Capítulo 15: Asalto

—Avanza—digo luego de revisar el terreno.

Karina y yo caminamos sigilosamente cubriendo nuestras espaldas. Ser un espíritu en esta situación es muy ventajoso. Ni siquiera debemos hablar, un enlace mental basta para comunicar nuestras palabras.

Anthony en este momento debe estar con el líder de esta rama de la sociedad. Únicamente hay un Slayer y tres Hunters en la base. Sólo debemos apagar los generadores, las anomalías saldrán, intercambiaré cuerpos con Leonore y nos marchamos de aquí.

No debe salir nada mal, no puede pasar algo malo…

—Frank, por esta puerta—Karina me llama.

La sigo hasta una entrada.                        

—Yo revisaré, te daré una señal cuando confirme que está despejado—añade.

Afirmo con la cabeza. Ella entra en la sala. Me quedo vigilando el exterior en busca de un posible fallo. No hay nada. Está demasiado tranquilo. Me preocupa, todos los Hunters deberían estar en alerta pero aun así este lugar tiene un ambiente de serenidad incómodo. Reviso el plan de nuevo para asegurarme que todo está bien y no he cometido una estupidez.

—Despejado—Karina habla sin en enlace mental.

—Perfecto—abro la puerta.

—Avancemos por ese pasillo, si todo va bien el área de generadores eléctricos debe estar bajando unos pisos—explica Karina.

—Excelente, vamos—afirmo.

Nos colocamos en posición nuevamente y avanzamos lentamente. Observo los alrededores y busco pequeñas brechas. Intento otro enlace mental con Leonore pero sigo sin tener éxito. De pronto escucho una especie de interferencia, como la de un radio... ¿pueden las señales de espíritus mezclarse con eso?

—Karina, espera—la detengo.

—¿Qué sucede?—pregunta confundida.

Me paro frente a ella. Lanzo un puñetazo con todas mis fuerzas. Mi puño atraviesa su cuerpo, como si no fuera un espíritu.

—¡Rise!—grito activando mi maldición de manera instintiva.

Perdóname, Leonore, no quiero contaminar tu cuerpo con maldiciones pero he sido engañado de algún modo.

—¡Henry, reinicia!—la Karina impostora da un mensaje por radio.

Antes de que termine mis llamas la alcanzan. Ugh, el sentimiento de odio, tristeza y miedo que ya conozco me atacan de nuevo. Ira... Esto puede ayudar a las emociones de Leonore…

—Monstruo—el disfraz de Karina desaparece y deja a un chico en su lugar.

Así que este sujeto es Cotton Dreams... voy a comerme su alma ahora mismo.

Una armadura envuelve mi cuerpo. Es diferente a mi forma masculina, pero es igual de aterradora y blasfema. La pechera sustituye mi camiseta, las braceras con espinas aparecen y los demonios comienzan a colocar la parte baja de la armadura… voy a enloquecer...

—¡Reinicio en proceso!—gritan desde el radio que tiró el sujeto.

La cabeza me comienza a dar vueltas. ¡No puedo perder el conocimiento en medio de una transformación, volveré a Leonore un demonio clase D!

******

Despierto completamente atado. Estoy en una especie de cámara sellada. Hay un gran vidrio a manera de ventana como comunicación con el exterior. Parece ser una capsula, estoy completamente atado y restringido. ¿Qué sucedió? ¿No perdí la cordura? Observo mis manos, son las de mi cuerpo original. He dejado de ser un espíritu, he vuelto a la normalidad.

—¿Ese espíritu también tiene una maldición? ¿Es eso posible?—pregunta Drake sin mirarme.

—¡Sácame de aquí, imbécil!—trato de liberarme.

Él se voltea y me mira a la cara. En su rostro se marca una decepción absoluta. Ver su expresión me hace dejar de hacer fuerzas y concentrarme en los pensamientos de que hice algo mal.

—No, eres un demonio. Confié en ti, te di una oportunidad… y sin embargo estás aquí, atacando una base Hunter. Parece que los demonios simplemente no pueden redimirse—responde Drake con pesar.

Comienzo a sudar frio. La sensación de que hubo un detalle que dejé pasar me invade nuevamente.

—¿A qué te refieres?—pregunto sin saber si quiero escuchar la respuesta.

Drake suspira y mira hacia el suelo.

—¿Siquiera echaste un vistazo a la habitación cuando despertaste nuevamente? Si tan sólo hubieras hecho caso a las instrucciones que dejé en la nota tú y tu amiga hubieran sido liberados sin represalias… pero veo que me equivoqué al darte una oportunidad.

El alma se me va al suelo. Oh no… cuando desperté ya estaba en el laboratorio de Anthony. Los tres Hunters no contaban con que Anthony era mi aliado y mucho menos en que alguien llegaría a rescatarme. Probablemente entraron, tomaron el cuerpo de Leonore y se fueron sin revisar el lugar. Por las palabras de Drake, intuyo que dejó instrucciones que debí haber leído y seguido para que su plan se ejecutara sin problemas, un plan que no era malo y sólo pretendía demostrar nuestra inocencia.