Capítulo 14: "Jugar sucio"

Dylan
 

Aldana cae en mis brazos, termino agachado sosteniéndola, odio pasar por estas cosas.

-¡Trae una toalla! ¡Algo! - Exclamo un poco nervioso y Alan responde a lo ordenado. Una vez que la trae le seco la boca y el pecho, el muy bruto casi la ahoga con el agua. 
-Era un poquito de agua nomas- le digo.

-Y bueno, ¡Que querés! Si se movía para todos lados- me dice mirando el enchastre de agua.- Estuviste a punto de que te parta esa botella en la cabeza.

-Eso por que no viste como casi se mata transpasando el ventanal hoy a la madrugada...- le digo estresado.

-¿Cómo que casi se mata? ¿Qué estás diciendo Dylan?

- Si, de no creer, lo sé. Aldana no está bien.- Alan me mira, su mirada es... está triste, preocupado, claramente él no está bien, pronto será papá y Oriadna hace un mes no aparece - Tranquilo, ya le vamos a buscar la vuelta. Sería la segunda vez que casi me parten una botella en la cabeza ¿No? - digo con gracia como para animarlo un poco.

-No digas eso, ni da empezar a comparar las situaciones, me da a pensar un montón de cosas.

-Ayudame a levantarla, se pone re pesada- me ayuda agarrándole las piernas y luego la acomodo sobre mis brazos, la llevo al living y la recuesto en el sillón. Malena nos está mirando, la puta madre, lo que faltaba.

-Tío, ¿Qué le pasó a mi mamá?

-Tu mamá... está enfermita y..- Que no se ponga a llorar, que no se ponga a llorar, que no se ponga a llorar. Ruego demasiadas veces.

-¡Dylan...!- Alan reniega por lo bajo y me mira de mala manera.- sí, está enfermita pero está bien, en un ratito se va a despertar y vos...- la abraza mirandola- cuando llegue la tía Sofi, le van a preparar unas ricas galletas con un té, así se pone contenta, ¿Qué te parece?

-¡Si! ¡Galletas de chocolate para mi mamá y para mi! ¡y para la tía Sofi!- dice feliz y con su voz de pito tan linda e insoportable. Miro a Alan y le sonrío, le pongo una mano en el hombro.

-Que crack. ¿De dónde vas a sacar cacao para las galletas?

- ¡Uhh qué Gil que sos! ¡ni cacao te queda! ¡anda a comprar rata! Mejor deja, cuando venga Sofi le doy así van a comprarme.




 

Sonia

Bajo del taxi, el invierno se vino con todo, ¡que frío!
 

Miro mi reloj ya casi son 19:30, súper puntual. Subo las escaleras y golpeó la puerta, me atiende el doctor López.

-Buenas tardes, adelante. - me saluda tan amable como de costumbre.

-Buenas tardes doctor- cierra la puerta y yo me saco la campera y luego la dejo en el perchero, el consultorio tan cálido.

-Tome asiento.

-Si.- Me siento en el diván.

-Y bien Sonia... ¿Qué tal su semana? - me pregunta mientras se sienta en su sillón marrón, cruzándose de piernas con su libreta y lapicera en la mano.

-Bien doctor, un poco estresada y mi cabeza no para un solo segundo.

-Le voy a pedir que se recueste, que se relaje y que retomemos la sesión anterior ¿Está bien?

-Perfecto- asiento y luego me recuesto, cierro mis ojos y me relajo.

-Me había contado de sus visiones, me describió cuáles fueron en su momento, me contó cuál era su trabajo, el ambiente de trabajo y me contó un poco de la familia y esos tres niños, yo le dije que retomaría en la próxima semana porque ya se había cumplido la hora ¿verdad? Bien, llegó el momento... sus visiones según usted se cumplieron, lo presiente, hace poco tuvo contacto con Dylan, ¿desde cuándo volvió a tener contacto con él y por qué?

-Su padre empezó con ciertas actitudes que no eran las de él, antes de que nos despidiera del trabajo se tornó más agresivo con su familia, con los chicos, incluso una mañana recibo una llamada desde el Aras, era Dylan...me cuenta que su padre lo quiso golpear con una botella de vidrio, su hermano vió la situación gracias a dios y no pasó nada. Todo esto paso luego de que nos despidiera, cuando quiso asesinar a su hija prendiéndola fuego en el galpón...

-Disculpe, ¿Podría repetir lo que me está diciendo? ¿Cómo qué quiso asesinar a su hija?- me interrumpe.

-Sabe doctor, él ya no estaba bien y no sé porque actuaba así... pero ése, fue el final de esa familia. Una tarde, recibo un llamado de la policía preguntando si yo era la tutora de los chicos y que de ser así que por favor me presente en el Aras porque hubo un incendio. Cuando me presento en el lugar el galpón estaba negro, habían dos camiones de bomberos y una ambulancia a punto de irse, allí arriba Aldana, mi chiquita tan linda... se había ahogado con tanto humo y la estaban por llevar de emergencia. También habían tres patrulleros y un policía se estaba llevando a Juan, el papá de los chicos. 
 

Dylan todavía era menor de edad, ¡No los podía dejar solos! Era yo sola para los tres... la policía me cuenta que los dos chicos habían declarado que su padre encerró a su hermana dentro del galpón y que lo prendió fuego, ellos pudieron defenderse de su padre y salvar a su hermana.
 

Estuve con Aldana en el hospital, la cuidé. Y no sé cómo , ni porqué, no me dieron el cargo de los chicos siendo yo la única responsable que quedaba de ellos... el resto de la familia vive en el extranjero, los mandaron a un correccional y poco tiempo después Juan fue internado en un hospital psiquiátrico, yo lo iba a ver, Dylan cumplió dieciocho años y no quiso saber nada de su padre hasta hace poco... me llamaron de allí y me dijeron que uno de sus hijos había ido a visitarlo, me sorprendió. 
Ese mismo día, recibo un llamado de él y me cuenta que Aldana está internada, ese fue el último contacto con él.- El doctor termina de escribir y luego contesta.

-Perfecto, por lo que veo sus visiones se cumplieron... Juan los despidió del Aras, empezaron las peleas en la familia y la mamá de los chicos falleció, luego el galpón se prende fuego y esa niña que usted ve en un hospital es Aldana... ¡Ah! Casi lo olvido, ¡Las rejas! Las rejas es la correccional... ¿Qué más sabe de éstos chicos? ¿Qué pasó luego del correccional? Supongo que ya son mayores...