PROLOGO

Esto no puede estar pasando.

¿Cómo llegamos a este punto?

Somos tres. Tres amigas, tres hermanas. Nuestra vida jamás estará completa si falta una. A pesar de todo lo que ha sucedido, estoy segura de que el lazo que nos une sigue siendo indestructible, es por eso que no puedo permitir esto, no podemos separarnos; jamás volveríamos a ser las mismas.

¿Acaso nuestra teoría está errada?

Sea como sea, no me importan las matemáticas ahora mismo. Necesito encontrarlas, tenemos que arreglar esto antes de que algo mayor suceda.

Solo espero, que no sea demasiado tarde.

…

9 de noviembre

5:23 pm

—Entonces ¿Qué pasó esa noche?

—Estábamos ahí, los cinco. Ella se enojó y se fue. Nadie volvió a verla en toda la noche —Paso una mano por mi cabello, desordenándolo, al tiempo que muevo mi pierda de arriba abajo en un gesto intranquilo.

—¿Qué me dices de las otras dos?

—Se fueron a los minutos, pensé que habían ido con ella, pero, no fue así. Tal parece que no regresó al departamento.

—¿Eran amigos?

—Por supuesto —respondo, veloz. Porque a pesar de todo, la consideraba mi amiga.

El detective anota algo en una tableta. Llevo una mano a mi nuca y la froto contra mis músculos contraídos para aliviar el dolor palpitante que me asalta.

—Haremos todo lo posible por encontrarla ¿Viste algo extraño en la fiesta o…?

Niego.

—Muy bien, eso es todo. Iré a hacer el reporte —El hombre palmea mi hombro al levantarse, luego se pierde de vista. Apoyo las manos sobre mis rodillas y me volteo para ver a esas dos chicas sentadas en el pasillo con la mirada perdida y llena de angustia.

¿En qué lio nos hemos metido?