Capitulo 1: El inicio de una novela de secuestro
¿Miedo? Eso es normal, todos tenemos miedos. Yo soy incluso más miedosa que muchas personas; pararme frente a mi padre y ver esa cara, la misma que ponía cada vez que tenía que mostrar mis calificaciones, creo que por eso siempre me dio miedo mostrar los resultados de mis esfuerzos, porque tenía miedo de que me vieran de esa manera; esa que dice “está bien, pero debiste hacerlo mejor” o “¿esto es todo lo que lograste?, parece que no debí creer en ti” … esas miradas que no hablan, pero te lastiman.
Estaba fuera de la cafetería esperando a mi novio como todos los viernes, en nuestra cafetería favorita; siempre llego 10 minutos después de la hora porque sé que nunca llega a tiempo. Tenia puesto un vestido negro el no se habia dado cuenta pero siempre llevaba el mismo vestido antes usaba tacones pero ahora solo llevaba tenis son mas comodos. Una coleta de caballo, mi puklsera negra en la mano izquierda y mi mochila negra. Traia los audifonos escuchando una cancion a la que en relidad no le estaba poniendo atencion solo queria escuchar algo, ya que estar alli sola comenzaba a ser deprimente. Comienzo con un café y una rebanada de pastel, acompañada de un libro. Luego de la primera hora de espera cierro mi libro y pago la cuenta, salgo y doy una vuelta a los alrededores hasta llegar a un parque; me siento en uno de los juegos donde olvido que soy una mujer disque independiente y con un idiota de novio. Regresando a la cafetería pido algo para comer y pocos minutos después llega. “Al menos llegó”, pienso por un momento; lo escucho dar la excusa de esta vez, al pobre le pasa algo siempre: en una ocasión había mucho tráfico, en otra el entrenador no los dejaba salir y la más creativa de todas, su madre tuvo un accidente. Esa tal vez funcionaria si su madre no subiera a Instagram todo lo que hace cada 5 minutos. Esta vez su maestro les dio una aburrida plática sobre su futura graduación.
- “¿Ya pediste algo? Tranquila, yo pago.”
(Claro que ya pedí algo ¿piensas que estuve 2 horas y 43 minutos mirando cómo pasan las meseras? ¿” yo pago”? ¿planeabas que yo pagara después de hacerme esperar?)
-Está bien ya pedí algo ¿Por qué no nos vamos ya?
Finjo mi sonrisa y él sonríe también, esa risa de “victoria, no se enojó esta vez” si, claro. Salimos del lugar y vamos al cine, luego de criticar la película vamos por unos elotes y me acompaña hasta casa, donde entre besos y caricias me dejo llevar por sus calientes manos que tratan de poseerme; luego del acto, simplemente se queda dormido y yo como siempre no puedo dormir. Solo me quedo acostada, hasta que se levanta y se va sin decir nada. Al fin sola, el sueño me alcanza y sin quererlo me quedo dormida; me despierto algo malhumorada por las horas de sueño que me faltaron, voy al trabajo y de allí me voy a casa. Preparo una ensalada y mis cosas para hacer la tarea, luego de 2 horas haciendo tarea me alejo de la computadora cansada. Me doy un baño caliente y me duermo.
Una vida simple, ¿no? Si, demasiado. Los que tienen vidas interesantes quieren ser normales y los normales deseamos ser interesantes.
Me desperté de mala gana por la alarma que me indicaba un nuevo día. Me levanto, desayuno, trabajo, ensalada, tarea, ducha y dormir. Todos los días eran iguales; cada semana, cada mes, y el año estaba por terminar. Miré mi departamento pensando que podía salir en cualquier momento, pero incluso afuera era como si no pudiera salir del mismo ciclo de eventos, ¿Hasta cuándo esto seguirá así?
Mientras trabajaba, noté algo raro; un chico extraño estaba a la distancia y parecía mirarme. Regresé a casa y la imagen de aquel chiquillo me recordó los ASMR Rol play de Yandere, el más popular “Yandere te secuestra”, porque tener la historia de un secuestrador y padece el síndrome de estocolmo era algo normal. Me puse a escuchar algunos mientras hacía mi tarea. Algunos más interesantes creo que los podría dividir en dos grupos: los ricos y los violentos; los ricos prometían cosas ridículas y los violentos eran cariñosos, pero aterradores. Según internet, con la mayoría de los secuestradores apasionados lo más recomendable era no enfrentarlos y, principalmente tratar de empatizar con ellos. ¿Cómo rayos empatizas con alguien que te aleja de tu vida y te encierra en contra de tu voluntad como a un vil perro? Terminé mi tarea y abrí un nuevo archivo., pensé en un título, pero no se me ocurría nada, pensé en un nombre simple y fácil de recordar …“Lina” es bonito. Y para el chico, quería que empezará con “Y” de Yandere, pero algo corto y poco común … “Yuna” suena bien y atractivo. Escribí rápido su primer encuentro, pero ¿Cómo se conocieron?, la mayoría de los secuestradores conocen a sus víctimas de antes. En los videos también había 2 tipos: las que ya tenían novio y las que solo tenían un amigo. Spoiler: La mayoría de ellos mueren.
Pensar en ello era excitante, pero en la realidad debía ser aterrador… Me estaba desviando de la idea principal y mejor me fui a descansar antes de escribir una historia erótica.