Rachel.
No sé qué le pasa al jodido destino que siempre pone todo en mi contra, es decir, todas las mujeres de mi salón quisieran estar en equipo con el jodido playboy y resulta que lo pone con la única persona que no quiere con él.
¿Esto pasa muy seguido? Si, el destino me odia, sin embargo, que no crea que haré todo el trabajo yo sola, ¡claro que no! El pobrecito se va a tener que ayudarme si quiere tener una calificación, la maestra nos pide que nos juntemos en equipos para comenzar con el proyecto, él se acerca de mala manera.
- ¿En tu casa o en la mía? - pregunto con tono desinteresado y me mira sin entender –para hacer el proyecto.
- ¡Oh! creía que como a ti te encanta la escuela podrías hacerlo sola.
-Puedo hacerlo sola.
-Genial.
-Pero sería solo mí proyecto.
- ¿Qué?
-Que si quieres una calificación tendrás que ayudarme a hacer el proyecto, ¿entonces en tu casa o en la mía?
-En mi casa.
-Bien, te vero hoy a las 4:30 y sin excusas- se va sin decir más, aunque claramente se nota molesto, pues lo siento por él- en ese momento suena el timbre anunciando el fin de la hora de clases, veo a Taylor acercarse a mí.
-No tendremos la siguiente clase, podemos ir a la cafetería y platicar de lo que sucedió.
-Me parece perfecto, necesito hablar de esto con alguien o voy a terminar explotando- vamos a la cafetería que está atiborrada de personas, pero por suerte encontramos una mesa para nosotras, cuando nos sentamos se hace un silencio y está claro lo que pasa, están entrado los populares, siempre pasa esto.
-Bien, ¿qué es lo que te pasa? - pregunta mi amiga llamando mi atención.
-Es simple, tienes que comprar un vestido.
- ¿Para qué?
-Para ser dama de honor.
- ¿De quién? - ella se ve sumamente confundida, ahora no sé cómo hacer la noticia suave, pero voy a tratar.
-Taylor ¿quieres ser mi dama de honor?
- ¿Cómo?
- ¿Quieres ser mi dama de honor?
- ¿Qué? – bueno, el plan de ser suave no funciona, pero su palidez me preocupa
- Taylor me voy a casar.
- ¿Qué? - esto demuestra que ni ella ni yo servimos para estas cosas.
-Me voy a casar con el playboy, Taylor... me voy a casar con Jake Black.
- ¡¿QUÉ?! – se levanta gritando haciendo que todos nos vean raro y yo solo quiero que la tierra me trague.
Jake.
¡Maldita sea!
Ahora tengo que hacer un trabajo con la única persona que no soporto, la nerd, pensé que ella podría hacerlo sola y yo podría usar ese tiempo para divertirme, pero no contaba con que si no le ayudaba ella prácticamente me sacaría del equipo, por si fuera poco, hoy tengo que decirle a Chris sobre la boda, entramos mi grupo de amigos y yo a la cafetería haciendo que todos guarden silencio como pasa todos los días que los populares entramos, todos van a nuestra mesa especial pero yo me aparto con Chris a otra para tener más privacidad para decirle lo que pasa.
-¿Y bien? - Pregunta una vez que nos sentamos.
- ¡¿QUÉ?! – escucho un grito proveniente de la mejor amiga de la nerd y creo saber a qué se debe, ahora es mi turno.
-Me voy a casar suelto de repente- mi mejor amigo suelta una carcajada, mostrando que no me cree nada.
- Que gracioso estás el día de hoy Jake- se sigue riendo, pero al ver que yo no lo hago su sonrisa comienza a desaparecer - ¿es broma no?
-No Chris, en verdad me voy a casar- comienza a palidecer.
- ¿Qué? ¿Con quién?
-Chris, me voy a casar con Rachel Gates- abre los ojos tan grandes que me da miedo- me voy a casar con la nerd.
- ¡¿QUÉ?! –y ahora toda la atención está en nosotros, pero no le doy importancia a eso cuando veo como mi amigo se desploma en el suelo, joder, ¡se desmayó!
Esto es simplemente genial.