La oscuridad de la luna

Éste asunto a podido conmigo.

sigueme!

Me sentí utilizado, como ave cazada por una vil depredadora. Estaba tan decepcionado de mi mismo y tan enojado por ser tan estúpido. 

 -  Lo planee todo Alex, planeé que me vieras en aquel parque, que sintieras compasión, atracción, deseos, intriga... Eres tan buena persona, eso hace que yo... Te quiera solo para mí - exclamaba mientras se acercaba a mi de forma muy perturbadora a acariciarme la cara y el cabello.

-Quita tu mano de mi cara, por favor. 

No pensaba mirarla, se veía tan... Provocativa que por un momento me hizo tragar saliva, sus manos bajaron Hasta mi cuello apretandolo levemente ¿como es que sabe que eso me gusta? Me vuelve loco, pero no puedo ser obvio y mucho menos dócil. 

Tengo secretos. 

Cosas que no he permitido que nadie sepa, la verdad es que ésto de ser atento, buena gente, servicial y desinteresado reprime una parte genuina de mi personalidad, una parte que necesita salir a veces y a hacer de las suyas, he tenido sueños eroticos y deseos extraños y bizarros desde mi infancia, creí y aún creo que está mal, pero debo satisfacer a mi ego algunas veces, nadie lo sospecha, y con nadie lo compartía excepto con una ex novia que tuve hace un par de años, ella  conocio esa parte de mi primero que todo y eso era todo lo que quería siempre. Terminó mal, además de que me mintió en muchas cosas, nunca supe mucho de ella, era una adicta sexual y se nos daba bien, nos apegarnos mucho, tenía problemas de dinero, sus secretos no me importaron, siempre la ayudé pero jamás logré que confiara en mi, hace un año no se de ella, antes de eso se metía a mi casa y a mi cama, recuerdo que éramos tóxicos, hicimos cosas malas mientras estuvimos juntos. 

 

No sé qué tanto sabe Bayolet, ella me asusta, es obscura, y sabe que puedo serlo tanto como ella. 

NO QUIERO VOLVER A ESOS DÍAS. 

 

En ese momento solo quería irme y nunca más volver a verla. 

- ¿Por qué lo haces? ¿Por qué yo?

-Te dije que no te acercaras! 

-Yo no te he hecho nada! - intente que no se saliera de control la situación, parece que se estaba enojando y además estaba nerviosa-

Su mano temblaba al sacar de su bolsillo un cigarro y un encendedor, caminaba de lado a lado analizando no se que. 

-¿Que planeas conmigo? 

De repente vino hacia mí, apretó mis mejillas y presionó el cigarro en mis labios, Grite! Que doloroso fue eso.

-Callate! - me dijo desesperada.

No entiendo nada, soltó el cigarro y luego comenzó a actuar como si le preocupara, preguntándome que si estaba bien y tratando de curarme.

-No quiero estar contigo Bayolet. 

-Y yo no quiero que te vayas Alex. 

Se encharcaron mis ojos, yo era tan débil de corazón, tan sentimental, tan tonto y ella lo sabía.

-No, no llores, no llores! 

Me consolaba, ella limpió mis lágrimas frotando su cara con la mía ¿que pretendía?

-No me toques! Si me vas a tener aquí al menos dame de comer, muero de set, estoy sucio y amarrado. 

-Bien! Tienes razón, te dejaré solo un rato, luego hablaremos. 

 

Estoy demasiado cansado como para intentar algo, la silla en la que estaba amarrado tenia rodachines, logré ver un agujero que irradiaba luz, pero era muy pequeño para averiguar donde me encontraba. 

Noté que se hizo de  noche y no pude evitar dormir. Dormí tan profundo que no sentí que Bayolet abrió la puerta y me traslado de habitación, me desamarró y me vistió ¿como mierda no me di cuenta? 

Cuando desperté estaba acostado en una cama limpia, una habitación bonita con un tejado transparente que me permitía ver el cielo. Era muy hermoso. Me había traído mis libros favoritos ¿como supo cuales eran? Y mi mañana se arregló cuando vi el desayuno, sin dudar sonreí. 

Estuve solo casi medio día, no había ruidos, ni carros, ni personas cerca, solo podía escuchar aves. 

Estaba leyendo un libro y por fin escuché pasos, me levanté muy rápido de la cama, Ella entró y yo suspiré. Se había soltado el cabello y vestía un overol de lino, sus botas y un abrigo. 

-Hola, espero te guste la habitación, es mi favorita?¿estás bien? 

-Si, gracias! Por todo ¿ahora si me dirás que hago aquí?

-No. 

-¿Cuánto tiempo estaré aquí? 

-No te gusta mi compañía? 

-Si estuviera libre... Tal vez! 

Me acerque lentamente hasta quedar a centímetros de su cara, Bayolet miró mi boca y se mordió los labios, se iba a alejar y la tomé del cuello para besarla, metí mis dedos entre su cabello y levemente tire un poco hacia atrás, se le escapo un jadeo, sonó tan bien, supe que tenía la situación controlada en ese momento, mire su rostro y ella me miró como suplicando que continuará, sus uñas estaban clavadas en mi pecho, besé su cuello hasta llegar a su oreja, ¡lo pensé mejor¡ y decidí dejarla con las ganas.

-No te lo mereces! - le susurre a su oído. 

Gruñó y se apartó bruscamente, me pegó una bofetada y azotó la puerta.

-Sonreí con la Mano en mi mejilla. 

No pude creer que casi tengo sexo con la chica que me tiene loco, está demente y soy su prisionero pero me encanta, no estuve 6 meses tras de ella solo por pasar el tiempo, si la quiero. Bayolet quiere despertar algo en mi, está en busca obscuro que no puedo darle, no puedo dejar que esa parte de mi me domine, hace un momento solo pensaba en castigará, lastimarla, hacerle el amor fuerte, ella no me tiene aquí por simple gusto. 

Ese día estuve solo, nada se escuchaba, me duche y sinceramente no sabia que mas hacer, llegando la noche encendí las luces y ella apareció con una maleta grande y la arrojó hacia mi.

-Te traje! No quiero escuchar tu voz estos días. 

-¿Quieres decir que no vendrás? 

-No te acerques! Y no, no vendré, ahí está todo lo que necesitas.

-¿Por qué? Porque no hago lo que quieres? 

-Mi hermana murió por tu culpa, por buscar en otros lo que tu le dabas, que hiciste para que obsesionada tanto contigo? Que le hiciste?



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En el texto hay: locura, intriga, obsesion

Editado: 29.05.2020

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