidad bajo de mi coche y bajo las atentas miradas de las personas que se encuentran ahí voy a mi salón, llego 15 minutos tarde pero no me importa ya que prácticamente soy intocable, entro ignorando a todos, pero mientras paso por la mitad del salón veo de reojo a la nerd como siempre ignorándome, ella es la única que lo hace, pero tampoco es como si me importara, tomo asiento, saco mis cosas y presto atención a la clase, siempre es la misma rutina, este será un día largo.