Una oportunidad. -[Cap.29]

Mi corazón se detuvo luego de escucharla decir: "Intentémoslo". Seguramente se estaba burlando de mí y saldría con que eso también es una broma. ¿Porque cometo tantos errores?. Si la noche anterior tan solo me hubiese negado a aceptar la salida con Daniel, ni si quiera hubiera tenido la necesidad de volver a encontrarme con Nelly.
Aquello despertó en mi un sin fin de emociones, por un lado quería saltar y gritar como una loca pero por el otro, no podía creer lo que ella me estaba diciendo. ¿Por qué debería creer en sus palabras?.

—Lo único que debes hacer es decir que sí o que no. Se que sería un tanto estúpido pedirte una oportunidad pero quiero y siento que necesitó estar contigo.

Me gire un momento y descubrí a mi abuela parada por un lado, seguro que había escuchado todo lo que hablábamos y no quería interrumpir.

—Lamentó haber escuchado su conversación pero ninguna de las dos parecía muy interesada en lo que sucede al rededor.— soltó una carcajada leve que me provocó un sonrojo. Nelly también lucía un poco apenada. —Mayte tengo que ir a buscar mi paraguas a la tienda, no tardaré mucho.

Caminé en su dirección.

—¡Yo voy contigo!. Nelly ya se iba de todas formas.— mi abuela me miró con desaprobación y puso una mano en mi pecho para impedir que avanzará hacia la puerta. —¿Qué?.

—Puedo ir yo sola, además Nelly recién viene llegando. No tienes que ser tan descortés cuando viene de visita. No tardaré.

Rodé los ojos sin decir nada mientras miraba a mi abuela salir de la casa. No entendía porque mi abuela de alguna manera me empujaba hacía ella, es como si quisiera que las cosas entre ambas se arreglen.

—Tu actitud es un poco confusa, ¿Sabes?. No te entiendo Mayte, me dijiste que estás enamorada de mí y yo acabo de admitir que siento algo por tí, ayer me besaste y hoy me estás evitando de nuevo...-

—¿Por qué?. ¡Por dios Nelly!. Tu misma me lo dijiste, tu no quieres nada serio. Solo quieres jugar conmigo, ¡Vas a jugar a la parejita feliz mientras continuas buscando "sexo casual", no pienso dejar que rompas mi corazón nuevamente.

Ella suspiro y comenzó a dar algunos pasos para llegar hasta donde me encontraba. Yo quería un amor bonito, de ese del que dura toda la vida solo con ella. Por alguna razón se había vuelto parte importante en mi vida, no la conocía de mucho pero en el momento que ella choco conmigo tuve un sentimiento que jamás había sentido por nadie. No sería fácil olvidar ese par de ojos verdes que me miraban con un poco de desesperación reflejada en ellos.

Debía sincerarme conmigo misma y aceptar que no podía solo dejarla ir, mi corazón es quien se opone e insiste en que debo darle una oportunidad. ¡Porque demonios claro que lo deseo!. Anhelo poder entregarme a ella en cuerpo y alma, dejar que ella sea mi centro de atención en todo momento. ¿Pero de qué serviría?. ¿Por cuánto tiempo podría ella jugar a la pareja feliz?.

—Quiero demostrarte lo contrario...- tampoco mentí cuando dije que había decidido dejar aquello atrás. Fue muy bueno en su momento pero no es algo que quiera más en mi vida. Por culpa de mi manera para enrollarme con demasiadas personas, siento que te estoy perdiendo...-

Mi pulso cardíaco aceleró su pasó sin que yo pudiera hacer algo para evitarlo. No es culpa mía, simplemente la mujer parada frente a mí dominaba todos mis sentidos. Me gustaba demasiado, había anhelado escuchar aquello por mucho tiempo. 
Sin embargo la sensación de temor no se desvanecía en ningún momento, no podía ser optimista después de lo que sucedió.

—¿No vas a decir nada?.

Mordí mi labio inferior con inpaciencia y negué en repetidas ocasiones provocando un suspiró en Nelly.

—Lo siento Nelly, pero no puedo hacerlo. Algo me dice que todo saldrá mal.

Su rostro denotaba decepción, sin embargo prefería mantener las cosas como estaban a llevarme de nuevo una desilusión.

•••

Luego de que Nelly se marchará aquella mañana, creí que no me volvería a buscar pero fue todo lo contrario. Pasaba por mí en las mañanas para acompañarme a abrir la tienda de mi abuela, me buscaba incluso con más frecuencia que antes y no lograba comprender. Creí que todo había quedado claro, sin embargo ella insistía en acompañarme a todos los sitios a los que yo iba. Incluso le dije que no era necesario que hiciera todo eso pues a decir verdad no entendía que era lo que ella deseaba lograr con eso.

Sasha se reunía también con nosotras y al parecer era a la única a la que no le incomodaba la presencia de la peli roja. Parecían llevarse mejor con el paso de los días que incluso comencé a sentirme un poco excluida. 
Justamente nos encontrábamos en la sala de mi casa sentadas mientras esperábamos que Nelly volviera de comprar unas cosas que según nos dijo; su madre le había pedido.
Mi charla con Sasha iba maravillosamente hasta que ella decidió sacar el tema de Nelly una vez más como siempre que salíamos últimamente.

—¿Y aún no has pensado en cambiar de opinión con respecto a Nelly?.

Le dí una ligera mirada de reproche mientras suspiraba. ¿No sé suponía que la mejor amiga de Sasha soy yo?. Últimamente ella y mi abuela suelen tocar el tema de la oji verde con frecuencia en cada oportunidad que tienen. Lo detestaba porque me hacían sentir que estaba siendo injusta con ella cuando la única que salió lastimada soy yo.

—¿Por qué debería hacerlo?.

—No lo sé, es solo que no me gusta verte así de aguitada. Ni si quiera cuando supiste que Marlon te engañaba te pusiste así. Es decir, claro que dolió pero cualquiera puede darse cuenta que las estás pasando peor ahora.

Aclaré mi garganta y me acomodé mejor sobre el sofá.

—Ella te mando a qué hablarás conmigo, ¿No?.

Hizo una mueca de ofensa y negó en repetidas ocasiones.

—Por supuesto que no. ¿Cómo puedes creer eso?. Yo solo quiero saber que pasa por tu mente, Nelly cometió un error pero eso no quita que sea una chica genial.