LAURA
Yo que pensaba que iba a ser un día bueno, pero no. Para empezar mi madre se ha ido sin desayunar conmigo; después el profesor Gutiérrez, que me tiene manía, después todas las chicas mirándome; la arpía de Sonia ha intentado molestarme… Por lo menos me lo he pasado bien cuando Jake me ha traído algo de comer. Después que por qué le digo que es un príncipe. Hemos estado hablando hasta que… bueno, le he demostrado que no puede jugar conmigo.
-Lau- me llama alguien sacándome de mis pensamientos.
-Hola Érica- le saludo junto con un abrazo cuando me doy cuenta que es ella- ¿Qué pasa?
-El jefe quiere verte- me informa.
-Odia que le llamemos jefe- informo y nos reímos.
Caminamos hacia dirección riéndonos hasta que una voz irritante nos interrumpe.
-Mira si es el capricho de Jake- dice Sonia- Y está con la secretaria, ¿preparándote para tu próximo trabajo?
-Mira cielo, para empezar ser secretaria no es nada malo- empiezo diciendo- Y ni siquiera sabes porque trabaja, así que no te metas- contesto y seguimos caminando pero escucho como se ríe, así que me giro- ¡Y por lo menos ella se ha sacado sus estudios por ella misma y no porque sus padres compren sus aprobados!- grito y veo cómo se empieza a cabrear, así que vuelvo a seguir mi camino junto a Érica.
-Gracias por defenderme- me dice.
-No me tienes que dar las gracias- contesto y entramos en dirección. Voy hacía el despacho del director pero Érica me frena
-Las tiras- me informa señalando mis manos- No le gustará si las ve- me explica.
Me las quito rápidamente y las guardo en mi mochila. Paso al despacho y veo cómo está el director de espaldas mirando por su gran ventana.
-Hola jefe- saludo con una sonrisa que la borro nada más ver su rostro- ¿Pasa algo? ¿Estás bien?- pregunto y corro hasta su lado.
-Lo siento- me dice con voz triste.
-¿Por qué?
-Por lo de tu abuela, no lo sabía- me informa y me tenso rápidamente separándome de él.
-¿Cómo te has enterado?- pregunto.
-Me lo ha dicho tu madre.
-Ehh… va a empezar la clase- digo- Me he de ir- informo y salgo corriendo ignorando que me llama.
-Lau- me llama Érica, pero también la ignoro- Espera- escucho que dice pero sigo corriendo hasta llegar al baño.
Me meto dentro y empiezo a llorar. Para qué le ha dicho mi madre eso al director, y por qué estaba tan afectado.
DIRECTOR
No sabía que la madre de Sandra había muerto. Recuerdo que era una mujer encantadora, pero después de que me fui no supe nada más de ella ni de Sandra, ni de mi querida hija. Sé que estuvo mal lo que hice, yo realmente amaba a Sandra, pero mi familia me había obligado a casarme con Carolina.
Cuando Sandra se enteró de la verdad, de porque viajaba tanto, porque muchas fiestas no estaba con ellas, porque nunca había conocido a mi familia… Me echó, y no le culpo por ello.
Nunca he vuelto a mantener contacto con ellas porque Carolina me obligó a separarme de ellas. Pero siempre he sabido la mayoría de cosas que les ocurrieron, pero solo las felices al parecer. No sé cómo no pude enterarme de lo de Encarna, adoraba a esa mujer, y sé que ha sido como una madre para Laura ya que Sandra siempre ha trabajado tan duro para conseguir sus sueños, y así ha sido. Ahora es una de las mejores doctoras del país.
Cuando me enteré que se mudarían a Barcelona, gracias a la beca que le han otorgado a Laura, no dudé en ponerme en contacto con ella. Al principio Sandra no quería saber nada de mí, pero gracias a Jordi entró en razón y decidió quedar conmigo a tomar un café. Le explique todo lo que tendría que haberle contado hace muchísimos años y ella me perdonó. Ella no sabía todo lo tuve que pasar por parte de mi familia, incluso creo que le di lástima.
Llevamos manteniendo el contacto todo el tiempo desde que empezó el instituto, incluso hemos quedado a cenar algunas veces. Pero todo esto no lo sabe Laura. Según Sandra no lo aceptaría, pero yo tengo la esperanza que me acabe aceptando y podamos tener la misma relación de padre e hija que tengo con Érica.
-Papá- me llama Érica- ¿Estás bien?- me pregunta.
-Sí cariño- le respondo y ella me abraza.
-¿Cuándo le dirás a Laura la verdad?- me pregunta mientras se separa.
Érica sabe todo. Cuando me separé de su madre hace un año le explique todo. Ella me apoyo, aunque quiera a su madre nunca la ha llegado a aguantar. Me estuvo animando para que contactará con Sandra y así poder recuperar el tiempo perdido con las dos, encima también deseaba tener una hermana.
-Sandra dice que aún es muy pronto, y yo también lo creo- contesto.
-No conozco mucho a Laura, pero sé que cuanto más esperéis peor se lo tomará- me dice y creo que por una parte tiene razón- Me voy papá- me dice y se va después de darme un beso en la mejilla.
¿Qué voy a hacer? ¿Cómo voy a recuperar a Sandra? ¿Cómo voy a conseguir que Laura me quiera?
LAURA
Escucho como suena el timbre, así que me espero unos segundos para tranquilizarme y secarme la cara. Me dirijo hacía el aula de catalán y toco la puerta.
-¿Puedo pasar señorita López?- le pregunto a la profesora. Me mira como si me quisiera preguntar algo pero niego con la cabeza, y parece que lo entiende.
-Sí, pero que sea la última vez- responde y yo asiento.
Voy a la última fila que está vacía y veo cómo me observan todos. La mayoría raro, otros con pena, y luego Lu y Sus con preocupación. Les dedico una sonrisa para tranquilizarlas y articulan si estoy bien y les digo que sí.
No me doy cuenta que ha acabado la clase hasta que veo como mis compañeros salen por la puerta. Recojo todo y antes de poder escabullirme llegan Sus y Lu.
-¿Qué pasa?- pregunta.
-Nada- contesto.
-Le voy a cortar las pelotas a mi primo- dice Lu.