Capítulo 17: Sangre, sudor y lágrimas

—Anthony, estás cegado por la ira, ellos son sólo una víctima más, no dejaré que te arrojes de lleno a los brazos de la muerte—la angustia se apodera de Karina.

—¡No, Alice me quitó demasiado como para perdonarla, aunque ya no soy un Hunter soy el último que queda que todavía puede hacer algo para detener su nuevo plan!—Anthony prepara un frasco.

—Anthony, por favor...

—¡No!—grita él.

—¡Por favor detente, Katherine diría lo mismo!—suelta Karina ya con desesperación.

Anthony se detiene. La ve a ella. Nos ve a nosotros. Ve a Alice.

Se desmorona en el suelo con llanto y dolor. Es la primera vez que lo veo así en la realidad, sin contar la visión atemporal.

—Esa tarde fui un cobarde, no le dije lo que sentía... ¡pude haberla salvado si segundos antes de la tragedia hubiera hablado!—Anthony golpea el suelo con impotencia.

Le encargo a Leonore contener a Alice. Me acerco a él.

—Escucha, me has ayudado mucho hoy, pude salvar a Leonore gracias a tu valentía... es tiempo de que salves a otro espíritu—coloco mi mano en su hombro.

El llanto de Anthony me parte el corazón. Estando cerca puedo ver que tiene algunas heridas profundas de arma blanca, probablemente entabló combate con Cotton Dreams y ganó.

—No soy enemigo, Anthony, soy tú amigo y alumno, un mocoso que aún debe aprender de este mundo—trato de animarlo.

Él silencia su llanto luego de unos momentos. Se levanta como un fénix, un rostro iluminado en convicción y valor. Observo sus manos temblar.

—Niño... gracias por todo—sonríe.

No entiendo sus palabras.

—Esta vez no cometeré el error que tuve la primera vez... Está vez mi prioridad es garantizar la seguridad de la persona que amo—se da la vuelta y camina hacia Karina.

—¿Eh?—ella parece nerviosa.

—Fueron dos años bastante divertidos, siempre te preocupaste por mí de la misma manera que yo por ti... desconozco el resultado de la batalla que está por venir, pero independientemente de lo que suceda, nuestro viaje acaba hoy—él la abraza fuertemente.

—Anthony—suspira Karina.

—Mi último regalo es la llave de tu libertad, sé feliz y descansa hasta que nuestros caminos se crucen de nuevo—Anthony besa a Karina con dulzura.

Al momento de hacerlo un rayo tenue de luz los ilumina, como si la luna estuviera conmovida por sus palabras. Poco a poco la luz se hace más y más intensa. El aura alrededor de Karina se hace muy brillante y ella se comienza a fragmentar en pequeños pedazos de luz.

—Felicidades, eres el primer espíritu en ser liberado—Anthony se despide de ella.

—¡Anthony, quiero quedarme contigo!—grita ella con lágrimas cayendo.

—Mi prioridad ya se ha cumplido... ya no me importa el final de la batalla—contesta.

—¡Anthony! ¡Te amo!—llora tratando de no irse.

Karina se fragmenta más y más. Las luces salen volando hacia arriba.

—En la escuela—le grita Anthony.

Ella pone una expresión de confusión.

—En la otra vida nos conoceremos en la escuela, tú tendrás problemas en matemáticas y yo te ayudaré... la chispa se encenderá hasta que confesemos nuestros sentimientos—Anthony suelta algunas lágrimas.

Karina intenta decirle algo pero se desvanece al momento de hacerlo. Puedo asegurar que su última palabra fue el nombre de su amado.

—Dios mío...

Leonore solloza un poco. Alice simplemente observa la escena, no interrumpe ni intenta matar a alguien.

Una esfera blanca baja del cielo y se posa frente a Anthony. Él se sorprende.

—Así que esto es lo que el jefe tanto anhelaba... La Promesa de Charlotte—dice asombrado.

¿La Promesa? ¿Qué demonios es eso?

—Mierda... yo quiero eso—Alice abre los ojos.

Anthony percibe las intenciones oscuras y dice dos palabras.

—¡La rechazo!—suelta.

La esfera sale volando hacia el cielo y desaparece con un poof.

—Que idiota, estuviste a punto de tener algo tan codiciado como La Promesa—Alice parece querer golpearse a sí misma.

—Obtener esa cosa nunca fue mi motivación... mi objetivo sigues siendo tú—Anthony prepara su cuchillo de caza.

Parece que esa arma es la favorita de los Hunters.

—Bien, estaba esperando cerrar trato contigo... pero te lo advierto, acabo de mandar a un Slayer al infierno—Alice se moja los labios.

—Pues le harás compañía dentro de pronto—Anthony comienza su ataque.

—Veamos si puedes tocarme con la punta del cuchillo... O si hoy cenas con la muerte—Alice se arroja sobre Anthony.

Todo parece ralentizarse...