La princesa y el guardaespaldas

21. Matthew

Las luces se encendieron en cuanto entramos, mí hermano me había acusado de ser un pretencioso capullo al instalar hace unos meses atrás este sistema pero habia secreto detrás de mí intención la cual era proteger a Zoey quien había desarrollado una extraña fascinación por las luces.

-Cuando vine la primera vez no me había dado cuenta de esto- murmuró, observandoz quiero creer, sus alrededores- Es tan novedoso, tan de última vanguardia, no es para nada t…

-Para nada como yo? Por qué? Porque es algo que solamente la gente rica puede tener?Solo los que tienen muchos ceros en su cuents bancaria pueden acceder a este? Los pobres mortales como yo, tenemos entonces negada la oportunidad de obtener estos “beneficios”?- inquiri y me maldije a mí mismo al caer en la cuenta de cuan borde estaba actuando

Ella nego.

-No iba a decir eso- mascullo, dándome un par de ojos en blanco en forma de contraataque - Iba a comentar que no te tenía como un obsesivo del control y mucho menos un maniático de los cuidados y pretenciones. Te tenía como un capullo y con tu absurda y ridícula acusación me lo has confirmado, no obstante no te consideraba un adulto sobreprotector- añadió, cruzándose de brazos.

Juro que de haber sido posible me habría clonado para llevarme a mí mismo al ring y así darme una muy buena paliza , a ver si así las ideas se me acomodaban un poco.

-E…Esto- rasque mí cuello desesperadamente para eliminar la picazón que me abordaba cada vez que me ponía nerviosa- Esto lo copié luego de quedarme despierto hasta tarde una noche en el living, una de esas donde el insomnio te agarra como presa, y no te deja ir, en ella un especialista junto a un médico recomendaron que en la medida de lo posible se cambiarán todas las instalaciones eléctricas por las automaticas y sugerían comprar las luces que se encienden al entrar a un cuarto o al aplaudir… Yo me volque por la que has visto ahora principalmente porque no me apetecía que Zozo sintiera que estaba en un burdel al ingresar a su hogar, además dudo que los de servicios sociales apreciarán esto- hice un mohin.

-Vienen seguido?

-Una vez al mes, fácilmente para corroborar ya esté todo en orden y que soy digno de ser su tutor- suspire, observando al calendario en la esquina del comedor el cual anunciaba que en diez días tendría una de esas visitas- En fin, cuando ella estaba pasando por la tediosa edad de los seis años, esa en la que tienen que descubrir cómo todo funciona, se le dio por inspeccionar interrumptores y enchufes por lo que esa fue la señal de alerta que me hizo instalar este.

 -Serad un gran padre algun dia - la oi murmurar a la vez que ingresaba a la cocina y le hacia una seña para que me siguiera.

-Gracias-conteste parándome delante del refrigerador- Aunque no estaen mis planes, no inmediatos.Ya tengo suficiente con ella- afirme - Ese anotador que ves a tu izquierda tiene detallada cada una de sus actividades, desde que sale de la cama hasta que vuelve a ingresar en ella con la luna en lo alto del cielo. Y estoy seguro de que si no tuviese que invertir cada centavo que entra en mí bolsillo en los implementos para mí sobrina podría usar ropa que no salga de tiendas de segunda mano- tire de mis cargo caqui que llevaban  ya conmigo una buena temporada.

-Hey, que ese look de andrajoso te sientan bien, Russell - comento apoyándose en el marco de la puerta, observándome desde la lejanía.

Era como si tuviera miedo de acercarse a mí, lo que era una locura porque eso no significaba que yo la fuese a morder… O si?

No. Era mí protegida, no hay chance de que mis sentimientos pongan en peligro esta misión. Realmente necesitaba el dinero. Me había comprometido con este trabajo y me apegaria a las condiciones impuestas por él las cuales por supuesto no incluían un romance con su adorada hija.

-En que te quedaste pensando?- pregunto y tal vez estaba volviéndome loco al creer haber distinguido cierta preocupación en su voz - Te me quedaste mirando y por un instante me pareció que alguna fuerza maligna se te había metido adentro y vendrías a arremeter contra mí.

Tan obvio estaba siendo ? Cuál era la chance de que se hubiese colado en los rincones más oscuros de mí imaginación y hubiese sido testigo desde la oscuridad de cómo me hubiese gustado tirarla sobre el sofá para hacerle saber que opinaba sobre ese conjunto que traía hoy.

-Justo tu vienes a juzgarme a mi- espete, apuntandola y recorriendo su cuerpo de arriba abajo- Cuando tienes eso puesto?- enarque una ceja- ante su silencio y dada por ganada esta especie de batalla procedi- Espero que no te moleste comer una pizza como a mí me gusta llamarla desde cero.

-Desde cero?- repitioz confundida- Que es eso?- agrego haciendo una  mueca demostrandome cuánto le desagradaba esa idea.

-La construiremos desde su base.

-No… No lo se- susurro y me di cuenta cuan insegura estaba con mí propuesta.

-Oh vamos, anímate a las   nuevas aventuras yexperiencias.

-Como cuando la profesora nos junto?

 Asentí.

-Eramos la receta perfecta para el desastre y aqui estábamos conviviendo y pasándola bien como dos personas serias y maduras-acote a la vez que iba  m depositando los elementos en la mesada.

-Que conste que hago esto solo  por la niña y porque no quiero avergonzarla o apenarla.

-Oye,  yo jamás  haría algo para hacerla sentir así -me quejé.

-Todos los adultos lo hacen arde o temprano y esa época coincide con la terrible adolescencia.

-Cada noche le ruego al cielo que esta no sea tan dura- vacie la harina en un pote provocando que una nube blanca nos cubriera  de pies a cabeza-Tu lo fuiste?- inquirí clavando mí mirada en ella cuando se esfumo.

Soltó una carcajada que sonó como música para mí.

-Decir que fui difícil es quedarse cortos- sentenció - No sé cuántas veces papá tuvo que mandar a sus secuaces a la oficina del director para que arreglaran los desastres que producia. 




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