Capítulo 13.

¿Siempre será así?

Legarda.

A un día de terminar la gira. Mejor dicho, en un par de horas de cerrar este cicló. El mejor de mi vida.

Salí al balcón a tomar un poco de aire. Mejor dicho, me recosté sobre el suelo con la mirada clavada en el cielo como siempre. Los pasos de Alex no tardaron en seguirme, no la observe como tal, pero sentí cuando se recostó junto a mí.

—¿Recuerdas la vez que te subiste a la punta más alta de un árbol porqué decías que si Leen, no regresaba esa misma noche te aventarías al riscó?

Sonreí para mí mismo.

—Sí. Esa misma noche regreso del castillo de Jaden echando humo por los ojos, tomo un gran impulso hasta llegar a dónde me había quedado todo el día y me tomo por el brazo antes de aventarme hacía abajo yo sentía que estaba volando por primera vez en toda mi vida.

—Creo que en ese momento fue uno en los que más miedo le tuve —confeso.

—¿Por qué miedo?

—Miedo de que no se contuviera y ahí mismo te asesinara. Tenía miedo a que ella perdiera el control y todo lo que estaba pasando por su cabeza estallase contigo en ese preciso momento. No sé, Lu, ella nunca fue buena con nadie ni siquiera conmigo, pero estuvo ahí cuando yo la necesite y cuando ella más me necesito yo nunca dude en estar para ella —suspiro recargando su cabeza sobre mi hombro—. Ella jamás estuvo obsesionada con el poder ni mucho menos por una corona o un lugar dentro de la sociedad. Ella no era una princesa justa pero tampoco le gustaban las injusticias y eso es algo que aún no termino de entender como una chica sin corazón estaba destinada a vivir por miles de años siendo única tendía que decidir dormir mil años solo para no destruir el mundo. Nunca entenderé eso.

—No lo sé, Alex —comienzo a hablar bajito—, ella siempre tomada decisiones que al principio parecían malas, pero al final han resultado tener sus frutos. Tú por fin has soltado a Laurie y él ha decidido segur su vida en España, hasta formado lazos oscuros y secretos con los Black y con ese tal Elija —le recuerdo—. En todo este tiempo hemos evitado el tener que mencionar a William por lo mismo no sabemos si sea o no él.

—No lo sé, creo que tienes razón, Lu.

—Da igual el ahora por qué antes todo era mejor.

—Ella era la mejor parte de sentirnos perdidos.

—Siempre lo será, Alex, siempre será lo mejor.

Nos quedamos en silencio las próximas dos horas, ahí recostados en el suelo mirando la luna. Disfrutando del silencio que hace a estas horas de la madrugada cuando todo el mundo está durmiendo y no existe ninguna alma por las calles haciendo ruidos. No hay monstruos que salgan de noche y hagan que la mundanidad le tenga miedo a la oscuridad, no existe oscuridad en este mundo paralelo. Todo se ha quedado atrás. En dónde se debe quedar, aunque sea doloroso aceptarlo es mucho mejor vivir con el recuerdo de lo que era y no de lo que será.

Siempre me pregunto por qué razón Darleen tuvo que tomar todas esas decisiones sola, por qué nunca pidió ayuda cuando inicio la guerra, por qué carajo lo hizo solo.

Creo que nunca terminare de entender la razón exacta del por qué Alana está en una realidad paralela a la de nosotros, Jaxon y Kirtash están en una institución lejos de la sociedad en dónde solo se tiene a ellos dos solos. Alex, Zoé y yo seguimos juntos, aunque a veces tomemos caminos distintos. Caminos que nos ponen cada día más en peligro, pero sobre todo cada día estamos más cercas de que él descubra que seguimos vivos, qué ella no se deshizo de nosotros y venga a buscarnos.

Ella dejo preguntas sin respuestas y respuestas sin preguntas.

Eso era lo que a ella la hacía especial, sus secretos.

Era un misterio poderla entender en vida, pero en muerte era aún más difícil hacerlo.

Ya no quiero que sea así…