Me regresa a la cama y no podemos separar nuestros labios, bajo mis manos por cada uno de los botones de su camisa y siento como su respiración comienza acelerar al igual que la mía, al llegar al último botón él no lo duda y se deshace de su camisa, nuestro deseo por el otro aumenta y ya no podemos detenernos, me separo un poco de el para que pueda quitarme la blusa y no lo piensa mas y lo hace, y agradezco un poco nuestra separación ya que empezaba a quedarme sin aliento, pero no regresa sus labios a los míos.
-Ness…- dice entre jadeos.
-Si – contesto casi sin aliento.
- ¿Estas segura de esto? - ¿acaso estoy dejando algo en duda?
- Más que segura- contesto.
Se levanta y se sienta a la orilla de la cama y yo lo imito.
- ¿Pasa algo? -pregunto.
-Si-toma aire y continua- veras para mí esto no es importante ni mucho menos relevante, pero en verdad te deseo mucho y no quiero que, por un simple deseo carnal, y después te arrepientas de todo esto- termina y se tapa su hermoso rostro con ambas manos.
Me siento sobre su regazo y retiro sus manos de su rostro y lo tomo con las mías, y lo veo directo a sus hermosos ojos.
-Nunca me arrepentiría de dar este paso contigo, prácticamente eres el chico de mis sueños y yo nunca te dejaría- le dejo un beso en sus labios y el me ve.
-Si realmente quieres que esto pase, quiero que sea a mi manera- dice tomando mis manos con las suyas.
- ¿Quieres que nos casemos? -pregunto confundida.
-Esa es una opción, pero es algo más que eso.
- ¿Qué es?
- Si tu realmente quieres estar conmigo, tiene que ser para el resto de nuestros días, y una forma es casarnos, pero para nosotros existe una unión aún más fuerte que esa y es…-sonríe suavemente y toma aire- que te convierta en un vampiro al igual que yo- ¿Qué? Nunca lo considere, acaso no me quiere, así como soy, una simple humana.
- ¿Acaso no me quieres, así como soy? -pregunto indignada.
- Claro que si eres todo mi mundo Vanessa, solo que nunca te quisiera perder nunca – y besa mis manos.
- Nunca lo había pensado te tengo que ser sincera, pensé que solo con mi persona te era suficiente, pero lo tendré que pensar – suspiro – y ¿esa es la única forma en la que puedo estar contigo?
- Si, es una de las condiciones que tengo para ti.
- Y si llegara a pasar antes de casarnos, ¿eso me compromete a casarme contigo?
-Si será más que obvio, Ness tu eres mi vida y créeme no pienso perderte – dice y me besa.
Estuvimos casi toda la noche platicando de cosas sin sentido y alguna de otra historia de nuestra niñez, aunque su niñez fue un poco difícil pues fue hace más de 100 años, pero me gustaba que me platicara su vida y todo por lo que ha pasado, sin darme cuenta me quede dormida entre sus brazos.